Detuvieron a un chileno por una entradera en Moreno a un empresario y a su pareja: tiene antecedentes desde hace 20 años

Actuó con varios cómplices que aún siguen prófugos. La Policía Bonaerense secuestró un auto, dinero en efectivo y cuatro celulares

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La DDI de Moreno secuestró celulares, dinero en efectivo y un auto

Dos jubilados sufrieron una salvaje entradera en su vivienda del partido de Moreno, y por el robo la Policía Bonaerense capturó a un ciudadano de nacionalidad chilena. El presunto autor del ataque tiene antecedentes que datan desde el 2005, con un amplio abanico de ilícitos en su haber, según pudo saber Infobae de fuentes del caso.

El robo ocurrió el 15 de diciembre en un domicilio de la calle Uruguay al 600, a cinco cuadras del corazón de la ciudad. El dueño de la vivienda, un empresario textil de 94 años, relató que junto a su esposa sufrieron la intrusión de varios ladrones que los intimidaron con armas de fuego y los golpearon en la cabeza.

De la casa del empresario los ladrones se llevaron dinero en efectivo, un celular y alhajas, según consta en la denuncia a la que tuvo acceso este medio.

En el caso tomó intervención la fiscal Solange Castelli, de la UFI N°7, quien ordenó medidas para impulsar la investigación. En primer lugar, la DDI de Moreno relevó las cámaras de seguridad de la zona.

Leopoldo Alberto Jara Araya, de
Leopoldo Alberto Jara Araya, de 58 años y nacionalidad chilena, detenido por la DDI de Moreno

A través de los registros fílmicos del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) de la Municipalidad, los investigadores establecieron que en el ilícito participaron dos vehículos, cuyas patentes en ese momento no se lograron individualizar correctamente dado que la entradera se produjo durante la noche.

La investigación continuó con el análisis de los registros de la Estación Troncal de Peaje del Acceso Oeste, ante la sospecha de que los vehículos podrían haber escapado en sentido hacia la Ciudad de Buenos Aires.

Siguiendo las pistas que encontraron durante las primeras horas de investigación, el personal de la DDI de Moreno constató que uno de los coches usados en el robo era un Peugeot 308 blanco. Las cámaras lo ubicaron en dirección hacia el partido de La Matanza, en la zona oeste del conurbano.

Por su parte, la fiscal Castelli identificó que la señal del celular denunciado como robado por la víctima impactó en una antena del barrio Almafuerte de La Matanza. Es así que se desplegó un operativo en la zona para encontrar el Peugeot 308.

El dinero secuestrado al presunto
El dinero secuestrado al presunto delincuente

El personal de la Policía Bonaerense lo encontró en la esquina de las calles Padre Bachi y Entre Ríos. Luego de algunos minutos de vigilancia, un hombre subió al auto y empezó a manejar. Los uniformados lo interceptaron a pocos metros.

Allí fue donde capturaron a Leopoldo Alberto Jara Araya, de 58 años y de nacionalidad chilena. Llevaba consigo un millón de pesos y cuatro celulares, y todo quedó incautado por la Policía.

Dos décadas de antecedentes

El prontuario del presunto autor de la entradera es extenso. Según pudo saber Infobae de fuentes oficiales, la primera causa que se le abrió en territorio argentino fue en mayo de 2005 por portación de elementos tipo “ganzúa”, utilizados para forzar cerraduras.

En 2007 lo imputaron en otros dos expedientes, por tenencia ilegal de armas -también en La Matanza- y por robo calificado en San Vicente, al sur del Área Metropolitana de Buenos Aires.

En 2009, Jara Araya volvió a delinquir, esta vez en Oberá, Misiones, y enfrentó cargos nuevamente por robo calificado. En ese caso lo procesaron junto a su hermano menor. Por último, en 2017 lo capturaron una vez más por tenencia ilegal de armas.

En tanto, los investigadores aún buscan dar con quienes habrían sido los cómplices del ladrón chileno. Hubo más allanamientos en la zona de La Matanza que arrojaron resultados negativos.

También siguen bajo análisis las cámaras del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) de Moreno, mediante las cuales buscan reconstruir los pasos de los delincuentes tras la entradera.