La desafortunada frase de Luis Juez sobre los ecuatorianos

Durante una entrevista, el embajador argentino en Ecuador dijo que se cambió la camisa "para que no digan que este mugriento agarró hábitos ecuatorianos"

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El embajador argentino en Ecuador, Luis Juez, emitió una desafortunada declaración que generó el repudio de la Cancillería ecuatoriana y que puso al dirigente cordobés en el centro de la polémica. Durante una entrevista radial, Juez aseguró después de estar varias horas trabajando, se fue a cambiar la camisa "para que no digan que este mugriento se ve que agarró hábitos ecuatorianos".

"He estado desde las 7:45 de la mañana en la escuela San José, y vos sabés que así yo no miento. Llegué hace media hora, me pegué una ducha, me puse un saco y una camisa, porque no quería estar con la ropa de esta mañana, porque van a decir: este mugriento se ve que agarró hábitos ecuatorianos", indicó el embajador.

"Una de las más conocidas es el pueblo Otavalo. Ellos se visten a la mañana del sábado y están todo el fin de semana con la misma ropa. Me refería a eso, para no estar todo el día con el mismo atuendo pasé por casa a cambiarme", explicó Juez luego de emitir las polémicas declaraciones.

Además, afirmó en su cuenta de Twitter que "solamente con mala fe y una malicia infinita se puede descontextualizar mis dichos, intentando hacerme quedar mal con un pueblo al que amo".

En un comunicado la Cancillería de Ecuador rechazó las declaraciones del embajador de Argentina en Quito y señaló que la viceministra de Exteriores, Integración Política y Cooperación Internacional, Lourdes Puma Puma, convocó este martes al encargado de negocios de la sede diplomática de Argentina, Carlos Catella, debido a la ausencia de su titular.

La funcionaria diplomática "expresó su enfático rechazo y disgusto del Gobierno del Ecuador por las aseveraciones emitidas a la prensa argentina por el señor Luis Alfredo Juez, embajador de Argentina en Ecuador, que ofenden la dignidad del pueblo ecuatoriano y que contradicen el respeto y la amistad que deben regir las relaciones entre los dos países".

La Cancillería ecuatoriana consideró "inaceptable que un representante del más alto nivel de un Estado se refiera, una vez más, de manera ofensiva a los ciudadanos del país que le ha recibido con consideración y amistad y en donde su actividad debe estar guiada hacia el fortalecimiento de los lazos políticos, económicos y de cooperación, y no a agraviar reiteradamente a los ecuatorianos".

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