Duro informe de una Fundación del radicalismo sobre la gestión oficial de la pandemia

La Fundación Alem tildó de “irresponsable” la actuación del Gobierno. Según el trabajo, el abordaje sanitario fue “una suma de errores, equivocaciones, contradicciones e incoherencias”

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Reunión de trabajo en el Comité Nacional (Twitter Fundación Alem)
Reunión de trabajo en el Comité Nacional (Twitter Fundación Alem)

El think tank por excelencia del radicalismo es la Fundación Alem. Desde ese instituto se forma a los dirigentes y si publican los trabajos respecto de las ideas y las políticas públicas que entiende el centenario partido que se tienen que aplicar en la Argentina.

En las últimas horas, se conoció un duro informe sobre la gestión oficial de la pandemia de coronavirus. Según el documento, “el abordaje sanitario del Gobierno Nacional fue una suma de errores, equivocaciones, contradicciones e incoherencias que derivaron en diferentes escenarios atravesados por la imprevisión y la improvisación”.

El informe denominado “Pandemia en Argentina: Memoria de un desgobierno”, recorre los distintos momentos clave de la gestión de la pandemia. Además, recopila las decisiones sanitarias del gobierno de Alberto Fernández y las analiza en comparación con otros países de la región y el mundo. Allí se destaca que la crisis originada por la pandemia obligó a reacciones de todos los gobiernos, y en términos generales, las decisiones públicas que se adoptaron: ASPO, suspensión de las actividades prescindibles, testeos, rastreo de los positivos y su aislamiento, campañas masivas de vacunación; medidas de alivio fiscal junto con la compensación parcial de las consecuencias económicas por el cese de actividades productivas.

En el caso argentino, en cambio, las respuestas del Gobierno Nacional sólo se entienden al compararlas con las conductas de otros Gobiernos de la región y del mundo, con los que comparte el descreimiento sobre la conveniencia de recurrir al saber experto y a la evidencia, la subestimación de las ventajas de aprovechar las buenas prácticas internacionales y la desconfianza en los gobiernos cooperativos”, indica el trabajo.

En este sentido, recuerda las “vacilaciones, errores y mala praxis” al inicio de la epidemia. “La clave era detectar precozmente los contagios, pero no había tests porque no se habían comprado a tiempo; y no se habían comprado a tiempo porque se subestimó inicialmente la pandemia. Por lo tanto, no se podía implementar una estrategia para controlar la epidemia sin que se comenzara a abusar del confinamiento y el encierro como único recurso”, sostiene el informe.

Asimismo, el trabajo de la Fundación Alem también pone el foco en el plan de vacunación que implementó el gobierno nacional. Aunque se destaca que en la actualidad la Argentina tiene un nivel de vacunación relativamente alto, tanto para la primera dosis como con el esquema completo, advierte que el proceso de contratación de proveedores y de aplicación de vacunas no estuvo exento de “prejuicios, imprevisiones, contratiempos, errores y, también, inmoralidades como el Vacunatorio Vip”.

Según se documenta en este informe “la concentración inicial de las compras en sólo dos o tres proveedores se combinó con una excesiva demora en las entregas, ralentizando la distribución y aplicación de las dosis”. “Luego, cuando finalmente, el Gobierno se decidió a ampliar los oferentes, la escasez de vacunas pudo superarse. Sin embargo, queda pendiente que las autoridades expliquen las razones reales de la severa demora para adquirir las vacunas del laboratorio Pfizer en 2020, lo que hubiera permitido contar con mayores dosis en la primera parte del año 2021 y, por ende, limitar la cantidad de casos y muertes”, añade el trabajo en este sentido.

El informe se refiere al impacto en la educación, a la calidad institucional, y al económico y social, durante este período. En tal sentido, es crítico con el consejo asesor y la falsa opción cuarentena o muerte. “Muchas de estas antinomias fueron también fogoneadas por un consejo asesor casi exclusivamente formado por infectólogos y algunos científicos ‘militantes’, con una visión muy limitada de la complejidad de la pandemia”, afirmaron.

Con respecto al sector educativo, advierte que el Gobierno Nacional nunca priorizó el tema para lograr una vuelta a las aulas y recuerda que Argentina se encuentra entre los primeros países de la región con mayor cantidad de días sin clases presenciales. “Se sobrevaloró la potencialidad de la educación remota en un país también muy heterogéneo en términos de conectividad y de acceso a dispositivos, además de una desigualdad educativa preexistente”, enfatizaron.

En resumen, consideraron que “el Poder Ejecutivo contribuyó a aumentar la incertidumbre y la beligerancia en el debate público” y tildó de “irresponsable” toda su gestión.

La Fundación Alem está conformada por casi trescientos especialistas en políticas públicas. La institución tiene como mandato la elaboración de ideas “para un buen gobierno” que se canalizan a través de comisiones de trabajo que están vinculadas a los bloques de la UCR en el Congreso de la Nación a través de las coordinaciones de las mismas que se integran con legisladores y con expertos. Es decir, elaboran lo que sería el andamiaje técnico para que se transformen en proyectos de ley.

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