Se mantiene alta la cantidad de cheques rechazados y está casi 200% por encima de un año atrás

El nivel de documentos rechazados superó los 100.000 en noviembre y creció el porcentaje respecto a los compensados

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Los cheques rechazados por falta
Los cheques rechazados por falta de fondos crecieron más de 189% interanual.

El sistema financiero argentino registró en noviembre de 2025 una disminución en la cantidad de cheques rechazados por falta de fondos respecto al mes anterior, de acuerdo con datos oficiales del Banco Central de la República Argentina (BCRA). Sin embargo, la comparación interanual mostró un crecimiento cercano al 200% en este indicador, lo que implica que casi se triplicaron en el último año. Este aumento evidencia la presión sobre el acceso al crédito y la liquidez de empresas y particulares, mientras el cheque electrónico (ECHEQ) incrementa su participación tanto en volumen como en monto.

Según el Informe de Pagos Minoristas del BCRA, durante el undécimo mes del año se compensaron 4,7 millones de cheques, entre físicos y electrónicos, por un total de $18,6 billones. La cantidad de rechazados ascendió a 100.603 y retrocedió 7,7% frente a octubre. No obstante, la comparación entre noviembre de 2025 y el mismo mes de 2024 refleja un incremento cercano al triple (189,5%) en los rechazos por insuficiencia de fondos.

En términos proporcionales, los rechazos representaron el 2,2% de las cantidades y el 1,7% de los montos sobre el total de cheques compensados. Este dato resalta las dificultades que enfrentan empresas y personas físicas para cumplir con sus obligaciones de pago, afectando especialmente a las pymes y repercutiendo en la cadena de pagos.

Uno de los cambios más relevantes en el segmento de pagos es el avance del ECHEQ, que en noviembre conformó el 60,1% de los cheques compensados en cantidad, es decir, unos 2,8 millones de instrumentos. En valor, su peso resultó aún mayor: el 82,5% de los montos procesados correspondió a cheques electrónicos, consolidando el desplazamiento de la herramienta física tradicional en el sector bancarizado y marcando una tendencia que el Banco Central resalta en sus informes sobre pagos minoristas. Este crecimiento obedece no solo a la digitalización de los procesos, sino también a la búsqueda de mayor rapidez y trazabilidad en las operaciones empresariales.

En noviembre se rechazaron más
En noviembre se rechazaron más de 100.000 cheques por falta de fondos, según datos del Banco Central (Freepik)

El último informe divulgado por el Banco Central indica que la principal causa de cheques rechazados sigue siendo la “falta de fondos suficientes”. Si bien la caída mensual puede interpretarse como un cierto alivio financiero para algunos actores, el fuerte incremento interanual indica que el entorno para el financiamiento y la administración del capital de trabajo sigue siendo adverso, en especial para los sectores más expuestos a la volatilidad crediticia.

En cuanto a otros instrumentos, el relevamiento oficial revela que las transferencias inmediatas en pesos aumentaron un 20,3% interanual, alcanzando 666,3 millones de operaciones por $70,1 billones. Los pagos efectuados con QR y otros medios electrónicos presentaron evoluciones diferenciadas según el canal y la moneda utilizada. Este panorama refleja la transformación en los hábitos de pago y el papel creciente de las soluciones digitales.

Con el ECHEQ abarcando la mayoría absoluta de los montos compensados, la transformación digital sigue relegando al cheque en papel como instrumento de pago empresarial, una transformación que el BCRA detalla en sus reportes recientes.

Se triplicó la morosidad de las familias

Hace pocos días, la autoridad monetaria había informado que la mora bancaria de los préstamos a los hogares en Argentina alcanzó el 7,8% en octubre de 2025, lo que implica que se triplicó en relación con el mismo mes de 2024, marcando el valor más elevado desde 2010.

Según el Informe sobre Bancos del Banco Central, el índice de irregularidad de los créditos al sector privado subió a 4,5% del total en octubre, 0,4 puntos porcentuales más que el mes previo. Dentro de ese universo, la mora de los hogares sobresale frente a la de las empresas, que se ubicó en 1,9% para el mismo período.

La diferencia entre ambos segmentos muestra que la morosidad de las familias supera ampliamente a la registrada en el sector corporativo. Respecto a octubre de 2024, el atraso de los hogares pasó de 2,5% a 7,8%. En el caso de las empresas, la morosidad se duplicó en el año, al pasar de 0,7% a 1,9%.