La estrategia de Netflix para construir el próximo gran estudio de Hollywood

Por Lucas Shaw

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(AP Photo/Matt Rourke)
(AP Photo/Matt Rourke)

Si eres actor o productor en Hollywood no te puedes perder las nuevas instalaciones que Netflix ha construido en Tinseltown. Su nueva torre de 14 pisos es visible a varios kilómetros de distancia de Los Ángeles y está coronada por el popular logotipo rojo de la compañía. El olor a palomitas da la bienvenida a los visitantes en el vestíbulo.

En el interior, el director ejecutivo de contenidos, Ted Sarandos, está contratando a los productores y guionistas más exitosos de la televisión. Desde que Netflix emitiera su primera serie original, Lilyhammer, en 2012, la compañía ha construido una de las redes audiovisuales más valiosas de la industria. Ahora, con un presupuesto de USD 16,000 millones, la empresa estadounidense aspira a convertirse en el creador más grande del mundo del entretenimiento, haciendo programas como los actuales proveedores, incluyendo a CBS.

En las últimas semanas, Netflix ha firmado un contrato de larga duración con Shona Rhimes, la creadora de Anatomía de Grey y Scandal en ABC, también contrató a un ejecutivo para desarrollar programas infantiles originales y compró una editorial de novelas. Netflix Studios está produciendo alredor del 75 por ciento de los nuevos proyectos de la compañía, tal y como revela Sarandos, que es el artífice clave de una plataforma que incluye 200 comedias, dramas, espectáculos infantiles y largometrajes.

(Archivo)
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"El viejo mundo siempre fue un equilibrio entre el dinero y la libertad creativa. En el mundo de hoy, es posible tener ambas cosas", apostilló Chris Silbermann, agente de Rhimes en ICM Partners.

Sarandos, de 53 años, llegó por primera vez a Hollywood como ejecutivo de una cadena de alquiler de videos y se unió a Netflix en el 2000. Ha crecido en su posición ejecutiva y se ha convertido en un personaje clave en Hollywood, organizando recaudaciones de fondos políticos en su casa junto a su esposa, Nicole Avant, ex embajadora en las Bahamas.

El hombre pasa gran parte de su tiempo en la carretera, firmando acuerdos con productores en Australia, Polonia y Japón. En Hollywood, su trabajo principal es el de guiar la estructura empresarial. Cuando algún creador de alguna serie de éxito se encuentra con los críticos, Sarandos está ahí.

"Nuestra parte del negocio requiere un gran compromiso. La gente necesita, y mucho, ver tu cara. La gente necesita saber que estás interesado en sus proyectos y que participas en ellos", afirma.

Con los años, el trabajo del jefe de Netflix se ha hecho más fácil. Al principio, ningún creador o actor con un poco de trayectoria quería trabajar para un servicio de streaming cuando podían ganar premios con producciones en HBO o ganar millones de dólares con una serie emitida en televisión. Así que Netflix no tuvo más remedio que hacer ofertas absurdas. Prometió USD 100 millones y se comprometió a hacer dos temporadas del drama político de David Fincher, House of Cards, cuya serie está protagonizada por Kevin Spacey. Pocas cadenas de televisión encargan, incluso una temporada completa, antes de emitir el piloto.

Esta serie fue un gran éxito de audiencia, al igual que el drama penitenciario sobre mujeres, Orange is the New Black. Sin embargo, los agentes alejaron a los clientes de Netflix ya que temían que nunca generaran tanto dinero. La compañía no revela la cantidad de personas que ven sus programas, una métrica clave en las negociaciones televisivas. Además, Netflix también exigió tener el derecho a la perpetuidad, lo que limitaba el valor de las repeticiones. Seinfeld, la comedia de éxito de la NBC de los años noventa, ha ganado más de USD 3 mil millones con su distribución sindicada.

Pero los éxitos siguieron llegando gracias a series y películas como Daredevil, Narcos y Master of None. Seguramente ninguna propuesta como Stranger Things, una serie de terror fantástica sobre un niño desaparecido, habría logrado unir a tantísima gente.

Sus creadores, Matt y Ross Duffer, han confesado que estaban preocupados por el posible fracaso de Netflix porque la compañía no lo había comercializado. Sin embargo, fue una sensación instantánea y se colocó en las primeras posiciones de las series más esperadas para la temporada de otoño.

Así pues, parece que Netflix tiene un gran futuro por delante. Mucho más que las televisiones convencionales.