
Existe una creencia extendida sobre que los humanos adoran a los perros con ojos marrones de mirada húmeda y demandantes de cariño, mientras que sus primos salvajes, los lobos, suelen tener penetrantes ojos claros o amarillos y despiertan temor entre las personas. Ahora, según un nuevo estudio, esta preferencia por tintes para los ojos de los animales de compañía puede tener sus raíces en nuestra historia evolutiva compartida.
Los lobos evolucionaron hasta convertirse en cachorros amigables con el tiempo, dejando sus costumbres salvajes para acurrucarse en el sofá. Este cambio resultó en modificaciones en la apariencia, incluidos cambios en el color de los ojos.
Los brillantes ojos amarillos de los lobos, que alguna vez fueron necesarios para cazar con poca luz, se volvieron menos importantes para los perros domesticados. Según el estudio, publicado en Royal Society Open Science, la preferencia humana por los ojos de cachorro podría haber influido involuntariamente en la evolución canina.

Científicos del comportamiento de la Universidad de Ciencias de Teikyo, en Japón, llevaron a cabo un estudio para investigar la razón detrás de este fenómeno evolutivo.
Modificaron fotografías de perros que representaban 33 razas diferentes, desde corgis hasta perros lobo irlandeses, para aclarar u oscurecer los ojos. A continuación, mostraron las imágenes editadas a un grupo de 142 voluntarios japoneses, la mayoría de los cuales eran estudiantes. Los participantes tuvieron la tarea de calificar a cada perro según diversas características, como amabilidad, agresión, madurez e inteligencia.
Peligro y color
Según los hallazgos, los voluntarios percibieron a los perros con ojos oscuros como sociables y no agresivos, dándoles índices de inteligencia y madurez más bajos, al tiempo que los asociaban con características propias de los cachorros.
Los especialistas especularon que los iris más claros tienen alguna ventaja evolutiva para los lobos, pero la domesticación ha relajado esta presión selectiva y han surgido ojos más oscuros en algunos perros primitivos.

Los científicos consideraron que un iris más oscuro hace que sea más difícil distinguir el tamaño de la pupila y, por tanto, da la ilusión de una pupila grande, lo que se asocia con la percepción humana de ser más parecidos a un bebé. “En general, los perros con ojos oscuros podrían haber desarrollado este rasgo en gran medida como un medio para enviar señales de mirada no amenazantes a los humanos”, escribieron los autores del documento.
Los especialistas creen que los humanos prefieren los ojos oscuros porque hacen que las pupilas de los perros parezcan más grandes. Los bebés humanos tienen pupilas más grandes que los adultos y cuando están dilatadas se asocian con una sensación de amigabilidad.
Aun así, el próximo paso sería analizar si el fenómeno se aplica a más de las aproximadamente 350 razas de perros oficiales que existen. También debería comprobarse si los perros de ojos oscuros son adoptados más rápidamente que los de ojos azules o ámbar.

Hay excepciones notables que requieren más profundidad en las pruebas, por ejemplo, los ojos azules penetrantes son comunes entre los perros esquimales siberianos y algunas otras razas. Aquellos podrían estar más estrechamente relacionados con los lobos que otras razas, al menos en términos de su anatomía visual y comunicación.
La evidencia de que las personas seleccionaron los ojos oscuros es convincente, pero no está claro si los perros fueron originalmente domesticados de esa manera o si es un fenómeno más reciente.
Es posible que los perros adquirieran sus ojos oscuros en los últimos cientos de años cuando los criadores se ajustaron a los estándares de la raza. Determinar el momento preciso requerirá más investigación.
* Akitsugu Konno es científico del comportamiento de la Universidad de Ciencias de Teikyo, Japón
Últimas Noticias
Las señales que muestran que un gato está estresado y cómo ayudarlos en casa
La eliminación inadecuada, el sueño interrumpido y la tensión entre felinos domésticos suelen tener origen en estímulos cotidianos, emociones o carencias del entorno. En Data Animal, Nai Osepyan describió por qué surgen estas conductas y cómo intervenir

La convivencia con perros en la adolescencia transforma la microbiota y favorece el bienestar mental
Un equipo de investigadores de Japón identificó que los adolescentes desarrollan una microbiota única, experimentan mayor bienestar emocional y registran menos dificultades de conducta. Los detalles publicados en un estudio de iScience

Golpe de calor en perros y gatos: cómo prevenirlo con temperaturas de 35° en gran parte del país
Ante marcas térmicas extremas en varias localidades de Argentina, cuáles son los síntomas y señales de alarma para proteger a los animales domésticos

Cómo expertos argentinos aplican la acupuntura en animales y qué beneficios tiene
Profesionales de la Universidad de Buenos Aires combinan técnicas para mejorar la calidad de vida de perros y gatos, especialmente en el tratamiento del dolor crónico

Convivir con un perro en la adolescencia se asocia con mejor salud física y mental
Investigadores de Japón descubrieron que los chicos que comparten la vida cotidiana con esos animales presentan una microbiota única, son más felices y muestran menos problemas de conducta



