Cómo mejorar la testosterona, según una doctora: solo necesitas aplicar estas dos medidas en tu estilo de vida

La testosterona es la hormona sexual masculina, pero tanto hombres como mujeres deben atender a algunas recomendaciones para cumplir con los niveles adecuados

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La médico Isabel Vina explica
La médico Isabel Vina explica en su vídeo cómo optimizar los niveles de testosterona. (Montaje Infobae España)

La testosterona es, por excelencia, la hormona asociada al sexo masculino, ya que este esteroide juega un papel fundamental en el desarrollo y el mantenimiento de las características sexuales de los hombres. Este es su carácter más conocido aunque, sin embargo, esta hormona se encuentra también, aunque en menor medida, en las mujeres. Según el diccionario médico de la Clínica Universidad de Navarra, la testosterona también tiene presencia en las glándulas suprarrenales tanto masculinas como femeninas y, además de su función para el crecimiento y el desarrollo sexual, esta hormona del grupo de los andrógenos es vital para otras funciones orgánicas.

Por ejemplo, en los hombres, la testosterona juega un papel fundamental en el desarrollo de las características sexuales secundarias como pueden ser la voz, el vello facial y corporal o la distribución de la grasa corporal. También influye en la función sexual y en la fertilidad. Aún así, el aspecto menos conocido en el que los niveles de testosterona pueden ser determinantes está relacionado con la masa muscular y la densidad ósea, así como con factores cognitivos, el estado de ánimo y el comportamiento. Así, en este sentido, la testosterona es una hormona que juega un papel importante tanto en hombres como en mujeres.

Un hombre y dos mujeres
Un hombre y dos mujeres haciendo ejercicio caminando por la calle (Freepik)

Una hormona sexual masculina que está presente en hombres y en mujeres

Los niveles de testosterona se presuponen más altos en el sexo masculino que en el femenino, aunque lo cierto es que, según especifica la Clínica Universidad de Navarra en su diccionario médico, esta hormona tiende a fluctuar diariamente y a variar dependiendo de la persona y de otros factores como la edad, el estilo de vida, el estado de salud y los trastornos hormonales. Por lo general, en los hombres, los niveles de testosterona aumentan durante la adolescencia y alcanzan el pico máximo alrededor de los 20 años, hasta que comienzan a disminuir a partir de los 30.

En caso de que exista un déficit en estos niveles, las causas pueden ser muy variadas, aunque las más normales se refieren a cuestiones farmacológicas y a trastornos o enfermedades como trastornos genéticos, enfermedades del hipotálamo, infecciones o traumatismos. En uno de sus vídeos de TikTok, la médico especialista Isabel Vina ha especificado algunas de las maneras de “optimizar” la testosterona: “Cada vez más somos conscientes de la importancia de esta hormona, mucho más allá de la salud muscular en hombres y en mujeres”, explica la experta.

Una variación en el receptor
Una variación en el receptor de la testosterona predispone a los hombres a sufrir covid más grave. (EFE/EPA/ABED AL ASHLAMOUN/Archivo)

La importancia de mantener unos niveles adecuados y algunos consejos para hacerlo

Isabel Vina recuerda que, debido a que cada vez las personas viven más tiempo, “somos más susceptibles a la caída de esta hormona” y que, aunque esto es algo normal con la edad, otros aspectos del estilo de vida de las personas tampoco ayudan a mantener los niveles de testosterona: “Por ejemplo, el alcohol, entre otras cosas, favorece la conversión de testosterona a estradiol”. El estradiol es la hormona sexual femenina y, aunque en hombres sí cumple alguna función relevante, está más relacionado con la regulación de la producción de espermatozoides, el libido y la función eréctil.

En este sentido, la médico recomienda algunas medidas para optimizar la testosterona y, en primer lugar, incide en el porcentaje de grasa corporal: “El exceso de grasa corporal se asocia de manera directa con una disminución de la testosterona”. Además, otro consejo de Isabel Vina es mejorar el sueño ya que, dice, por la noche es cuando “suceden los picos de hormona de crecimiento y de testosterona”: “Una privación de sueño, tanto aguda como crónica, se asocia a una bajada de testosterona”.