Se “vendió” en las redes sociales: así cayó el prófugo del crimen de la mujer que viajaba en un colectivo en San Justo

Mordió a los policías de la Policía Bonaerense que lo detuvieron en un local de comidas rápidas. Está acusado de manejar la moto que usaron los asesinos de Hilda Tello. El primer apresado ya fue condenado a perpetua

Guardar
Ladrones balearon un colectivo en San Justo y mataron a una pasajera: atraparon delincuente prófugo

Luego de la condena a prisión perpetua para “Pechuguita” por el asesinato de Hilda Tello, la mujer de 45 años que recibió un disparo en el cuello mientras viajaba en un colectivo de la línea 174 en San Justo; en las últimas horas fue capturado el conductor de la moto que usaron los asesinos y que estaba prófugo. Se vendió en las redes sociales.

Fuentes del caso dijeron a Infobae que el arresto de Dylan Urial Vivas (19) fue producto de un ciberpatrullajes en la cuenta de Instagram utilizada por el prófugo.

Los investigadores observaron que publicó una imagen en un local de comidas rápidas ubicado dentro del predio de un hipermercado ubicado en las avenidas Monseñor Bufano y Crovara, en La Tablada, de donde es oriundo el acusado.

Así, una comisión de la DDI La Matanza fue hasta el lugar y capturó al sospechoso luego de dominarlo, ya que se resistió: mordió a un teniente y a una oficial de la Bonaerense y les causó lesiones de carácter leves. Sobre su cabeza pesaba una orden de captura nacional e internacional.

Dylan Vivas, el prófugo capturado
Dylan Vivas, el prófugo capturado

La reconstrucción judicial estableció que la mañana del 15 de enero de 2025, “Pechuguita” y Vivas iban en una moto. Al llegar a la calle Coronel Lynch al 2800, entre Illia y San Martín, ambos intentaron asaltar a un joven que lavaba su auto en la vereda.

Armados con una pistola calibre 9 milímetros, intimidaron a la víctima, pero no lograron sustraerle pertenencias debido a la irrupción del colectivo de la línea 174 en el que viajaba Tello.

El conductor del interno 623, al advertir la situación y escuchar el pedido de auxilio del joven, redujo el paso de la moto. Esta maniobra provocó la reacción violenta de los asaltantes: “Pechuguita” disparó tres veces hacia el colectivo. Uno de esos tiros hirió a Hilda Tello.

El conductor del colectivo trasladó de inmediato a la víctima a la Clínica San Francisco, ubicada a pocas cuadras del lugar del ataque. Tello falleció poco después de ingresar al centro médico. La autopsia determinó que la bala, de calibre 9 milímetros, ingresó por el costado de la víctima, atravesó su corazón y pulmón, lesiones que fueron mortales.

Hilda y su pareja, Hugo
Hilda y su pareja, Hugo

Luego del ataque, los sospechosos huyeron hacia La Tablada e ingresaron al barrio José Ingenieros de Ciudad Evita, conocido como “Los Monoblocks de Tablada”.

La investigación permitió identificar a ambos implicados. El autor de los disparos era oriundo de la zona, tenía 18 años en el momento del crimen y ya contaba con antecedentes por amenazas coactivas agravadas, además de un pedido de captura nacional e internacional por coacción agravada y resistencia a la autoridad.

Los agentes del Grupo Táctico Operativo (GTO) de las seccionales de Rafael Castillo y San Justo lograron ubicar a “Pechuguita” en el barrio Salamanca de González Catán. Los efectivos montaron un operativo encubierto y, tras vigilar varias viviendas, lo observaron salir acompañado de otro hombre. En ese momento, intervinieron y lograron reducir a ambos sin que opusieran resistencia.

"Pechuguita", el primer detenido por el crimen de Hilda Tello

Durante el juicio, “Pechuguita” dio su versión ante el tribunal los hechos de aquella jornada. Explicó que un “amigo” lo pasó a buscar por su casa en La Tablada; ese amigo era Dylan Uriel Vivas.

Además, declaró: “En un determinado momento, Dylan me pidió que me baje de la moto, me dio un arma y le hice caso. Me vi pidiéndole la llave del coche al señor y su celular, no sé para qué porque no sé manejar. El señor salió corriendo y Dylan me dijo ‘vamos, vamos’. Me subí a la moto y, cuando nos estábamos yendo, actué de una manera muy fea, mal”, según consta en el registro del tribunal recogido por Primer Plano Online.

En su testimonio, añadió: “Pido perdón. Mis intenciones no eran esas, no quise matar a nadie, no soy capaz de matar a nadie. Estoy arrepentido de lo que hice. Yo quise tirar al aire. Si pudiera volver el tiempo atrás no me subiría a la moto y no compartiría tiempo con esa persona”.

Condenaron a prisión perpetua a
Condenaron a prisión perpetua a uno de los asesinos de una mujer que viajaba en un colectivo en San Justo

Su confesión fue determinante para que la Justicia lo encontrara culpable de robo agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa —por el intento de asalto al vecino que lavaba el auto— y de homicidio agravado criminis causae agravado por el uso de arma de fuego por el asesinato de Tello. El fallo coincidió con el pedido del fiscal del juicio, Carlos Luppino.

Desde el 13 de febrero de este año, permanece detenido y, conforme al fallo del Tribunal Oral Criminal Nº2 de La Matanza, recién podrá solicitar una morigeración de su detención recién a partir del 12 de febrero de 2060, tras cumplir 35 años de condena, según lo determinado por los jueces Lucila Laura Pacheco, Diego Sebastián Burgueño y Pablo Ernesto Lago, quienes lo consideraron responsable del balazo mortal.