Ringo Starr y Roger Daltrey: la pelea que sacude a The Who antes de su gira de despedida

El enfrentamiento entre Ringo Starr y Roger Daltrey generó un fuerte impacto en el entorno de The Who, luego del polémico despido de Zak Starkey, baterista de la banda e hijo del exintegrante de The Beatles. Lo que comenzó como un incidente técnico durante un concierto en Londres derivó en una disputa pública entre dos leyendas del rock británico, con implicaciones personales, familiares y artísticas.

El episodio se desencadenó en marzo durante una presentación en el Royal Albert Hall, donde The Who interpretaba The Song is Over. Según reportó The Guardian, Daltrey, de 81 años, se mostró visiblemente frustrado por la intensidad de la batería y, ante la audiencia, lanzó una crítica directa a Starkey: “Para cantar esa canción necesito oír las teclas y no puedo. Solo tengo la batería haciendo ¡bum, bum, bum!”. La escena fue registrada en video y se viralizó en redes sociales, amplificando la tensión.

La reacción de Ringo Starr fue inmediata y contundente. De acuerdo con declaraciones recogidas por Rolling Stone, el exbaterista de The Beatles expresó su desagrado con la conducción de Daltrey al frente de la banda: “Nunca me gustó la forma en que ese hombrecito dirige su banda”, afirmó en privado, según relató su hijo. La frase marcó un punto de quiebre, transformando un desacuerdo musical en un conflicto personal entre dos figuras icónicas de la música.

Zak Starkey, integrante de The Who desde 1996 y ahijado del legendario baterista Keith Moon, no tardó en defender su posición. Aseguró que el problema no fue suyo, sino de Daltrey, quien —según su versión— entró fuera de tiempo debido a problemas para escuchar el piano. “Entró cuatro compases antes”, declaró. Aunque ofreció disculpas en redes sociales, reiteró que no identificó errores en su ejecución.

La relación entre Starkey y la banda se deterioró rápidamente. Dos semanas después del incidente, el baterista fue despedido. Tres días más tarde, fue reincorporado tras conversaciones internas y la mediación de Pete Townshend, guitarrista del grupo. Durante ese breve retorno, Starkey publicó una disculpa dirigida a Daltrey, que fue interpretada como un intento de calmar los ánimos. Townshend respaldó a Daltrey, afirmando que “no hizo nada malo”, aunque admitió que Starkey “cometió algunos errores”.

La tregua fue efímera. Diez días después, Zak Starkey recibió un mensaje que indicaba que su regreso “nunca iba a funcionar” y fue animado a comunicar su salida como una decisión propia. En sus declaraciones, señaló que, pese a las disculpas, nunca asumió responsabilidad por lo ocurrido y reiteró que el error fue de Daltrey.

El conflicto trascendió lo musical y adquirió una dimensión familiar. En palabras de Zak, el respaldo de su padre fue un alivio: “Muy orgulloso de mi padre por defenderme”. La intervención de Ringo, sumada a su crítica hacia Daltrey, evidenció una rivalidad que parecía latente desde hace años. Si bien no hay antecedentes directos de enfrentamientos entre ambos, las declaraciones recientes sugieren tensiones acumuladas.

Además, Zak aportó una anécdota con John Entwistle, exbajista de The Who, que sugiere un trasfondo económico. Según relató a la revista, preguntó en una ocasión si Daltrey aún conservaba ganancias de la última gira, y Entwistle respondió: “Aún tiene el dinero de la primera”.

Mientras tanto, The Who continúa los preparativos para su gira de despedida en Estados Unidos, prevista para este verano. Zak Starkey no formará parte del tour, poniendo fin a una etapa de casi treinta años en la banda. Su reemplazo aún no fue anunciado.

La disputa entre Ringo Starr y Roger Daltrey dejó expuesta una fractura profunda. Lo que pudo resolverse como una diferencia técnica se convirtió en un conflicto de lealtades, liderazgos cuestionados y viejas tensiones dentro de uno de los grupos más influyentes del rock.