Una de las situaciones que peores tragos supone es la de pasar por la pérdida de un ser querido. Dejar ir a una persona cercana en tu vida no es fácil y requiere de cierto tiempo para superarlo. No obstante, como trabajador ese paso es francamente complicado, puesto que tan solo se tendrán unos días de permiso para velar y dar el último adiós a esa persona especial. Sin embargo, cabe destacar que no siempre es así. Existen casos en los que el fallecimiento de un familiar no te permite contar con ningún día libre. Todo ello depende del grado de consanguinidad entre ambos.
De esa forma, en la clasificación existen cuatro grados, que van de mayor a menor importancia según el lazo existente entre las personas. Acorde a lo establecido por la ley, se tiene el derecho de disfrute de esos permisos de días con los dos primeros escalones: primer y segundo grado. Por tanto, como trabajador es importante tener claro qué familiares están en cada encuadre para ser conscientes de cuándo se pueden solicitar los días libres.
Qué dice la ley
Para los casos de los fallecimientos, la ley recoge que se tendrá el derecho a disfrutar de dos días libres, siempre y cuando estos sean pertenecientes al grado uno o dos. Para ser más concisos, en ese primer encuadre están padres, hijo, suegros y yernos/nueras. Mientras que en segundo término están abuelos, hermanos, nietos y cuñados. Además, en caso de necesitar un desplazamiento, estos días se doblarán y pasarán a ser cuatro. Incluso aquí hay pequeños líos, ya que la ley no esclarece lo que considera como desplazamiento, y la empresa no tiene capacidad de decisión sobre un artículo del Estatuto de los Trabajadores.
Por lo tanto, si nos acogemos a la clasificación, los tíos están junto a los sobrinos, bisnietos y bisabuelos en el tercer grado, por lo que no se corresponden días libres por esa pérdida. Consecuentemente, no se podrá acceder a los dos días libres que sí que se dan en los casos de los fallecimientos de personas del primer y segundo grado. Sin embargo, todo depende de cada convenio colectivo de cada sector, donde puede haber ciertas modificaciones y poder tener acceso a algún tipo de permiso.
Alternativas para obtener los días
Aunque de acuerdo con lo estrictamente legal no se dispone de días libres tras la perdida de un tío, no todo está perdido. La solución para encontrar el permiso reside en alcanzar un pacto con la propia empresa. Al hilo de ello, se podrá llegar a ciertos acuerdos, que no serán obligatorios por parte de la compañía, pero que se pueden llegar a conseguir.
Comúnmente, estos casos de fallecimientos son motivo de pena y de empatía por parte del resto de personas. No obstante, algunas de las alternativas podrían ir del lado de recuperar los días de alguna forma o de ser sustraídos de asuntos propios o de los días que le correspondan de vacaciones, según el acuerdo al que se llegue.