Abrir la puerta de casa tras un día duro en el trabajo y saber que hay un animal esperándote al otro lado de la puerta, hace que se nos olvide el estrés de la jornada y que nos sintamos acompañados. Aunque no nos hablen, los gatos nos brindan el apoyo que en ese momento necesitamos. A pesar de que sean esquivos, a su manera, son capaces de expresarnos el cariño que nos tienen. Son los primeros que se acercarán a ti si notan tu tristeza y no tardarán en pedirte mimos. Cada gato tiene su propia personalidad y reaccionan diferente hacia las mismas situaciones. Aun así, todos tienen ciertos rasgos en común.
Las seis cualidades del carácter de un gato
Los gatos, por lo general, comparten seis rasgos en su personalidad, tal y como explica el Hospital Veterinario Donostia en su página web.
Independientes
Aunque hay algunos más apegados a sus dueños, todos son emocionalmente menos dependientes que los perros. De hecho, pueden estar solos durante dos días perfectamente, siempre que tengan agua, comida, un lugar para hacer sus necesidades y otro donde descansar.
Curiosos
“La curiosidad mató al gato”. La curiosidad de los felinos alcanza tales niveles que no son conscientes del peligro al que se exponen. Por ello, hay que tener especial cuidado con las ventanas y los balcones porque podrían saltar para comprobar qué es lo que se ve.
Tímidos
Las interacciones no son su fuerte, por eso es importante dejarles su espacio. Cuando necesiten un poco de cariño, serán los encargados de reclamarlo. No hay que ir detrás de ellos, es vital esperar a que sean ellos los que tomen la iniciativa de acercarse.
Asustadizos
Son sensibles a los ruidos fuertes. Cuando algo les asusta pueden correr a esconderse, maullar, erizarse o gruñir. Es importante que esté en lugares tranquilos para que no sufra de estrés.
Cazadores nocturnos
Son también uno de los animales que más horas al día pasan dormidos. Pero, llegada la noche, se activan y empezarán a corretear.
Observadores
Si estás triste, lo notarán y se acurrucarán contigo como señal de cariño. Eso sí, si estás irritado o ansioso rehuirán.
Por qué los gatos mueven la cola de forma rápida
Descifrar el lenguaje corporal de un felino puede convertirse en todo un reto. Los gatos son muy complejos y la forma en la que expresan cómo se sienten puede no ser muy obvia, por ello, es fácil que la malinterpretemos. Podemos pensar que están reclamando cariño cuando, en realidad, quieren que les dejemos tranquilos, por lo que recibiremos un zarpazo en señal de aviso.
A diferencia de los perros, los gatos no mueven la cola cuando están contentos, sino cuando están enfadados o molestos, aunque no siempre es por eso. El lenguaje oculto tras el movimiento de cola es un excelente indicador de sus emociones. Prestando atención a la dirección y la velocidad del movimiento, podemos entender cómo se sienten, según explica el portal Purina.
Cola baja
Significa que están tristes, cuanto más baja, más alicaídos están. Será el momento de dirigirse a ellos con palabras suaves. Esto les sucede cuando se sienten solos o están enfermos.
Cola entre las patas
Al igual que sus compañeros perrunos, lo haces cuando están asustados. Sus orejas también pueden estar inmovilizadas y su cuerpo agachado y pegado al suelo.
Movimientos lentos
Cuando la mueven lentamente de izquierda a derecha, significa que se sienten algo molestos. Lo mejor en estas ocasiones es darles su espacio y dejarles tranquilos.
Movimientos rápidos
Ocurre cuando tienen ganas de jugar. Lo harán cuando se están divirtiendo con sus juguetes o con otro felino, una acción que combinan con pupilas dilatadas y las orejas apuntando hacia delante.
Movimientos pausados
Es una señal de que están concentrados. Es habitual observar este comportamiento cuando han visto un pájaro por la ventana y, en ocasiones, va acompañado de sonidos curiosos como gorjeos.
Cola hacia arriba
Es una expresión de alegría por ver a sus dueños. Se acercarán con la cola levantada y un ligero temblor en la punta, parecido al movimiento de una serpiente de cascabel. Un gesto que indica que están abiertos a interactuar. Además, ronronearán, te rozarán con su cabeza e incluso maullarán de forma alegre.
Cola envolvente
En ocasiones, demuestra su afecto alrededor de tu mano, brazo o cuello. Este gesto, aunque poco frecuente, es una muestra de cariño que algunos prefieren a los tradicionales “cabezazos” de afecto.
Cola esponjada
Significa que se sienten amenazados. Este comportamiento es común en momentos de tensión o conflicto, como frente a otro gato, un perro o incluso el aspirador. Al esponjar la cola y arquear la espalda, intentan aparentar mayor tamaño para intimidar al posible “enemigo”.
Movimiento de cola mientras están dormidos
A veces, al dormir, pueden mover la cola si los acariciamos o les hablamos. Quiere decir que perciben tu presencia y que se sienten lo suficientemente seguiros como para seguir descansando.
Agitación de la cola dormidos
Si mueven la cola mientras están tumbados y muestran comportamientos inusuales como dejar de comer o esconderse, podría estar indicando dolor o malestar.