Israel reiteró su compromiso con las libertades religiosas de los musulmanes en el Monte del Templo de Jerusalén

Fuentes israelíes atribuyeron los enfrentamientos en el sitio a un puñado de palestinos incitados por las redes sociales, que usan la mezquita de Al-Aqsa como refugio para agredir a las fuerzas policiales. Sin embargo, subrayan que los propios fieles palestinos están hartos de estos radicales

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Las fuerzas de seguridad israelíes se encuentran en un techo cerca del complejo que alberga la Mezquita Al-Aqsa, conocida por los musulmanes como el Noble Santuario y por los judíos como el Monte del Templo, luego de los enfrentamientos en el complejo en la Ciudad Vieja de Jerusalén el 15 de abril de 2022. (REUTERS/Ronen Zvulun)
Las fuerzas de seguridad israelíes se encuentran en un techo cerca del complejo que alberga la Mezquita Al-Aqsa, conocida por los musulmanes como el Noble Santuario y por los judíos como el Monte del Templo, luego de los enfrentamientos en el complejo en la Ciudad Vieja de Jerusalén el 15 de abril de 2022. (REUTERS/Ronen Zvulun)

Israel está comprometido con las libertades religiosas de los musulmanes en el la zona del Monte del Templo de Jerusalén (Haram al Sharif para los musulmanes) y calificó de “mentira” las insinuaciones de grupos terroristas palestinos de que busque limitar el culto en el complejo, bajo tensión desde el viernes, en coincidencia con la Pascua judía (Pésaj) y las grandes concentraciones por el mes sagrado musulmán del Ramadán, según indicaron este miércoles fuentes israelíes.

Las fuentes subrayaron que no hay cambios en el status quo: los fieles musulmanes son libres de ingresar a la mezquita de Al-Aqsa, donde los enfrentamientos entre manifestantes palestinos y las fuerzas israelíes dejaron más de 170 heridos el viernes y el domingo. Por otro lado, sigue la prohibición para los judíos de rezar en el recinto del Monte del Templo, que solo pueden visitar en grupos pequeños, en períodos preestablecidos. Israel no busca cambiar esta situación, dijeron las fuentes.

Las tensiones en el este de Jerusalén se han disparado en las últimas semanas, en medio de casi un mes de violencia mortal en Israel y Cisjordania, con el festival de la Pascua judía coincidiendo con el mes de ayuno musulmán del Ramadán.

Las fuentes atribuyeron los enfrentamientos en el Monte de Templo a un puñado de palestinos incitados por las redes sociales, que usan la mezquita de Al-Aqsa como un lugar para esconderse y arrojar piedras y fuegos artificiales a las fuerzas policiales. Sin embargo, subrayan, los propios fieles palestinos están hartos de estos jóvenes radicales, que llevan la violencia a un lugar de culto.

Manifestantes palestinos chocan con las fuerzas de seguridad israelíes en el complejo que alberga la mezquita de Al-Aqsa, conocida por los musulmanes como Noble Santuario y por los judíos como Monte del Templo, en la Ciudad Vieja de Jerusalén el 15 de abril de 2022. REUTERS/Ammar Awad
Manifestantes palestinos chocan con las fuerzas de seguridad israelíes en el complejo que alberga la mezquita de Al-Aqsa, conocida por los musulmanes como Noble Santuario y por los judíos como Monte del Templo, en la Ciudad Vieja de Jerusalén el 15 de abril de 2022. REUTERS/Ammar Awad

Las fuentes también aseguraron que Israel no está interesado en confrontaciones y que quiere que las funciones religiosas puedan desarrollarse en modo pacífico. Por otro lado, dijeron que cuando la policía es arrojada con piedras pesadas y fuegos artificiales, y cuando los palestinos se atrincheran en la mezquita y arrojan piedras a los judíos que rezan en el Muro de los Lamentos, la policía debe intervenir para controlar los disturbios, a fin de garantizar la seguridad tanto de los miles de fieles musulmanes en el recinto como de los judíos que rezan debajo.

Las fuentes lamentaron sin embargo que las organizaciones terroristas y otros organismos se complacen en hacerse eco de las noticias falsas, como si Israel estuviera interesado en retener el culto musulmán. “Esta es una mentira, utilizada para empujar cínicamente a los palestinos hacia la violencia”, dijeron las fuentes.

Detener la violencia

Mientras sigue la tensión en la zona, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, prohibió este miércoles al legislador de extrema derecha Itamar Ben Gvir ingresar a las áreas musulmanas de la Ciudad Vieja de Jerusalén y realizar una manifestación.

Bennett aceptó la recomendación de los jefes de seguridad de evitar que Ben Gvir entrara por la Puerta de Damasco.

“No tengo intención de permitir que la política mezquina ponga en peligro vidas humanas”, dijo Bennett en un comunicado.

“No permitiré que una provocación política de Ben Gvir ponga en peligro a los soldados de las FDI (ejército israelí) y a los agentes de policía israelíes, y haga que su ya pesada tarea sea aún más pesada”.

La policía israelí había prohibido anteriormente que la manifestación se llevara a cabo en la ruta propuesta.

El año pasado, el grupo terrorista Hamas lanzó una andanada de cohetes hacia Israel cuando una marcha similar iba a comenzar en la Ciudad Vieja.

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