Atado con un cable de extensión y semidesnudo, hallaron el cuerpo de un hombre en una vivienda de Medellín

Información preliminar de las autoridades indica que, el ciudadano de 30 años, miembro de la comunidad LGTBI , habría sido asesinado por dos hombres con los que se encontraba departiendo en su hogar

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Imagen de referencia. En Medellín hallaron dentro de una vivienda el cadáver de un hombre, con signos de tortura
Imagen de referencia. En Medellín hallaron dentro de una vivienda el cadáver de un hombre, con signos de tortura

Las autoridades de Medellín dieron a conocer a RCN Radio en las últimas horas que, un hombre de 30 años de edad, perteneciente a la comunidad LGTBI, fue hallado muerto con signos de tortura dentro de una vivienda ubicada en el barrio Caicedo de la comuna nueve de Buenos Aires, en el centro oriente de la capital antioqueña.

Según informaron las autoridades al mismo medio, el cuerpo del hombre, identificado como Juan Danilo Bedoya Román, fue hallado por su madre, quien alertó de inmediato a las autoridades. De acuerdo con la inspección judicial, la víctima fue encontrada tendida en el piso, atada de pies y manos con un cable de extensión, semidesnudo y cubierta con una sábana.

El diario Q’Hubo conoció que, el ahora occiso, llegó a su hogar sobre la 1:00 de la mañana en compañía de dos hombres con los cuales se encontraba departiendo. Dos horas después, la madre del joven observó a los dos sujetos -desconocidos para ella- abandonando la vivienda de manera precipitada y huyendo con rumbo desconocido en un vehículo.

A la madre de la víctima le causó curiosidad la situación por lo que, según conoció el diario local, decidió dirigirse a la habitación de su hijo donde lo halló muerto y con evidentes signos de tortura.

Tras alertar a las autoridades, Q´Hubo conoció que el caso quedó como homicidio por establecer, y será el dictamen de Medicina Legal el que establecerá finalmente cómo fue asesinado el hombre de 30 años. Por su parte, RCN Radio reportó que la Policía de Medellín se encuentra analizando de manera paralela las cámaras de seguridad del sector, con el fin de identificar el vehículo y dar con el paradero de los presuntos asesinos de Bedoya Román.

Un extranjero fue asesinado en Medellín tras pedir servicios sexuales por internet

En la imagen una panorámica de la ciudad colombiana de Medellín. Foto: EFE/Luis Noriega/Archivo
En la imagen una panorámica de la ciudad colombiana de Medellín. Foto: EFE/Luis Noriega/Archivo

Hay que recordar que la modalidad del crimen de Juan Danilo Bedoya Román no es la primera que se registra en Medellín en los últimos meses. El pasado martes 15 de febrero, Blu radio conoció que un ciudadano colombo-venezolano de 38 años de edad, identificado como Sahmir Javier González Sarmiento, fue hallado muerto en el barrio La Castellana atado de pies y de manos.

El compañero sentimental de la víctima, quien decidió mantener en reserva su identidad, contó a la emisora bogotana que, tras no saber nada de González Sarmiento por más de 12 horas, decidió irlo a buscar a su apartamento, donde lo encontró muerto, atado de pies y manos, y con una sabana amarrada a su cuello.

”Requiere, a través de la internet, servicios de tipo sexual, ingresan unas personas a este lugar de residencia, amordazan al ciudadano y lo agreden, y, al parecer por una situación de asfixia mecánica, queda esta persona allí sin signos vitales”, informó a Noticias Caracol, el subcomandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, el coronel Rolfy Jiménez.

Según conoció La FM Radio, algunas personas cercanas a la víctima aseguraron haberlo visto llegar a su residencia con otros dos hombres, por lo que las autoridades señalaron que esos dos ciudadanos podrían estar tras el crimen de González Sarmiento.

Sin embargo, ese no fue el único caso que se registró en la ciudad bajo esa modalidad. Blu Radio conoció horas antes que, un ciudadano australiano, quien también había aceptado un encuentro a través de una aplicación de citas, fue encontrado atado de pies y manos, y sin ninguna de sus pertenencias, en un hotel del barrio San Joaquín en Medellín.

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