El arsenal del Cártel de Sinaloa: lanzacohetes, armas de guerra y millones de balas

El poder de fuego del narco se ha visto en decomisos de fusiles utilizados en la guerra por diversos ejércitos y terroristas, nivel que han igualado sicarios del Cártel de Sinaloa, quienes pueden adquirir millones de municiones, decenas de armas largas, explosivos y hasta lanzacohetes.

A principios de este mes, las autoridades federales reportaron el aseguramiento histórico en balas suficientes para combatir por semanas y hasta la fecha, apenas han logrado contabilizar 3 millones 25 mil 500 proyectiles adquiridos en Estados Unidos por los Salazar, quienes están subordinados a los Chapitos y/o los Menores.

Hasta este 10 de marzo, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Fiscalía General de la República (FGR) no han clasificado los calibres incautados en cuatro casas de seguridad de Navojoa, Sonora, también llamadas narcobodegas. Pero de algo tienen certeza, fueron adquiridas por la facción que responde a los hijos de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo.

Aunque en la dirección del Cártel de Sinaloa se mantiene el líder por décadas, Ismael Zambada García, el decomiso del 1 y 2 de marzo estaba dirigido para abastecer a las fuerzas de Ovidio Guzmán López, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López, según datos presentados por el titular de la Sedena, el general Luis Cresencio Sandoval.

Sin embargo, los mismos integrantes del grupo criminal difundieron una grabación en sus patrullajes por calles de Guamúchil, Sinaloa, entidad donde se localiza su bastión desde mediados de 1980. En las imágenes se observan sicarios embozados con ropa, cascos y chalecos tácticos de militares, escuchando un narcocorrido. Pero entre esa indumentaria habitual destaca un Arma Antitanque Ligera AT4.

Según el modelo, el alcance efectivo de esta arma va de los 200 a 600 metros y su penetración oscila en armaduras de 350 a 460 mm, según Saab, la empresa sueca fabricante. Pese a que el AT4 es empleado contra blindajes, también sirve para objetivos como fortines, edificios o vehículos ligeros. Lo mismo puede derribar un inmueble que causar un hoyo de tamaño humano y el Ejército de EEUU lo adaptó para lanzar granadas M136 antitanques.

De acuerdo con informes del Ejército y la FGR, en Sonora se aseguraron 188 armas, 150 de ellas son fusiles de grueso calibre y 38 son tipo escuadra. Lo mismo fueron fabricadas en EEUU que en Austria, Croacia, España, Italia, Turquía, Polonia, Rusia, Bélgica, Rumania y Serbia.

En el informe destacaron cuatro fusiles calibre 50, dos Amet de la misma magnitud; además de 50 armas largas de 7.62, 5.56 mm y .308, así como 45 carabinas calibre 5.56 mm. Todo, de fabricación estadounidense.

El Barrett .50 está considerado como el rifle más poderoso del mundo. Perfora estructuras blindadas e incluso el cemento y es capaz de derribar aeronaves. La poderosa arma de guerra tiene un peso de 4 kilogramos. Mide 1.5 metros y tiene una velocidad de salida de 854 m/s. Dispara 70 balas por minuto con un alcance de 2 mil 500 metros.

Análisis del gobierno mexicano estiman que el 70% de las armas que se trafican al país provienen de un fabricante o distribuidor en EEUU y el restante 30% de seis países europeos (España, Italia, Austria, Rumania, Alemania y Bélgica).

La gran mayoría de los fusiles en el mercado negro terminan a manos de cárteles de la droga que las utilizan para arreciar disputas territoriales y mantener a la población en una ola de violencia incesante. De ahí que México inició una demanda en agosto de 2021 contra 11 fabricantes y proveedores estadounidenses en la corte federal en Boston, Massachusetts.

Pese a los decomisos, el Cártel de Sinaloa no se ve disminuido en sus operaciones y continúa con el envío de drogas que causan decenas de miles de muertes por sobredosis en calles de EEUU. Mientras que en territorio mexicano siguen con enfrentamientos y asesinatos que agudizan la violencia incontrolable, armados cual si fueran ejércitos en sus células de sicarios.

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