El Comandante Azul, el misterioso personaje que quiere el trono de “El Marro”, pero no está solo en la lucha

Capturado el líder, viva el líder. Así puede resumirse los días recientes del Cártel Santa Rosa de Lima luego que José Antonio Yépez “El Marro” fue capturado por las autoridades y alguien parece que quiere ocupar su puesto.

Ese alguien es un personaje que emergió en la escena del mapa del crimen organizado en días recientes: El Comandante Azul.

Su nombre propio es un misterio, al menos públicamente. Su aparición la hizo como acostumbra recientemente los cárteles: videos en redes sociales.

Acompañado de una decena de hombres con armas largas y dos vehículos blancos de fondo y un paisaje verde, el Comandante Azul usó el video para presentarse como la voz del Cártel Santa Rosa de Lima.

El hombre lanzó una advertencia a rivales y traidores a la organización criminal que lideraba “El Marro”, cuyo negocio principal era el robo de combustibles, conocido popularmente como huachicoleo.

El Comandante Azul arremetió contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), con el cual los de Santa Rosa de Lima disputan en control del territorio del Bajío mexicano, los caminos de la zona y el negocio del huachicoleo.

“El siguiente video es para reafirmar lo dicho por el comandante en el primer video: Cártel Santa Rosa de Lima está más fuerte que nunca, la guerra continuará y seguirá contra los putos jaliscas, y no permitiremos el asentamiento en el estado de ninguna perra flaca, ya déjense de ma... jaliscas, aquí Guanajuato es para Guanajuato. Esta célula que ven aquí no le aflojara ningún municipio del norte de Guanajuato ¡Guanajuato es para Guanajuato, ustedes son turistas!”, advierten a través de una grabación.

“Puro Comandante Azul”, arenga el hombre encapuchado, por lo que su rostro también permanece en el anonimato.

Cuando un líder de los grupos de narcotraficantes cae muerto o es detenido ocurre que el vacío busca ser llenado por otra organización criminal o por elementos del mismo cártel.

El estado de Guanajuato y alrededores no está exento de esa costumbre. Caído “El Marro”, sus subalternos buscan ocupar su lugar, como se presume quiere el Comandante Azul.

O como se sabe, Nemesio Oseguera “El Mencho” del CJNG también quiere apropiarse de la entidad.

Hay un temor en las autoridades que se desate la violencia que, según los analistas, no será inmediata, porque el gobierno ha congelado cuentas, desmantelado inmuebles y capturado a varios integrantes del Cártel de Santa Rosa de Lima.

El pasado 17 de agosto, dos semanas después de la aprehensión del Marro, más de una decena de sicarios lanzó un advertencia en la que aseguraba que el Cártel de Santa Rosa de Lima seguía de pie.

El Comandante Azul no tiene un camino limpio para poder controlar la plaza, pues a su alrededor y en el mismo Guanajuato tiene que superar a otros grupos criminales con presencia en el lugar.

El primero: el Cártel Jalisco Nueva Generación liderado por “El Mencho”. No es un rival débil, por el contrario, hasta las autoridades de Estados Unidos advierten sobre lo peligroso y sanguinario de este grupo criminal cuyos tentáculos se han extendido casi en todo el territorio mexicano.

Otros grupos que el Comandante Azul tendría que apaciguar son: la Unión León, el Grupo Sombra, y los cárteles michoacanos, que tenían distintos pseudos a lo largo y ancho de la entidad.

Lo documentado en la entidad obedece a que el grupo criminal Cárteles Unidos y Grupo Sombra del Cártel del Golfo ,antes de la caída del líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, José Antonio Yépez, el “Marro” —detenido el pasado 2 de agosto—, conformaban una legión que apoyaba al Marro en su guerra contra el Mencho. Incluso llegaron a interrogar y torturar a algunos narcomenudistas del CJNG.

Para derrotarlos, el “Mencho” se vio en la necesidad de enviar a uno de sus grupos de élite, que había mostrado ser mortalmente eficaz en encomiendas pasadas. Pero los hechos subsecuentes, como la detención del sanguinario cabecilla de Santa Rosa de Lima han sido motivos de alianzas entre las mafias locales y el CJNG, quienes están marcando el ritmo de la guerra en la entidad.

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