
El 2025 cierra con un sabor agridulce en el sistema sanitario español. Después de tres años de negociaciones, los sindicatos y el Ministerio de Sanidad han alcanzado un preacuerdo respecto al Estatuto Marco, la norma que regula las condiciones laborales de los sanitarios. Los médicos, sin embargo, se desmarcan del consenso: las agrupaciones que representan exclusivamente a facultativos denuncian que sufren un “desprecio institucional” y dan por rotas las negociaciones con el Gobierno.
Los excompañeros de profesión de Mónica García sienten una especie de traición con la ministra, a quien achacan un cambio de postura respecto a temas tan polémicos como las guardias médicas. “Decía que era una barbaridad hacer guardias de 24 horas y las sigue manteniendo”, denuncia Víctor Pedrera, secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), a Infobae.
Con todo, el escenario sanitario dibuja una división interna: por un lado, los sindicatos del ámbito, los únicos con potestad legítima para negociar, que muestran un acercamiento hacia el ministerio; por otro, los sindicatos exclusivamente médicos, que se consideran infrarrepresentados dentro de la mesa de negociación y reclaman regulaciones exclusivas.
Las guardias médicas, el punto de discordia
Si hay algo que ha dejado claro Mónica García en esta legislatura es que las guardias médicas le parecen “un anacronismo”. La ministra promete desde el año 2024 el fin de estas jornadas que, para ella, “no tienen sentido”. Finalmente, este rechazo se ha materializado en una reducción de las horas de guardia, que pasan de 24 a 17 horas.

“La guardia siempre ha sido de 17 horas”, puntualiza Pedrera. La diferencia que propone García es simplemente eliminar la jornada laboral previa al turno continuado. “Ahora se garantiza el descanso previo a la guardia y el posterior, que ya estaba garantizado”, explica. La medida se considera insuficiente desde los sindicatos médicos, pero su rechazo no ha parecido trasladarse al Ámbito de Negociación. CSIF, SATSE-FSES (unión entre SATSE y CESM), CCOO, UGT y CIG-Saúde son las organizaciones presentes en la mesa y han marcado como irrenunciables tres objetivos: la jubilación anticipada y voluntaria, la jornada de 35 horas y un nuevo sistema salarial.
Aunque CESM tenga un sitio en las reuniones, considera que su representación es “testimonial” y es por ello que reclaman junto con el Sindicato Médico Andaluz (SMA) un ámbito propio de negociación y una regulación propia, que reconozca las características particulares de la profesión médica. Desde el Ministerio de Sanidad, sin embargo, se oponen a esta alternativa, pues sería “incompatible con los principios del diálogo social y con la legalidad vigente”.

Avances y retrocesos
Con todo, Sanidad y los sindicatos del ámbito lograron alcanzar un preacuerdo el pasado 16 de diciembre. Las negociaciones avanzan “satisfactoriamente” desde entonces, según las organizaciones sociales. Por el momento, el ministerio se habría comprometido al establecimiento de una jornada laboral ordinaria de 35 horas, “que se aplicará según los términos que se definan en los correspondientes ámbitos de negociación” se ha abierto a reconocer el acceso a la jubilación parcial para todo el personal estatutario, siempre que cumpla los requisitos actualmente exigidos por la Seguridad Social; y otorgar la jubilación anticipada “para aquellas categorías profesionales que reúnan los requisitos legales, previa realización de un estudio integral de las condiciones de trabajo en el conjunto del Sistema Nacional de Salud“.
La jubilación y la jornada laboral son dos aspectos que Sanidad se había negado a incluir hasta ahora, pues entendía que escapaban de sus competencias. Los salarios siguen quedando fuera del acuerdo, a menos de momento, si bien el ministerio apunta a crear “un acuerdo específico” que desarrolle estas cuestiones.
El encuentro con el colectivo médico no fue tan positivo. Después de cuatro jornadas de huelga, CESM y SMA consideraron que Sanidad “dinamitó” la voluntad de diálogo y dio por rotas las negociaciones. Por su parte, el ministerio lamentó que ambos sindicatos abandonasen la mesa de negociación “sin emitir respuesta alguna a la propuesta formal presentada” por el equipo de Mónica García. Según su versión, las organizaciones médicas rechazaron adherirse al preacuerdo alcanzado en el Ámbito de Negociación, pese a que incorpore “todas las demandas e importantes avances”.
“Un estatuto contra el médico”
Pese a las mejoras incluidas, CESM y SMA consideran que el borrador de anteproyecto presentado “es un estatuto contra el médico”. “Certifica el desprecio completo de la ministra de Sanidad y de todo su equipo al colectivo médico”, denuncian en un comunicado.

El último borrador presentado este año “no mejora ninguna de las profesiones sanitarias”, aseguran los dos sindicatos. Para ellos, la clasificación profesional se empeora en esta versión que, además, perpetúa tres tipos de jornada (ordinaria, de guardia y especial), “por lo que se mantendrá el problema del estatuto actual de sobrecarga y de obligatoriedad de esas jornadas”. El texto “contiene otros agravios”, a juicio de CESM y SMA, pues mantiene la exclusividad de cargos intermedios, como los jefes de servicio; y la movilidad forzosa o por razón de servicio.
Ante esta situación, los médicos se plantan. Ambas organizaciones han rechazado el último texto y, a la espera de que se confirmen las fechas, mantienen su compromiso de iniciar el 2026 en huelga indefinida.
Últimas Noticias
El síndrome del hombre irritable: mitos y verdades de la “menopausia masculina”
La caída de la testosterona puede provocar el fenómeno de la andropausia en algunos varones

En cirílico y con ilustraciones de santos: así serán las nuevas monedas de euro en Bulgaria
Dado que el diseño, los metales, las dimensiones y el peso de las monedas de uno y dos euros son muy similares a las levas, los ciudadanos deberán prestar especial atención durante enero de 2026

El circo con animales que acumula protestas de activistas y vecinos en Valencia: “Utilizarlos en beneficio humano es contrario a la ética”
La coalición PP-Vox que gobierna en la Comunidad Valenciana abrió la posibilidad de que los circos puedan trabajar con animales

La guerra entre Hacienda y los ‘youtubers’ Willyrex y Vegetta777 amenaza con redefinir la estrategia fiscal de los creadores digitales en Andorra
La disputa en los tribunales por la tributación de ambos creadores de contenido abre la puerta a nuevas restricciones para los profesionales que se benefician del régimen fiscal del país vecino


