Sorprendió el voto en blanco en las presidenciales de Colombia: fue el más bajo de los últimos veinte años

Además de que no alcanzó el porcentaje predicho, la votación aumentó con respecto a la primera vuelta de las elecciones presidenciales

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El voto en blanco se consagra a nivel constitucional y es una opción válida cuando los ciudadanos consideran que ninguno de los candidatos llena sus expectativa. Foto: Colprensa / Vanguardia Liberal.
El voto en blanco se consagra a nivel constitucional y es una opción válida cuando los ciudadanos consideran que ninguno de los candidatos llena sus expectativa. Foto: Colprensa / Vanguardia Liberal.

En los comicios electorales de este 19 de junio, en los cuales se eligió como el presidente de los colombianos para el periodo 2022 - 2026 al candidato del Pacto Histórico, Gustavo Petro Urrego, el voto en blanco dio sorpresas, puesto que, no alcanzó el porcentaje del 5 %, el cual era el esperado según las predicciones electorales; adicionalmente, el número de votantes aumentó en la segunda vuelta, contrario a lo que ha sucedido en las últimas elecciones presidenciales.

El histórico del voto en blanco en los últimos 20 años

El voto en blanco se consagra a nivel constitucional y es una opción válida cuando los ciudadanos consideran que ninguno de los candidatos llena sus expectativas; según la Constitución Política, cuando el voto en blanco sea mayor al 50% del total de los votos, se deberán realizar nuevas elecciones y no podrán participar los mismos candidatos; a excepción de la segunda vuelta donde el voto en blanco no tiene la misma validez.

Año 2002: El voto en blanco alcanzó el 3.3 %, la cual fue una tendencia durante los siguientes dos periodos electorales. El voto en blanco obtuvo 196.116 contra una votación total de 5´862.655 que obtuvo el candidato electo en la época, Álvaro Uribe Vélez.

Año 2006: El voto en blanco obtuvo 226.297 votos lo cual representó el 3 %, contra 7´397.835 que alcanzó la candidatura de reelección de Álvaro Uribe.

Año 2010: En el año 2010 la tendencia se mantuvo, el voto en blanco se reflejó con un 3.3 %, con 445.330 votos en contraste con 13´337.658 votos que obtuvieron los dos candidatos de la segunda vuelta: Juan Manuel Santos y Antanas Mockus.

Año 2014: En las elecciones presidenciales de este año el voto en blanco alcanzó un porcentaje mayor que la tendencia de los últimos años, en la primera vuelta el voto en blanco representó el 6 % y en segunda vuelta el 4 %.

Año 2018: En este año el voto en blanco se desplomó en primera vuelta, puesto que representó el 0.31 %, pero en la segunda vuelta se recuperó alcanzando el 4.2 %.

Año 2022: En las actuales elecciones presidenciales el voto en blanco marcó el porcentaje más bajo de los últimos 20 años en segunda vuelta, pues alcanzó el 2.24 % con 501.700 contra una votación total de 22´637.000.

Los expertos analizan

Respecto al comportamiento del voto en blanco, Infobae Colombia consultó a 3 expertos de la de la Facultad de Estudios Internacionales Políticos y Urbanos de la Universidad del Rosario que analizaron el comportamiento de este voto en la segunda vuelta presidencial.

El docente Juan Carlos Ruiz, indicó que el voto en blanco fue una sorpresa en el sentido contrario de lo que se esperaba:

“Se dijo que iba a haber un crecimiento del voto en blanco con respecto a otras segundas vueltas, pero no fue así en las últimas elecciones regionales de congreso y elecciones de primera y segunda vuelta el voto en blanco ya había alcanzado de un 4 al 5 %”

El docente expuso que esta vez la gente participó mayormente: “la gente decidió y prefirió no utilizar la opción del voto en blanco”, enfatizó el investigador.

El profesor Danny Ramírez, manifestó que esta vez la proyección del voto en blanco se fue en favor del candidato, que hoy es el presidente de los colombianos, Gustavo Petro Urrego:

“Sin duda alguna la no asistencia a los debates, los escándalos, los constantes errores de campaña de Rodolfo Hernández fueron decisivos para que ese porcentaje que pensaba abstenerse o votar en blanco se manifestaran y se decidieran por el proyecto político de Gustavo Petro”, declaró el docente.

Finamente, el educador Jesús Agreda, explicó que el número de votos en blanco relativamente pequeño que demuestra efectivamente un compromiso de las personas con algunas dos opciones:

“La gente salió a votar a favor de uno de los dos candidatos y no a favor de una posición en blanco, y eso demuestra justamente también cierto grado de polarización: en el país hay un temor por algunas propuestas y de alguna forma también hay compromiso claro con algunas de ellas; pero principalmente parece que también hay un temor por algunos factores, que ha llevado a que la gente no tome la opción del voto en blanco”.

Estos comicios electorales develaron varias sorpresas, por una parte, la aquí abordada con el voto en blanco, en segundo lugar el hecho de que aumentara el número de votantes en segunda vuelta y en tercer lugar la victoria de un candidato progresista como Gustavo Petro Urrego.

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