La increíble jugada que encadenó una serie de errores y se volvió viral

El delantero del FC Maratea de Italia desaprovechó una inesperada ocasión durante el partido contra el Virtus Latronico

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El gol imposible que recorre el mundo

El fútbol italiano recorrió el mundo después de que se viralizara una increíble jugada, la cual pudo haber terminado en gol si no fuera por las dos definiciones de un jugador que no supo aprovechar una cadena de errores del equipo contrario.

El FC Maratea se enfrentó al Virtus Latronico este fin de semana por la séptima jornada de la octava división del Calcio. La victoria de los locales por 6-4 pudo haber sido superior si el delantero no hubiera desperdiciado una de las claras oportunidades que se le presentó.

El atacante ganó el rebote contra el arquero
El atacante ganó el rebote contra el arquero

En las imágenes se pudo ver el momento en el que el mediocampista del Maratea robó una pelota detrás de mitad de cancha y un compañero despeja con un fuerte zapatazo. El balón cayó en campo contrario, en el que sólo habían quedado dos defensores y el arquero del Virtus Latronico, además del delantero rival.

El primero de los defensores no pudo conectar la patada y la pelota le pasó por debajo de su pierna, lo que sorprendió al atacante del Maratea que continuó su carrera hacia el arco. El segundo marcador central quiso asegurar con un pase atrás hacia su arquero.

La falta de potencia en el último toque obligó al guardameta a salir apurado para reventar el balón, sin embargo, cuando quiso hacerlo el tiro rebotó en el delantero que continuó luchando por conseguir el gol.

El delantero del Maratea desperdició la jugada de gol
El delantero del Maratea desperdició la jugada de gol

La cadena de errores del Virtus Latronico hizo que el trámite para conseguir el gol pareciera sencillo para el punta de Maratea que quedó sólo contra el arco vacío. Sorpresivamente, cuando definió estampó su tiro contra el travesaño.

De todos modos iba a tener una nueva oportunidad ya que el rebote iba a caerle encima. Fue allí cuando remató de cabeza, nuevamente sin arquero, pero la pelota se fue por arriba. Sin poder creerlo el joven del Maratea se tiró sobre el césped tapándose el rostro con sus manos.

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