Cuáles son las propiedades curativas de la manzana hervida

La cocción de esta fruta genera ventajas digestivas y permite aprovechar antioxidantes y fibra

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Aunque algunas de sus vitaminas
Aunque algunas de sus vitaminas disminuyen con el calor, la cocción genera ventajas digestivas y permite aprovechar antioxidantes y fibra bajo una forma bien tolerada por distintos grupos etarios. (Imagen ilustrativa Infobae)

La manzana es una de las frutas más consumidas y se ha integrado a lo largo del tiempo en diversas preparaciones culinarias. Una de sus formas menos exploradas, pero que cada vez gana más adeptos, es la manzana hervida. Al someter la fruta a cocción en agua, se modifican algunos de sus componentes, lo que ofrece propiedades particulares a la hora de ser consumida.

Esta fruta, ya sea cruda o cocida, destaca por su bajo aporte calórico y su riqueza en fibra. Contiene vitaminas como la C y algunas del complejo B, además de minerales como el potasio y el fósforo. Su composición incluye pectina, un tipo de fibra soluble que ayuda en diversos procesos digestivos.

Cuando se hierve la fruta, parte de la vitamina C se pierde debido al calor, ya que se trata de una vitamina sensible a la temperatura. Sin embargo, la cocción potencia la biodisponibilidad de ciertos compuestos, como los polifenoles, que son antioxidantes naturales.

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El índice glucémico de la manzana cocida se mantiene bajo, lo que ayuda a evitar picos de azúcar en sangre. (Imagen ilustrativa Infobae)

Facilita el proceso de digestión

Uno de los beneficios más reconocidos de la manzana hervida radica en su facilidad para ser digerida. Al cocinarla, la pulpa se ablanda y la fibra se torna más soluble, lo que facilita su descomposición en el tracto digestivo. Por esto, la manzana hervida suele recomendarse a personas con problemas digestivos, como gastritis, úlceras o colitis.

En ámbitos hospitalarios y en la alimentación de personas convalecientes, la manzana cocida se utiliza frecuentemente como parte de dietas blandas. Su textura suave reduce la irritación del estómago y protege las paredes del tracto digestivo.

Alivio en casos de gastroenteritis

Los médicos suelen indicar la manzana hervida en casos de gastroenteritis o diarrea. El proceso de cocción mata patógenos superficiales y transforma la fibra en una sustancia más tolerable para el intestino. Además, la pectina de la manzana cocida actúa favoreciendo la absorción de agua en el intestino grueso, lo que ayuda a disminuir la frecuencia de deposiciones líquidas y contribuye a la recuperación en cuadros de deshidratación leve.

Los médicos suelen indicar la
Los médicos suelen indicar la manzana hervida en casos de gastroenteritis o diarrea. (DiarioSalud)

Aporte en la infancia y la tercera edad

La manzana hervida es una opción frecuente como primer alimento sólido para bebés que empiezan la alimentación complementaria. El bajo riesgo de provocar alergias, junto con su textura suave, la convierten en una elección segura. Para los adultos mayores, especialmente aquellos con dificultades de masticación o problemas dentales, esta preparación facilita la ingesta protegiendo la salud bucal.

Efectos antioxidantes

Si bien hervir la manzana reduce la presencia de vitamina C, la cocción puede aumentar la disponibilidad de polifenoles y flavonoides. Estos compuestos son esenciales para contrarrestar el daño oxidativo en las células, lo que se relaciona con un menor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión o cáncer.

Control del apetito y la glucemia

Consumir manzana hervida genera una sensación de saciedad prolongada por el tipo de fibra soluble que contiene. Además, el índice glucémico de la manzana cocida se mantiene bajo, lo que ayuda a evitar picos de azúcar en sangre. Por esta razón, su inclusión en la dieta puede ser recomendable para personas con diabetes tipo 2 o en procesos de control de peso.

 Al cocinarla, la pulpa
Al cocinarla, la pulpa se ablanda y la fibra se torna más soluble, lo que facilita su descomposición en el tracto digestivo. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Preparación y consumo de la manzana hervida

Preparar manzana hervida resulta sencillo: basta con pelar la fruta (o dejar la piel, si se prefiere mayor contenido de fibra), cortarla en trozos y cocerla en agua durante diez o quince minutos. Puede añadirse una rama de canela para aportar sabor, evitando edulcorantes artificiales para conservar sus beneficios.

No se recomienda agregar azúcar, ya que esto puede contrarrestar los efectos positivos sobre la salud metabólica.