El precio de los alquileres continua por las nubes. Durante el pasado mes de noviembre, el coste medio por metro cuadrado en España se situó en los 13,3 euros, lo que representa un aumento del 11,1% respecto al mismo mes del año anterior, según datos del portal inmobiliario Idealista. Hace una década, en 2014, el precio era de 7,2 euros por metro cuadrado. Esto significa que un piso de 100 metros cuadrados, que hoy cuesta 1.330 euros, se alquilaba entonces por 720 euros.
El encarecimiento ha sido especialmente pronunciado en algunas ciudades. En Madrid, por ejemplo, los precios han subido un 15,5% en el último año, alcanzando los 20,5 euros por metro cuadrado. Pero Barcelona tampoco se queda atrás, de hecho es la ciudad con los alquileres más caros. Allí, el precio se sitúa actualmente en 23,2 euros por metro cuadrado, lo que supone que un piso de 100 metros cuadrados cuesta de media 2.320 euros, más del doble de los 980 euros que se pagaban en 2014, hace diez años.
Estas cifras reflejan una escalada generalizada que intensifica las dificultades de acceso a la vivienda en las principales áreas urbanas. Por ello, numerosas personas optan por trasladarse a municipios cercanos con la esperanza de encontrar precios más accesibles.
Aunque también hay que tener en cuenta que este desplazamiento masivo de ciudadanos y trabajadores hacia áreas más económicas está provocando un aumento en los precios del mercado inmobiliario de esas localidades, dificultando también el acceso a la vivienda en estas zonas.
Municipios a menos de una hora de Barcelona con los precios más bajos
Según los datos y estadísticas de Idealista, que se basa en las viviendas promocionadas en su portal, el municipio más barato para alquilar una vivienda en la provincia de Barcelona es Manresa. Allí, el precio del metro cuadrado se sitúa en los 8,6 euros, es decir, casi tres veces menos que lo que se paga en la capital. Se encuentra a una hora en coche de Barcelona (a la estación de Sants), aunque en transporte público el trayecto se alarga hasta la hora y media, por lo que no suele ser elegido por los trabajadores como ciudad dormitorio.
Algo parecido le sucede a Vilafranca del Penedès, que se encuentra a 55 minutos en coche de Barcelona, pero a más de una hora en transporte público, según Google Maps, por lo que sus 9,5 euros por metro cuadrado no terminan de convencer a todos los trabajadores.
En este sentido, uno de los municipios más cercanos a la capital de la provincia que ofrece los mejores precios es Terrassa, con un coste medio de 11 euros el metro cuadrado. Con este dato, una casa de 100 metros cuadrados se quedaría en unos 1.100 euros, lo que supone un ahorro de más de mil euros por un piso del mismo tamaño. Además, se encuentra a poco más de 30 minutos en coche de Barcelona o a unos 50 minutos en transporte público.
Granollers es otra de las ciudades más cercanas a Barcelona que ofrece precios baratos. A 45 minutos en coche (o 50 en transporte comunitario), el municipio ofrece viviendas en alquiler a un precio medio de 11,3 euros el metro cuadrado.
El municipio más caro de Barcelona
Aunque pueda parecer difícil de creer, la capital no es la zona con los precios más altos de la provincia, sino Esplugues de Llobregat.
A unos 20 minutos de Barcelona, este municipio ofrece un precio medio de 24,3 euros el metro cuadrado, por lo que una vivienda de 100 metros ascendería hasta los 2.430 euros, casi el triple de lo que se paga en Manresa, la ciudad más barata de la provincia.