Josito Di Palma: “Con diez años, mi abuelo me daba su auto de carrera y lo llevaba a cargar nafta”

En charla con Infobae explica por qué ya no hay más ídolos como su abuelo y el Flaco Traverso. Es el mejor de la “Dinastía” de Arrecifes en la última década. Bajo la presión de su ilustre apellido se ganó su lugar con nombre propio. De vivir con Berta a los 17 años a pelear títulos en el TC

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Josito Di Palma es el mejor de la "Dinastía" en los últimos años (Prensa ACTC)
Josito Di Palma es el mejor de la "Dinastía" en los últimos años (Prensa ACTC)

Es nieto de uno de los pilotos argentinos más grande de la historia, Luis Rubén Di Palma, y dentro de una familia que respira automovilismo el destino estuvo marcado para Josito Di Palma. Creció en talleres y fiel a la tradición se convirtió en piloto como su abuelo, su padre, José Luis; sus tíos, Marcos y Patricio; su hermano Stefano y su primo, Juan Cruz. Lleva un apellido ilustre, pero supo hacer su camino y se consolidó con nombre propio. Es el mejor representante de la “Dinastía” de Arrecifes.

En los boxes del Autódromo de Buenos Aires Oscar y Juan Gálvez, su hermano y su padre le hacen señas graciosas y Josito no puede evitar reírse. Con la frescura y sinceridad que caracteriza a los Di Palma, el corredor de 33 años se prestó al mano a mano con Infobae.

Volvió al Top Race y con un prototipo Fiat Cronos (N. de la R: en la categoría todos los autos son iguales y lo que cambian son las carrocerías) el pasado domingo lideró la final hasta que se le apagó el motor. “Conozco la categoría en la que pude ganar dos carreras y puedo correr con mi hermano, así que más no se puede pedir”, afirma. Este finde de semana en Neuquén correrá con su Ford Falcon la segunda fecha del Turismo Carretera, donde ganó dos carreras en 2021 y peleó por el título hasta la última fecha mérito que también hizo en 2017. En el arranque de la popular categoría largó desde el fondo la final y remontó hasta la 13ª posición entre 49 competidores.

Entrevista a Josito Di Palma, el mejor representante de la "Dinastía" en los últimos años. Recuerda las anécdotas con su abuelo.

-¿Cómo se explica la pasión de la familia Di Palma por el automovilismo?

-Es difícil de poder explicar. En mi caso mi familia me ha dado la posibilidad de hacer otros deportes, pero por suerte pude hacer lo que me gusta ya que es mi pasión, la de mi hermano que está detrás haciendo algunas señas. Le agregamos toda la familia. De chico recuerdo las carreras con mi abuelo, mis tíos, mi viejo o acompañarlo a mi hermano a correr en karting. Uno siempre estuvo dentro del ambiente y es difícil que no te guste. Hoy uno puede tener trabajo del automovilismo y vivir de esta profesión.

-¿Recordás alguna anécdota con tu abuelo?

-Hay varias, hay varias, digamos, hay una con el helicóptero viajando a Río Cuarto. Había neblina, no se podía volar directamente. Había neblina, no se veía, la neblina estaba muy baja, no se veía. Y no me acuerdo si era una carrera del Top Race o de TC. Bueno, cuestión que veníamos volando a la par de la ruta. Siempre uno cuando va volando en un avión o en helicóptero, siempre vas volando en línea recta y por eso siempre es mucho más rápido viajar en la parte aérea, ¿no? Entonces no podíamos hacer la línea recta porque no se veía. Tampoco estaba tan sofisticado todo con el tema de GPS como hoy, así que íbamos a la par de la ruta volando bajito, a la par de los autos, bajito, casi sobre la línea de alta tensión, ahí apenitas, y veníamos por el lado derecho, no sé, veníamos 40 minutos por el lado derecho. Y me dice “vamos a cruzar un ratito para el otro lado, por las dudas”. Bueno, cruzamos para el otro lado y a los dos segundos aparecen las antenas de teléfono, con cable, todo, y de no haber cruzado para el otro lado nos hubiésemos quedado ahí a mitad de camino nomás. Así que anécdota bastante peligrosa, pero como esa un montón; con el auto de carrera, de chiquito, de dármelo para ir a cargar nafta e ir a la estación de servicio teniendo diez años. ¡Una locura! Pero bueno, cosas que a lo mejor no sé si son normales, pero uno que la vivió de chico fueron casi como normales.

Josito Di Palma y su hermana junto a su abuelo en el helicóptero (@jositodipalma1)
Josito Di Palma y su hermana junto a su abuelo en el helicóptero (@jositodipalma1)

-¿En qué te ayudó o perjudicó ser un Di Palma?

-No, no, no puedo ver un perjuicio. No puedo basarme por lo que hace el resto que me perjudique a mí. Yo hice mi camino y soy conocido como Josito, por lo cual llevo con mucho respeto y orgullo mi apellido. Después está en las manos de otra persona en poner en una misma bolsa un montón de cosas que a lo mejor no corresponden. Pero estoy tranquilo con el camino que hice en el automovilismo y puedo caminar tranquilo por la calle de boxes.

-¿Sentiste más presión por el tema del apellido?

-Me cuesta. Constantemente para uno la parte económica es muy determinante y tenés que estar rindiendo examen todos los domingos. Si largás último tenés que hacer una remontada, si largás primero tenés que ganar, y si venís al Top Race tenés que hacer el “1″ (mejor tiempo clasificatorio) y no es así. Hay un montón de pilotos igual o mejores que uno, y uno quiere aprender de ellos para ganarles. Pero bueno, es un poco el automovilismo de hoy que es bastante feo. Hasta en el fútbol pasa que un técnico pierde dos partidos y lo echan. Es el presente que se está viviendo.

Josito, de niño, junto a su abuelo, Luis Rubén Di Palma y sus tíos, Marcos y Patricio en una carrera de TC (Archivo CORSA)
Josito, de niño, junto a su abuelo, Luis Rubén Di Palma y sus tíos, Marcos y Patricio en una carrera de TC (Archivo CORSA)

Luego de los retiros de su padre y sus tíos, Josito llevó la bandera de los Di Palma. Logró consolidarse en el ámbito nacional y ganó en todas las categorías que corrió. En su momento conformó la guardia joven junto a Agustín Canapino, Mariano Werner, Facundo Ardusso, el recordado Guido Falaschi, y hoy sigue siendo protagonista.

-¿Qué se puede hacer para mejorar el automovilismo y que tenga la importancia que tuvo antes?

-No tengo la receta. Puedo decirte que no hubo más ídolos. Creo que antes se hacían ídolos porque no había tanto alcance. En una época ganaban mucho Traverso o Di Palma y hoy está al alcance por las redes sociales de seguir a uno u otro piloto. Tenés un abanico más grande para elegir a uno porque hace una boludez y capaz que uno se hace ídolo porque se tira en bicicleta al revés y el otro porque gana carreras. Entonces se ha abierto tanto el abanico y hay tantas cosas en redes sociales, televisación, un montón de cosas. Cualquier persona tiene acceso y se ha perdido eso de una persona ver a su ídolo y decir “ah, lo vi”; hoy lo podés ver en cualquier lado, entonces es como que cambia un poco.

-¿Para vos los últimos ídolos fueron tu abuelo y el Flaco Traverso?

-Si, sin dudas. Le siguieron a ellos Ortelli (Guillermo), Martínez (Omar); ya hoy por hoy, en el automovilismo, de esos ídolos no quedan más.

Josito en sus inicios con su padre, José Luis Di Palma (Facebook Josito Di Palma)
Josito en sus inicios con su padre, José Luis Di Palma (Facebook Josito Di Palma)

-¿Hay excesos en pista de algunos pilotos en la Argentina?

-Veo un gran nivel y hoy los pilotos nuevos tienen acceso a las cámaras y adquisición de datos que antes no los teníamos. Ellos pueden llegar al nivel de uno en poco tiempo y eso hace que el automovilismo argentino sea tan competitivo y eso hace que cuando uno de los nuestro va a al exterior brilla.

-El año pasado peleaste el título de TC, ¿qué pasó y qué se hace para volver a estar adelante?

-Este año arrancamos bien, tuvimos un poco de mala fortuna y tuvimos que largar desde el fondo en la serie y el año pasado fue excelente, ganamos dos carreras, pudimos pelear el campeonato y después por diferentes motivos no se pudo dar, pero contento de haber llegado a la última fecha con chances.

-¿Es tan caro como dicen el TC, con un costo de 3,5 millones de pesos por carrera?

-Depende. Todo el automovilismo es caro. No llamemos “caro” solo al TC. Correr en cualquier cosa, sea un zonal o en primera línea es caro. Tenemos una relación con el dólar muy alta y nosotros tenemos elementos importados y va a la mano de eso. Y luego están los pilotos que rompen el mercado con la guita y terminás quedando afuera de ese círculo.

Entrevista a Josito Di Palma, el mejor representante de la "Dinastía" en los últimos años. Habla sobre la falta de ídolos en el automovilismo argentino.

Josito nació (27 de febrero de 1989) en plena campaña internacional de su papá, que en ese momento corrió en la Fórmula 3 Sudamericana y luego pegó el salto a Europa y fue campeón de la Fórmula 2 Británica en 1994, categoría similar a la Fórmula 3000, por entonces antesala a la Fórmula 1. También “Joe” y su familia vivieron en los Estados Unidos cuando corrió en la Indy Lights, categoría previa a la IndyCar. En su retorno al país acompañó a su padre, su abuelo y sus tíos en sus talleres y autódromos y en su adolescencia empezó a correr. A sus 17 años se fue a vivir a Alta Gracia y al igual que Luis Rubén trabajó junto a Oreste Berta. Josito corrió en uno de los equipos satélites de Ford en el TC 2000.

-¿Cómo fueron tus años con Berta?

-Fui de los 17 a los 21 años. Fue una etapa hermosa en la que pude profesionalizarme y aprender mucho. Pude probar muchos autos, viajar a ferias en Orlando y feliz de haber sacado cosas buenas de ellos. Me marcaron mucho esos años y estoy muy agradecido.

Di Palma con el prototipo Fiat Cronos con el que volvió al Top Race este fin de semana (Prensa Top Race)
Di Palma con el prototipo Fiat Cronos con el que volvió al Top Race este fin de semana (Prensa Top Race)

-¿En qué te influyó el haber vivido afuera de chico?

-Tuve la posibilidad de ir al colegio, de conocer otros países. Me ayudó en lo que me transmitió mi viejo sobre estilos de vida y uno tuvo la posibilidad de haber vivido un montón de cosas. Después uno se va naturalizando con la “argentineada” y terminás siendo uno más.

-¿Te trajo problemas ser tan frontal?

-Sí, a veces no gusta, pero tampoco sirve pensar una cosa y decir otra o no decir nada directamente. Pero uno lo que piensa lo dice, pero en términos buenos, tampoco hablar como un loco. Si uno tiene ideología sobre algunas cosas está bueno compartirla.

-Una vez dijiste que había que hacer control de alcoholemia en el automovilismo…

-Eso me trajo problemas con algunos colegas y fue hace mucho. No se implementó nunca. Pero bueno, tampoco hemos tenido casos en los que un piloto chocó y estuvo borracho o bajo los efectos de drogas, pero nunca está de más hacer todos los controles posibles.

Josito Di Palma y su hijo mayor, Valentino (@jositodipalma1)
Josito Di Palma y su hijo mayor, Valentino (@jositodipalma1)

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