Después de culminar un semestre para el olvido con las Chivas Rayadas de Guadalajara, el delantero mexico-peruano, Santiago Ormeño, se convirtió en nuevo jugador de los Bravos de Juárez tras un acuerdo entre ambas directivas para cederlo en calidad de préstamo por un año con opción a compra.
Fue a través de un curioso video en las redes sociales del equipo fronterizo, donde dieron a conocer de manera oficial la llegada del ex atacante del “Rebaño Sagrado”, un futbolista que en su momento generó mucha polémica entre la afición de los chiva-hermanos por el tema de la nacionalidad del delantero, pues a pesar de haber nacido en la Ciudad de México, tiene ascendencia peruana por su padre y abuelo.
Llegó a la “Perla Tapatía” como uno de los refuerzos estelares del club para el Apertura 2022 ante la falta de un goleador, pues una lesión de José Juan Macías a principios de julio de ese año, lo privó de poder disputar el certamen y con ello, obligó a la directiva rojiblanca a fichas si o si a un nuevo delantero. Independientemente de el tema con su nacionalidad, Ormeño ya era un jugador probado en la Liga MX.
Con poca aprobación por parte de la “nación chiva”, Santiago debutó con la camiseta del “chiverío” para la jornada 5 del certamen ante Querétaro disputando apenas 30 minutos. No obstante, fue hasta su quinto encuentro con el club cuando logró estrenarse como goleador después de marcar el único gol del encuentro y dar la victoria de su equipo ante los Rayados de Monterrey; desafortunadamente, ese sería el primer y último tanto con la camiseta rojiblanca.
Después de culminar el certamen y no haber podido clasificar si quiera a la liguilla tras caer en la ronda de repechaje ante “La Franja”, y ya no entrar en los planes del nuevo estratega del club, Paunovic, Ormeño disputó solamente 13 partidos con las Chivas y acumulando un total de 399 minutos. Como ya se mencionó, solo registró un gol.
Realmente, su mejor época como profesional la vivió hace un par de años cuando era jugador del Puebla y donde logró marcar 17 goles en 33 encuentros disputados.
En cuanto a la peculiar manera en la que los Bravos lo presentaron como su último refuerzo para el presente certamen, en las imágenes se puede ver un OVNI que llega a la ciudad de Guadalajara para abducir al delantero de doble nacionalidad, para posteriormente llegar a la localidad de Juárez y entregarlo en el hotel de concentración.
Su decisión para defender los colores de la Selección Peruana y polémica con el Guadalajara
Si bien, el canterano del América es un jugador que nació en la Ciudad de México, cuenta con la nacionalidad peruana por su abuelo y padre. Su gran nivel con el conjunto de Puebla y León, hizo que los reflectores de tanto el combinado azteca, así como el peruano se fijaran en él, pero al final se terminó decidiendo por la blanquirroja.
Por obvias razones, la afición rojiblanca expresó su disgusto por esta opción, pues prefirió defender los colores de la selección sudamericana. Según los lineamientos bajo los que se rige esa norma en la institución del Guadalajara, en el equipo solo pueden jugar futbolistas mexicanos y que hayan elegido jugar con la Selección Mexicana.
Partiendo de esa premisa, se puede considerar que Santiago si era totalmente un futbolista que podía defender los colores del “rebaño sagrado”, pues legal y políticamente hablando, según marca la constitución mexicana, una persona también puede ser considerada mexicana aunque alguno de sus padres tenga la nacionalidad por naturalización y aunque haya nacido en el extranjero.