Jake Paul propuso un cambio radical en la pelea ante Tyson y provocó la advertencia de Iron Mike: “Debería tener mucho cuidado”

Jake Paul hizo una sugerencia durante una conferencia de prensa en Nueva York, incitando un cambio en las reglas para su esperada pelea contra el legendario Mike Tyson, y provocó una áspera reacción del ex rey de los pesados. Este duelo se realizará en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, el viernes 15 de noviembre. El combate, que promete ser uno de los eventos más destacados del año, se transmitirá exclusivamente a través de Netflix desde el estadio con capacidad para 80,000 espectadores, hogar de los Dallas Cowboys de la NFL.

Iron Mike, de 58 años, se enfrentará a la controvertida personalidad de YouTube y boxeador profesional, 31 años menor, y cuyo récord se extendió a 9-1 con una victoria en el primer asalto sobre Ryan Bourland en marzo. Por otro lado, la última aparición de Tyson en el cuadrilátero fue una exhibición de seis asaltos contra Roy Jones Jr. en el año 2020.

La conferencia de prensa incluyó un debate sobre detalles clave en el enfrentamiento, incluyendo la duración y equipamiento para la pelea. El combate, autorizado como profesional por la Comisión de Texas, se disputará a lo largo de ocho asaltos de dos minutos cada uno, con ambos peleadores utilizando guantes de 397 gramos (14 onzas). La especulación es que fue Tyson quien solicitó los asaltos de dos minutos ya que “cree que los asaltos más cortos comandarán más acción en el ring.”

Durante la rueda de prensa, la discusión sobre la posible modificación de las reglas acaparó la atención. Jake Paul propuso que la pelea se extendiera a diez asaltos de tres minutos, en lugar del formato original. “No me hables de estar en forma”, desafió, llamando a la acción con la frase “¿Quieres 10 de tres? Eso es lo que pasa. Todos hablan. Yo haré lo que sea”. Sin embargo, Tyson se negó a aceptar esta modificación, respondiendo con una advertencia: “Debería tener mucho cuidado”.

Las versiones sobre los acuerdos financieros también surgieron en el contexto del evento. Según el ex campeón mundial de supermedio, Carl Froch, Tyson enfrentaría restricciones contractuales que influenciarán sus ganancias basadas en el desenlace de la pelea. Froch le sugirió a Safebettingsites que “por lo que estoy oyendo con los contratos, supuestamente, le pagan menos si gana en el primer asalto, Tyson, o si consigue un knockout, le pagan aún menos”. Añadió que “no sé si se ha confirmado, pero he leído en algún lugar que hay una cláusula en su contrato que significa que ganará menos dinero si sale y destruye a Jake Paul”.

El influencer, por su parte, reafirmó su postura sobre el combate y sus objetivos financieros. Declaró que se llevaría a casa una cifra significativa por enfrentar al mítico boxeador. “Estoy aquí para ganar 40 millones de dólares (37.8 millones de euros) y noquear a una leyenda”, dijo, añadiendo con fiereza: “No me importa una mierda nada más. Mike Tyson es el que quiso hacer una pelea profesional. Va a quedar noqueado en un récord real…”.

A finales de mayo, Iron Mike experimentó “náuseas y mareos debido a una úlcera que le brotó 30 minutos antes del aterrizaje”. Esto obligó a su atención médica en la llegada de un avión a Los Ángeles, proveniente de Miami, según informaron sus representantes.

Ese incidente obligó a la postergación de la pelea, pero el ex campeón ya está otra vez en el gimnasio y promocionando su regreso al ring, que despertó gran atención entre los fanáticos. Vale recordar que no combate de manera profesional desde junio de 2005, cuando sufrió una sorprendente derrota ante el irlandés Kevin McBride. En la mencionada exhibición contra Roy Jones Jr. en noviembre de 2020, generó una recaudación total de 80 millones de dólares.