Tras el anuncio de efectividad de la vacuna rusa, el Gobierno no cambia sus planes e insiste en que adquirirá la primera que esté aprobada

Alberto Fernández ratificó su estrategia de tener acuerdos preliminares con todos los laboratorios. La Sputnik V difundió que tuvo un 92% de eficacia en pruebas de fase 3

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Alberto Fernández mantendrá su estrategia sobre las vacunas que se están desarrollando (Franco Fafasuli)
Alberto Fernández mantendrá su estrategia sobre las vacunas que se están desarrollando (Franco Fafasuli)

“Los planes de la Argentina en materia de adquisición de vacunas siguen como estaban previstos”, dijo un funcionario del Gobierno ante los nuevos anuncios en torno a la eficacia detectada en las investigaciones de Fase III, siempre preliminares. Es decir, concretar cuanto antes sea posible la firma de los contratos con los laboratorios con los que ya se iniciaron conversaciones para vacunar a dos tercios de la población entre diciembre y abril, sin incluir a los menores de 18 años, para los que todavía no hay ensayos en ninguna parte del mundo.

La consulta de Infobae estuvo dirigida al comunicado que el Centro Gamaleya y el Fondo de Inversión Directa de Rusia (RDIF, el fondo soberano de inversión de la Federación Rusa) transmitió a través de sus redes sociales, asegurando que “la efectividad en la aplicación de la vacuna Sputnik V fue del 92%”, un cálculo basado en la distribución de 20 casos confirmados detectados en el grupo que recibió la vacuna y en el que recibió el placebo, un dato que Alberto Fernández conoció anoche, a través de su asesora Cecilia Nicolini, quien integró la delegación que viajó a Moscú junto a Carla Vizzotti, viceministra de Salud.

El comunicado ruso no es ajeno a la verdadera batalla contra el tiempo que están librando los laboratorios más importantes del mundo por llegar primero en la carrera de la lucha contra el COVID-19. El que lo haga, entrará por la puerta grande de la historia y seguramente les sacará varios cuerpos a sus competidores también en términos económicos.

Hasta ahora, ninguno de los anuncios de efectividad fue confirmado por fuentes científicas independientes. Cada uno tiene su estrategia de posicionamiento, pero no dejan de mirar lo que están haciendo los otros que están cerca de la meta.

Una investigadora trabajando en el laboratorio de la vacuna rusa contra el coronavirus
Una investigadora trabajando en el laboratorio de la vacuna rusa contra el coronavirus

De hecho, los rusos dijeron en su comunicado oficial que Sputnik V es “la primera vacuna contra el coronavirus registrada en el mundo, implementada en Rusia el 11 de agosto como parte del procedimiento de desarrollo acelerado de medicamentos”.

Sin embargo, Denis Logunov, el vicedirector del Laboratorio Gameleya, quien ofició como vocero científico en la conferencia de prensa que los rusos dieron el lunes, fue más cauto. ”Los resultados intermedios positivos de la Fase III proporcionan buenas razones para esperar un resultado exitoso de los ensayos clínicos de la vacuna Sputnik V. Seguimos trabajando en el procesamiento de todos los datos, y somos optimistas sobre el futuro", dijo.

Por eso, el Gobierno no se siente en la obligación de cambiar planes. “Como todas las naciones responsables, hicimos acuerdos preliminares con Pfizer, AstraZeneca, Sinopharma, Gamaleya y Jansen, estamos abiertos a realizar otros más, porque nuestra obligación es conseguir las vacunas para los argentinos y las argentinas apenas estén disponibles", explicó la fuente.

En la opinión pública quedó la impresión de que Alberto Fernández sobreactuaba los acuerdos con la Federación Rusa, ante la negociación exitosa y anticipada que llevó adelante Axel Kicillof, actor privilegiado ante los rusos por haberse relacionado con previsión y prolijidad diplomática, evitando la participación de falsos influyentes. Por lo menos, es lo que dicen fuentes ligadas a la negociación. De hecho, el gobernador bonaerense participó de la reunión virtual que el Presidente mantuvo con Vladimir Putin, un dato que no se hizo público.

Ante las críticas por los errores de comunicación que mostró la estrategia del Gobierno, lo explicó de este modo: “Es probable que no hayamos hecho todo lo bien que se esperaba y tal vez no medimos las distintas variables, pero el Presidente tiene una ansiedad con el tema, porque quiere asegurar la provisión de un recurso que será crítico en el mismo momento en que lo recibirán las poblaciones de las naciones más desarrolladas del mundo”.

El diálogo entre Alberto Fernández y Vladimir Putin se concretó el 6 de noviembre
El diálogo entre Alberto Fernández y Vladimir Putin se concretó el 6 de noviembre

El Gobierno todavía tiene deberes para hacer. Logró aprobar con amplio consenso la ley para la contratación de las vacunas contra el COVID-19 y también la promulgó, pero aún no la reglamentó. Por eso aún no pudo firmarse el contrato con ninguno de los laboratorios que están en danza.

En particular con la Sputnik V, todavía no se informó si la firma se realizará solo con el Fondo Ruso, que es el encargado de llevar adelante los acuerdos comerciales, o si también se necesitará que los países que fabricarán la vacuna rusa para la Argentina también firmen otro contrato. Todo indicaría que sí, pero aún no fue aclarado.

El RDIF detalló en su comunicado que también se están llevando a cabo ensayos clínicos de Fase III en la República de Bielorrusia, los Emiratos Árabes Unidos, Venezuela y “varios otros países”. También dijo que hay ensayos en Fase II-III en la India, aunque la embajada de ese país en la Argentina no lo confirmó.

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