Qué dijo el ministro de Trabajo sobre el bono para jubilados que se analiza para los meses de julio y agosto

El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, dijo que el Gobierno ya mostró una conducta tendiente a aumentar los haberes de jubilados de menores ingresos por encima de la inflación y que esa conducta, seguramente, se mantendrá en el futuro. Es así que un bono para jubilados a partir de julio “está en evaluación”. También se refirió a la reapertura de paritarias dado que los acuerdos salariales quedaron retrasados respecto del avance de los precios.

“[El bono para jubilados] está todo en evaluación. Hay una conducta constante del Gobierno de atender a aquellos sectores de los jubilados con menores ingresos de modo tal de mantenerlos por encima de la inflación, así que entiendo que esa conducta se va a mantener. Está en evaluación”, dijo Moroni en declaraciones a Radio 10.

“Igualmente, les quiero recordar que el RIPTE -el sistema de ajuste de las jubilaciones- en la medida en que vayamos domando un poco la inflación va a haber un crecimiento natural porque el RIPTE se mide de atrás, se mide atrasado”, agregó el funcionario.

En estos días, y aunque aun no esté definido el formato —puede ser un bono o algún otro instrumento— ni tampoco si abarcará solo a quienes cobren los haberes mínimos, como sucedió con pagos anteriores, desde el Gobierno admiten estar planificando un refuerzo a los haberes jubilatorios para aplicar en los meses de julio y agosto.

Fuentes oficiales destacaron que “siempre está en análisis” y, de ser necesario, se realizará en el caso de que las jubilaciones pierdan contra inflación, para lo que se debe esperar conocer las cifras de la inflación de junio, que el Indec difundirá el próximo jueves 15 de julio.

Moroni se refirió también a la reapertura de paritarias, luego de que las pautas de inflación del 29% y el 31% para este año que se marcaron originalmente desde el Gobierno quedaran superadas rápidamente en las previsiones de especialistas.

“Es el objetivo que nos pusimos ya desde el año pasado, que los salarios le ganaran a la inflación. La realidad es que el año pasado durante la pandemia mantuvimos vigente el mecanismo de negociación paritaria y pese a ser el peor año de la historia económica argentina del que tengamos memoria los salarios de convenio le ganaron un poquito a la inflación y los salarios de bolsillo perdieron menos de un punto, en un año en donde el producto bruto interno cayó más de 10 puntos. Eso no fue común en todo el mundo. La realidad es que el desempeño de los salarios en la Argentina, en el sector formal ha sido muy bueno para un año de terrible crisis económica”, dijo Moroni.

“Y este año dijimos seguimos con las paritarias, aplicamos el mismo criterio de negociación para los salarios mínimos. En su momento pactamos un 35% pero dijimos que si era necesario íbamos a hacer las adecuaciones que se requirieran para ganarle a la inflación y eso es lo que estamos haciendo”, agregó el funcionario nacional.

“Para tomar una decisión rápida no hemos convocado al consejo del salario mínimo, sino que lo mismo que pactó el consejo que tiene 32 miembros lo adelantamos en el tiempo. De ese modo conseguimos que el salario mínimo, estos meses, le vaya ganando a la inflación. Y hacia fin de año, septiembre octubre, revisaremos el número final si esto es necesario”, añadió.

“Nosotros vamos a reabrir todas las negociaciones las veces que sea necesario para cumplir con el objetivo básico, que es que los salarios le ganen a la inflación”, afirmó y concluyó: “A medida que alguna paritaria haya fijado un régimen de incrementos en donde los salarios empiecen a perder nosotros íbamos a reabrir las negociaciones. De hecho ya lo hicimos con el sector bancario, que había fijado una pauta anual que ya en julio le empezaba a quedar retrasada, abrimos las paritarias y se empezó a negociar. Y también le pasó con empleados de casas de rentas. En cada sector en que vaya a pasar eso, reabrimos la negociación. Estamos haciendo lo que dijimos que íbamos a hacer”.

Por último, Moroni aseguró que se ve un crecimiento del empleo que es sin embargo heterogéneo.

“La tasa de desocupación nos dio una leve disminución en el primer trimestre de 2021 respecto del 2020. Y quiero aclarar, porque hubo algunas informaciones respecto a que esto era porque había disminuido la población activa. La población activa está en los mismos niveles de los últimos 10 años e incluso por encima del 2017, está en 47% de la población. O sea que efectivamente estamos teniendo un crecimiento, ahora es un crecimiento heterogéneo”, dijo.

“Tenemos sectores de la actividad como es la industria manufacturera, la construcción, sanidad y algunos servicios a las empresas, como servicios de informática o logística que están creciendo bien, y tenemos otros sectores lamentablemente afectados por las restricciones como es gastronomía, turismo, muy demandantes de mano de obra, que no están viendo el mismo nivel de crecimiento”, agregó.

“Ahora estamos por publicar datos del SIPA de abril en donde vemos un crecimiento del 0,7% del empleo privado, que es una muy buena tasa de crecimiento, son unos 40.000 puestos. ¿Qué es lo bueno de esto? Un 0,7% no nos alcanza, pero lo bueno de esto es que cuando las restricciones aflojan como fue en el mes de abril, el empleo crece. O sea que todo está dado para que a medida que las restricciones vayan aflojando el empleo va a crecer”, concluyó.

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