En medio del baño de sangre, México utiliza sólo el 3% del fondo anticrimen

Las entidades federativas en México, durante los primeros cuatro meses del año, solamente ocuparon el 3% del fondo anticrimen destinado para la seguridad pública.

La inversión del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP), que consiste en su totalidad de 9 mil 600 millones de pesos y fue aprobado por el Congreso de la Unión, contrasta con las cifras récord de homicidios ocurridos durante el 2020.

Un análisis oficial del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) informó que el 3% utilizado ha sido para comprar controles “de confianza”, patrullas y equipos. Menos del 0.1% ha sido destinado para desarrollar el modelo propuesto por los gobiernos para fomentar y modernizar a los cuerpos policiales.

El fondo, principal recurso para acciones de seguridad en los estados, no ha sido utilizado durante el 2020 en entidades como Guanajuato o Colima, donde se registran los mayores índices de asesinatos del país.

La cantidad destinada para el FASP este año, 9 mil 607 millones de pesos, incrementó menos de 1% al fondo del 2019. El año pasado se registró un máximo de crímenes con 35,620 homicidios.

El análisis del SESNSP declaró que se han utilizado 301 millones de pesos en los primeros cuatro meses del 2020: solamente el 3.1% del total destinado. Por lo tanto, si se considera la transferencia de 3 mil 716 millones de pesos del FASP que Secretaría de Hacienda ya realizó a las entidades, se ha ejercido en promedio 1 de cada 10 pesos del dinero que tienen disponible los estados.

Según el reporte, existen 5 mil 891 millones de pesos del FASP que ya se encuentran aprobados pero todavía no han sido distribuidos a las entidades federativas del país. Además, la adquisición de recursos materiales es la prioridad en la inversión del fondo.

El 46% del dinero aprobado, 4 mil 441 millones, está destinado para la compra de “equipo e infraestructura”, entre lo que se incluyen recursos de 2 mil 900 millones de pesos para la compra de insumos de instituciones de seguridad como chalecos y patrullas. Como comparación, el fondo previsto para la compra de equipo para la búsqueda de personas desaparecidas es de 143 millones de pesos.

Las cifras de homicidios en México continúan incrementándose conforme avanza el año. Entre enero y mayo se registró la cifra récord de 15,000 personas asesinadas. Aproximadamente 13% de los crímenes fueron cometidos en el estado de Guanajuato. Para éste se han destinado 330 millones de pesos del fondo, de los cuales, ya se han transferido 132 millones, hasta el cierre de abril no se había utilizado un solo peso de los recursos para combatir la violencia.

Estados como Colima, donde se registra la mayor tasa de homicidios por 100,000 habitantes en el país, Baja California, la segunda entidad con el mayor número de crímenes, Chihuahua, y Jalisco, tampoco han utilizado ni un solo peso de las transferencias que ya les han sido realizadas del FASP.

Sin embargo, una de las entidades con la tasa más alta de homicidios, el Estado de México, ha ejercido la tercera parte de su fondo para combatir la violencia en los cuatro meses que van del año.

Además del FASP, el mayor fondo destinado anualmente para combatir la violencia, en México existe el Subsidio para el Fortalecimiento del desempeño en materia de Seguridad Pública (FORTASEG), antes conocido como Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsemun): otro fondo, de 4 mil 706 millones de pesos para este año, dedicado a los municipios con mayores registros de violencia.

El análisis publicado por el SESNSP no informó sobre las cantidades ejercidas del FORTASEG. Sin embargo, se prevé las futuras inversiones de los recursos, donde se afirma que las mayores cantidades serán para la infraestructura, seguido por el “control de confianza”.

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