Por qué las pruebas son la clave para detener el avance del coronavirus en México

Lo que más preocupa a los especialistas es la transmisión exponencial que escapa a la vista por los casos asintomáticos que siguen propagando el virus. Esta simple cuestión podría derrumbar totalmente al sistema sanitario

Compartir
Compartir articulo
Una muestra de sangre para pruebas de coronavirus (Foto: REUTERS)
Una muestra de sangre para pruebas de coronavirus (Foto: REUTERS)

Un sector de la población defiende la estrategia que está tomando López Obrador para frenar el avance del coronavirus, otro la reprueba y exige medidas más drásticas, y algunos simplemente no creen que el COVID-19 represente una amenaza para el país.

José Narro, el secretario de salud durante los tiempos de Peña Nieto, consideró que México está bien preparado para hacerle frente a la contingencia, pero también advirtió que no será posible detener la epidemia si no se encuentra el modo de realizar más pruebas y a mayor velocidad. “Se tienen que tomar acciones y la principal es evitar la infección de otras personas y para ello se tienen que hacer pruebas, pruebas, pruebas y más pruebas”, explicó al diario El País, parafraseando las recomendaciones que también ha dado Tedros Adhanom, secretario general de la OMS.

En estos días, algunos usuarios denunciaron a través de redes sociales lo difícil que es hacerse la prueba del Covid-19 en México. Según estos testimonios, pasar el filtro del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) y lograr que te realicen el test es muy complicado, y en las clínicas de atención primaria no disponen de este examen, así que te recetan un tratamiento y te envían a casa bajo la calificación de “potencialmente sospechoso de Covid”.

(Foto: Archivo)
(Foto: Archivo)

Según Narro, en las últimas décadas se ha construido en México un buen sistema de vigilancia epidemiológica, pero con muchas carencias en la atención a los pacientes: "México tiene una estructura muy bien dotada de equipo, técnicas y de personal especializado, pero eso requiere de presupuesto, mantenimiento y que se acompañe a las personas con problemas de salud”, explicó. “La información a la sociedad ha sido consistente y sistemática, eso hay que reconocerlo, pero no basta con que se diga ‘va a haber pruebas’, hay que decir dónde y en qué condiciones”.

El problema es que hay más de 69 millones de mexicanos que no cuentan con ningún tipo de cobertura médica, y a decir por Narro, la verdad es que durante la administración del Partido Revolucionario Institucional (PRI) nunca hubo gran interés en destinar recursos para el sistema de salud, lo que lo hizo desordenado e ineficiente. “¿Qué pudo haber hecho México? Tener mejores servicios de Salud, tener más recursos, equipamiento, infraestructura, mejores recursos humanos... No fui capaz de convencer a las autoridades hacendarias y políticas, al presidente de la República, para que se destinaran más recursos", confesó Narro.

Lo que más le preocupa al ex funcionario es la transmisión exponencial que escapa a la vista por los casos asintomáticos que siguen propagando el virus, algunos sin siquiera tener conocimiento de que son portadores. Esta simple cuestión, argumentó, podría derrumbar totalmente al sistema sanitario.

(Foto: AP Photo/Marco Ugarte)
(Foto: AP Photo/Marco Ugarte)

Las medidas que México está tomando para frenar el avance del virus son correctas, pero para José Narro llegaron un poco tarde. Además dijo que siente que hay más desorden y menos comunicación: “se trata de un asunto en el que debería haber una enorme articulación en la estrategia y no decisiones por sector, por grupo, por entidad federativa, que cada quién está tomando”.

Lo que reprobó tajantemente fue la realización del festival Vive Latino, en el que asistieron más de 40,000 personas, ignorando por completo una de las principales recomendaciones de las autoridades sanitarias: no permitir grandes aglomeraciones de personas.

No podemos engañarnos, este es un problema del mundo, no de México, pero a México le toca atender lo suyo”, comentó Narro. “Deberíamos estar unidos todos, en la misma línea, pero en la dirección correcta, con la estrategia pertinente, con la información necesaria, con la colaboración de todos”.

De acuerdo con el último corte de este domingo, en el país hay 316 casos; 794 sospechosos y 1,667 negativos. Hasta el momento solo se tienen dos defunciones registradas.

Del total de los casos, 64% se han presentado en hombres con una edad media de 40 años, y más del 90 por ciento han sido tratados de manera ambulatoria y sólo el 10% ha requerido hospitalización.

MÁS SOBRE ESTE TEMA: