Al menos cuatro personas murieron y varias más resultaron heridas este jueves en la región de Kherson, en el sur de Ucrania, como consecuencia de una serie de ataques rusos con artillería, drones y bombardeos aéreos, según informaron autoridades locales.
En el pueblo de Tavriyske, un bombardeo aéreo ruso provocó la muerte de un hombre de 38 años y heridas a otro de 34, luego de que bombas guiadas impactaran un edificio residencial, indicó el gobernador regional Oleksandr Prokudin en Telegram.
Horas antes, una mujer de más de 70 años resultó herida durante un ataque nocturno en el distrito de Korabelni, dentro de la ciudad de Kherson. Según el municipio, la víctima fue atendida por los servicios de emergencia.
En un informe más amplio publicado por Prokudin, se confirmó la muerte de otras dos personas en distintas localidades. En Chervonyi Mayak, un hombre de 55 años fue alcanzado por un dron FPV (vehículo aéreo no tripulado de primera persona), mientras que en Sofiivka, un trabajador de 38 años murió tras el impacto de proyectiles sobre una empresa agrícola.
“Durante las últimas 24 horas, múltiples comunidades en la región han estado bajo el terror de drones enemigos, bombardeos de artillería y ataques aéreos”, escribió el jefe de la administración militar regional.
Entre las zonas afectadas se encuentran Dar’ivka, Stanislav, Oleksandrivka, Novooleksandrivka, Antonivka, Beryslav, Novovorontsovka, Osokorivka, Mykilske, Blagodatne, Molodizhne, Mykhailivka, Zelenivka, y la ciudad de Kherson, entre otras más de 40 localidades que fueron blanco de fuego ruso en distintas modalidades.
Los ataques alcanzaron infraestructuras críticas y sociales, incluyendo zonas residenciales, dos edificios de gran altura, 16 viviendas particulares, una torre de telefonía móvil, un gasoducto, almacenes, una gasolinera y varios vehículos civiles, de acuerdo al balance publicado por la administración regional.
Desde hace semanas, las fuerzas rusas mantienen una ofensiva activa sobre regiones del sur y noreste de Ucrania. En particular, se reportaron avances en el frente de Sumy, mientras en el sur las operaciones se centran en hostigar localidades estratégicas a lo largo del río Dniéper, donde el control territorial permanece dividido tras la contraofensiva ucraniana de 2023.
Ucrania enfrenta un desgaste constante en estas regiones, donde las fuerzas armadas rusas combinan ataques aéreos con operaciones de artillería y el uso intensivo de drones para impactar tanto blancos militares como objetivos civiles.
Las autoridades locales reiteraron el llamado a la población para que evite desplazamientos innecesarios y permanezca en zonas seguras mientras continúan los ataques. El número de víctimas podría aumentar conforme avanzan las labores de rescate en las zonas afectadas.
(Con información de AFP)
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