Prohibición al vapeo en México generará mercado negro sin precedentes, advierten activistas

Alertan que la reforma entregará al crimen organizado un negocio de más de 5 millones de dispositivos mensuales y aumentará los riesgos para consumidores y menores

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Alertan que la reforma entregará
Alertan que la reforma entregará al crimen organizado un negocio de más de 5 millones de dispositivos mensuales y aumentará los riesgos para consumidores y menores

La reforma a la Ley General de Salud que prohíbe por completo los vaporizadores en México provocará la expansión de un mercado negro sin precedentes y fortalecerá al crimen organizado, afirmaron integrantes de la organización México y el Mundo Vapeando.

De acuerdo con su presidente, Juan José Cirión Lee, la medida deja en manos de grupos delictivos la venta mensual de más de cinco millones de dispositivos utilizados por los 2.8 millones de consumidores registrados en el país.

El activista sostuvo que la prohibición no elimina la demanda, sino que consolida las redes de distribución ilícita que han crecido desde 2020, cuando comenzaron los decretos federales que limitaron la importación y comercialización de productos de vapeo.

Esta tendencia se intensificó tras la reforma constitucional de diciembre de 2024, lo que permitió que organizaciones criminales ampliaran su control sobre la entrada y transporte de dispositivos de vapor.

La organización México y el
La organización México y el Mundo Vapeando advirtió que la prohibición total de vaporizadores en México abrirá un mercado negro millonario, dejando en manos del crimen organizado la venta de más de cinco millones de dispositivos al mes

México adopta la política más restrictiva del mundo

México y el Mundo Vapeando señaló que el país se ha convertido en la nación con la prohibición más estricta a nivel global en materia de vapeo, pese a que diversas investigaciones internacionales consideran que estos dispositivos son hasta 95 por ciento menos nocivos que los cigarros tradicionales.

Cirión Lee recordó que naciones como Reino Unido y Francia integran los vaporizadores a sus estrategias de reducción de daños, mientras que la política mexicana avanza en sentido contrario y genera escenarios de mayor riesgo sanitario y de seguridad.

El activista argumentó que, lejos de proteger a la población, estas políticas han derivado en mercados paralelos sin regulación, menor protección al consumidor y un incremento en la venta clandestina a menores de edad.

Informe internacional alerta sobre violencia, contrabando y riesgos sanitarios

La organización citó el estudio “Vapeadores y violencia: El problema de la prohibición en México”, en el cual se advierte que la medida detonará una serie de efectos secundarios: una expansión del mercado negro, la venta de productos sin control sanitario, la exposición de adolescentes a dispositivos adulterados y el fortalecimiento de las finanzas criminales.

El informe también alerta sobre posibles tensiones en la próxima revisión del T-MEC, ya que el contrabando de millones de dispositivos irregulares hacia Estados Unidos podría convertirse en un punto conflictivo en la agenda bilateral.

La organización México y el
La organización México y el Mundo Vapeando advirtió que la prohibición total de vaporizadores en México abrirá un mercado negro millonario, dejando en manos del crimen organizado la venta de más de cinco millones de dispositivos al mes

Activistas piden revertir la reforma y regular el mercado

Ante este panorama, la organización hizo un llamado al Senado para revertir la prohibición y construir un marco regulatorio que establezca controles estrictos para la importación, distribución y venta de vaporizadores.

De acuerdo a la asociación, una regulación adecuada permitiría reducir la evasión fiscal, limitar la operación de redes criminales y proteger a los consumidores con estándares de calidad y vigilancia sanitaria.

Cirión Lee subrayó que regular, y no prohibir, es el camino que han seguido países que han logrado disminuir el consumo de tabaco mediante alternativas menos dañinas. Aseguró que México aún puede corregir el rumbo y adoptar políticas basadas en evidencia científica que garanticen mejores resultados en materia de salud pública y seguridad.