Se revelan detalles inéditos del crimen en La Atarjea: asesinato de Fabiola Caicedo habría sido por venganza

La Policía Nacional del Perú sigue avanzando en la investigación del asesinato de Fabiola Alejandra Caicedo, conocida en redes sociales como ‘China Baby’, una joven influencer de 19 años que fue hallada descuartizada en la planta de tratamiento de agua potable La Atarjea de Sedapal.

El hallazgo ocurrió el 9 de junio durante una inspección rutinaria en la planta, activó los protocolos de emergencia y movilizó a diversas unidades policiales y fiscales.

Las hipótesis en torno a este crimen se han ampliado, y una de las más relevantes apunta a un posible ajuste de cuentas por un caso sin resolver ocurrido en 2022.

Según información obtenida por Latina Noticias, la policía apunta una nueva línea de investigación vinculada a la muerte de Meiner Jiménez Castillo, expareja de Caicedo, quien falleció en circunstancias extrañas en Villa El Salvador.

En un primer momento, se creyó que había sido víctima de una golpiza; sin embargo, una segunda versión indica que podría haberse tratado de un suicidio. Ninguna de estas hipótesis ha sido confirmada hasta el momento, y el caso continúa abierto.

La relación entre ambos, muy visible en redes sociales durante 2022, terminó trágicamente con la muerte de Jiménez. Tras el hecho, familiares del joven acusaron públicamente a Fabiola, entonces menor de edad, de estar involucrada.

Incluso llegaron a insinuar que ella habría conspirado junto a una supuesta nueva pareja para asesinarlo. Estas denuncias nunca fueron judicializadas, pero permanecieron circulando en redes sociales durante los últimos años.

Ahora, los investigadores consideran que el asesinato de Fabiola podría haber sido un acto de venganza relacionado con ese caso no resuelto. Esta línea cobra fuerza debido al ensañamiento con el que fue ejecutado el crimen: su cuerpo fue hallado mutilado y abandonado en bolsas negras, una forma de asesinato que, según fuentes policiales, suele estar vinculada a represalias dentro del crimen organizado.

Otra línea de investigación se relaciona con la trata de personas. En las últimas semanas, otros cuerpos de mujeres han aparecido en condiciones similares, como en San Martín de Porres y en el río Rímac, también ocultos en maletas. Esto refuerza la sospecha de que bandas criminales estarían detrás de una red que recluta a jóvenes con aspiraciones de convertirse en influencers, y que luego son explotadas o eliminadas al intentar romper vínculos con sus captores.

Fabiola publicó su último video en TikTok el 5 de junio. Cuatro días después, el 9 de junio, trabajadores de Sedapal encontraron restos humanos en una bocatoma del río. Días más tarde, el 15 de junio, nuevos restos fueron hallados. Aún faltan partes del cuerpo por recuperar.

La policía no descarta ninguna hipótesis. Ya sea venganza por la muerte de Meiner Jiménez o una advertencia de mafias dedicadas a la trata, el caso de la ‘China Baby’ revela una peligrosa red de violencia que amenaza a jóvenes en situación vulnerable, y que continúa operando con crueldad en las sombras.

El tatuaje clave que ayudó en la investigación

El tatuaje con la inscripción ‘Paula Sophia’ y una fecha en la espalda de la víctima permitió a las autoridades identificar a la joven venezolana.

La Policía Nacional del Perú (PNP) confirmó que el cadáver presentaba signos de mutilación y que varias partes del cuerpo permanecen desaparecidas. El proceso de identificación se aceleró gracias a los tatuajes localizados en el torso y la espalda de la víctima, siendo el tatuaje con el nombre ‘Paula Sophia’ el elemento determinante.

Este detalle llevó a que un familiar de Fabiola Caicedo Piña se acercara a la sede de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) para confirmar la identidad de la joven. Tras la identificación, la investigación pasó del área de homicidios de la Dirincri al área de trata de personas, debido a la posibilidad de que el caso esté vinculado a redes de tráfico de personas.