La historia real que hay detrás de ‘El castillo de arena’, la película de 90 minutos que ya es uno de los grandes éxitos de Netflix en 2025

La resiliencia de los niños es clave en la trama y está llena de simbolismos

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La familia de Jana en
La familia de Jana en 'El castillo de arena' (Tráiler Netflix)

Uno de los últimos estrenos de Netflix está captando la atención global de todos los espectadores de la plataforma. Desde su lanzamiento el pasado viernes 24 de enero, El castillo de arena se ha convertido en el primer gran éxito de 2025. El drama libanés, dirigido por Matty Brown ha escalado espontáneamente por el podio hasta llegar al primer puesto.

Durante los 90 minutos que dura la cinta, el espectador podrá experimentar una narrativa envolvente. La trama ofrece un paseo por la vida de Jana, una niña que lucha por sobrevivir junto a su familia, mientras sortea los horrores de una guerra y la inevitable migración.

Los protagonistas acaban en una jaula paradisiaca, donde se sacarán algunos secretos y aflorarán tensiones internas. A pesar de que no es la primera película que expone las dificultades de un naufragio, o la supervivencia en una isla desierta, el metraje de Brown mantiene en constante tensión al espectador.

La realidad que se esconde detrás de ‘El castillo de arena’

Yasmine, la madre de Jana
Yasmine, la madre de Jana en 'El castillo de arena' (Tráiler Netflix)

Tal vez, lo que más llama la atención a la audiencia es saber lo que verdaderamente esconde El castillo de arena. Y es que, no es una mera historia de supervivencia, sino que es una clara reflexión sobre la situación actual de los millones de migrantes y refugiados desplazados por todo el globo terráqueo.

Aunque la historia de Jana y su madre Yasmine, interpretada por Nadine Labaki, no cuenta la historia de una familia real, sí que está conectado con algunos eventos por lo que pasan miles de migrantes. Prueba de ello se observa cuando la madre expresa su frustración por haber sido engañada: “Ya deberían estar aquí. Nos han engañado. Si no hubiéramos pagado todo”.

Concretamente, la película utiliza el marco histórico de las olas de migración que llegaban a Grecia desde Turquía, tras el ánimo de las autoridades turcas para que los refugiados solicitasen asilo en su país vecino. Esto provocó un cierre de fronteras que generó el naufragio de hombres, mujeres y niños en el mar Egeo. En paralelo, la cinta introduce sutilmente esta referencia cuando la radio de un barco anuncia la muerte de cientos de muertos y desaparecidos. Sin duda, se refuerza una denuncia social muy potente entre líneas.

Adan y Jana jugando con
Adan y Jana jugando con una cometa en 'El castillo de arena' (Trailer Netflix)

A medida que la historia avanza, los niños se ven envueltos en un rol de supervivencia, que sus padres no son capaces de obtener, ya que se quedan incapacitados. Asimismo, se puede ver como, Jana y su hermano, Adam, tratan de sobrellevar la situación desesperanzadora, simbolizando la resiliencia que muchos otros niños han tenido que soportar.

El personaje de Jana es uno de los más interesantes, ya que la historia se desarrolla en torno a lo que esta imagina. Un ejemplo de ello sucede con la “isla de los conejos” que se inventa en su mente, pues simboliza la necesidad de aferrarse a un recuerdo feliz, anterior a la guerra. Sin duda, la película ha sabido como humanizar un problema global e invita a los espectadores a una reflexión más empática sobre lo ocurrido en 2020.