Shakira en Lima: se registran peleas entre clubs de fans por lugar en la fila de ingreso al Estadio Nacional

Los preparativos para los conciertos de Shakira en Lima han estado marcados por tensiones y conflictos entre las seguidoras de la cantante. En los exteriores del Estadio Nacional, específicamente en la puerta 1, se registraron altercados entre fanáticas que llevaban días acampando para asegurar un buen lugar en la fila. Rocío, una joven integrante del club de fans ‘Las Rabiosas’, declaró a RPP que personas ajenas al grupo intentaron ocupar espacios que no les correspondían, generando caos y desorden.

“Nos hemos organizado por días para tener una mejor ubicación, pero otras fans han intentado ocupar lugares que no les corresponden, lo que ha generado conflictos”, explicó Rocío. Además, denunció que se han producido amenazas y peleas entre distintos grupos de admiradoras, lo que ha complicado aún más la situación.

Según se pueden observar en las imágenes, en este lugar hay por lo menos 30 personas con carpas, sillas y sombrillas, esto mientras efectivos policiales intentaban mantener el orden en la zona.

Cabe precisar que las fanáticas han asegurado que algunas personas intentaron colocar a otras que no respetaron la fila, lo que aumentó las tensiones. Este tipo de incidentes refleja la pasión y el fervor que despierta Shakira entre sus seguidores, pero también la falta de organización en algunos casos. Las autoridades han tenido que intervenir para evitar que los altercados escalen y garantizar la seguridad de quienes esperan pacientemente para ingresar al concierto.

A pesar de los conflictos, las seguidoras de Shakira han demostrado una gran dedicación, acampando durante días para estar lo más cerca posible de su ídola. Este nivel de compromiso es un testimonio del impacto que la cantante colombiana tiene en su público, que no duda en hacer grandes esfuerzos para vivir una experiencia única. Sin embargo, los incidentes también han puesto en evidencia la necesidad de una mejor organización y coordinación para evitar situaciones de caos.

Mientras tanto, Shakira se prepara para ofrecer dos noches inolvidables en el Estadio Nacional, donde espera reencontrarse con sus fanáticos después de 14 años. A pesar de los problemas en los exteriores, el entusiasmo por su regreso sigue intacto, y miles de personas esperan con ansias disfrutar de un espectáculo lleno de música, baile y emociones. Las autoridades y los organizadores del evento trabajan para garantizar que todo transcurra de manera segura y ordenada, tanto dentro como fuera del recinto.

Nayomy, una fanática peruana de Shakira, decidió demostrar su devoción por la cantante colombiana de una manera poco convencional: cambiándose legalmente su segundo nombre, Roxana, por Shakira. Este proceso, que inició en 2008 cuando tenía 19 años, resultó ser más complicado de lo que esperaba. Para lograrlo, tuvo que emprender un juicio en el que demandó a la Municipalidad de Lima y a sus propios padres, con el fin de que el cambio fuera completamente legal. “Creí que era algo sencillo y un día, estaba conversando con los chicos y me dicen sí, hazlo. Me animaron”, relató Nayomy, quien es presidenta de un club de fans de la artista.

El proceso legal no fue fácil, pero Nayomy persistió hasta lograr su objetivo. Su dedicación y pasión por Shakira la llevaron a tomar una decisión que pocos fanáticos considerarían. Este acto extremo de admiración no solo refleja su fanatismo, sino también el impacto que la cantante ha tenido en la vida de sus seguidores más devotos. Nayomy se convirtió en un ejemplo de cómo el amor por un ídolo puede inspirar acciones inusuales y significativas.

En 2020, Nayomy tuvo la oportunidad de conversar con Shakira a través de un enlace por Zoom, momento que describió como inolvidable. Durante la conversación, la cantante quedó impactada al conocer la historia de su fanática y le prometió que nunca la olvidaría. Este encuentro virtual fue un sueño hecho realidad para Nayomy, quien además relató que, cuando fue a recibir a Shakira en el aeropuerto Jorge Chávez, la artista la reconoció y la abrazó, consolidando aún más su conexión.