La papa criolla de más de 30 mil dólares que un colombiano logró vender en Rusia

Se trata de un antioqueño que hace oda a uno de los productos alimenticios insignes del campo colombiano y que lo dejan como un artista de reconocimiento mundial

Compartir
Compartir articulo
Ernesto Romero Morillo / Foto: Instagram
Ernesto Romero Morillo / Foto: Instagram

Recientemente se viralizó la historia del colombiano que logró vender una papa criolla en $130 millones de pesos, se trata de Ernesto Restrepo Morillo, quien tiene un particular apodo: se hace conocer como ‘el Papas’ y, en efecto, el cuento de la millonaria suma que se ganó con su papa no es sacada de la ficción, es cierta.

Así se lo confirmó el también artesano al diario El Tiempo y a la revista Semana, medios que lograron contactarse con Restrepo y conocer pormenores del ‘tubérculo’ con el que se llenó los bolsillos de dinero.

Sin embargo, aunque para muchos no tiene sentido que alguien se haya atrevido a pagar más de 30 mil dólares por una papa criolla, lo cierto es que lo que distribuyó el artista nacional fue la representación de este producto en oro; con lo que ya se entenderían las razones del abultado precio.

Aunque hay que decir que, de acuerdo con el periódico citado, que se dirigió hasta el taller de Ernesto, allí hay papas de toda clase, básculas y demás aparatos y utensilios relacionados con el arte que usa ‘el papas’, que desde hace más de tres décadas se dedica a dotar a las cocinas y galerías de arte de sus productos.

Lo que hace ‘el papas’ es que, mediante esculturas de bronce, oro y otros materiales representa las papas y, en oda a uno de los productos insignes de Colombia, los distribuye en los establecimientos antes mencionados.

De hecho, el escultor le contó a Semana que en el 2018 creó ‘La Criolla’, la papa por la que hoy todos en su país se preguntan cómo hizo para ganarse esa millonada. “Fue una obra que está dentro del orden de las mismas características generales de todo mi trabajo con unas papas”, cuenta Ernesto, quien quiso hacer una oda a uno de los acompañantes de la fritanga.

“Yo quise hacer una ficción de una cultura que adoraba de la papa criolla, cuando hay cosecha de papa criolla a cierta hora pareciera montañitas de oro”, expresó al portal.

Además, relata que para crear su ‘obra maestra’ se basó en representaciones con ese metal que vio en el Museo del Oro de la capital colombiana y, al terminar su escultura dorada de la papa criolla, la presentó en la Feria Internacional de Arte de Bogotá (ArtBo) donde cautivó a unos rusos “con alguna importancia en el mundo del arte por allá en esas regiones y terminaron llevándose la papa criolla de oro y otros elementos de la obra”, contó ‘el papas’ a Semana.

Asimismo, la creación no salió de la noche a la mañana, el papas asegura que la idea de su papa dorada llevaba en su cabeza desde hace 10 años y, luego de investigaciones, pruebas fallidas y todo un proceso, logró vender el monumento a la papita que crece, por lo general, en las zonas montañosas de departamentos como Boyacá y Nariño.

Acerca de su arte, que no es muy común, Ernesto contó en qué categoría se podría enmarcar: “Mis piezas en mi obra las que son producidas y pueden acercarse al artesanía pero mi obra está ubicada más en las artes plásticas”, expresó a Semana.

Por su parte, en su entrevista con El Tiempo, Restrepo, que es egresado de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Bolivariana de Medellín, les contó que su deseo por inmortalizar comida en esculturas empezó con mangos, mandarinas y otros productos que veía en la calle de su natal Antioquia.

Además, ese medio dice que las esculturas que ‘el papas’ produce podrían estar a la par de famosos pintores, artesanos y escultores como Fernando Botero, Omar Rayo y otros nombres destacados de las artes plásticas colombianas.

SEGUIR LEYENDO: