Rivalidad Amistosa, el K-drama de suspenso escolar que causó controversia internacional

Las series de drama escolar son un género popular dentro de las producciones televisivas de Corea del Sur, centrado en historias ambientadas en escuelas secundarias o preparatorias. Suelen abordar temas universales como la amistad, el amor adolescente, los conflictos familiares y las presiones académicas, combinados con elementos específicos de la sociedad coreana.

Estas series destacan por explorar las emociones y desafíos de los jóvenes en una etapa formativa de su vida como la competitividad educativa y las jerarquías sociales, lo que las hace atractivas tanto para el público juvenil como adulto y que cada vez tienen más público a nivel internacional gracias al aumento en popularidad de los K-dramas.

Sin embargo, el 10 de febrero de 2025 estrenó la serie “Rivalidad Amistosa” basada en un Webtoon del mismo nombre, la cuál ha capturado la atención global por su narrativa intensa, personajes complejos y exploración de temas como la competencia académica, las dinámicas de poder y las relaciones interpersonales en un entorno escolar de élite.

La trama de Rivalidad Amistosa

La serie se desarrolla en la prestigiosa escuela secundaria femenina Chaehwa, una institución de élite en Seúl que reúne al 1% de las mejores estudiantes de Corea del Sur. La historia sigue a Woo Seul-gi (interpretada por Chung Su-bin), una joven brillante pero reservada que creció en un orfanato en una provincia.

Tras descubrir que su padre podría estar en Seúl, se transfiere a Chaehwa, donde enfrenta una competencia feroz. Allí conoce a Yoo Je-yi (Lee Hye-ri), la estudiante más destacada, adinerada y popular de la escuela, quien es consciente de su superioridad y sabe cómo aprovecharla.

Je-yi muestra un interés especial en Seul-gi, iniciando una relación compleja que oscila entre la amistad, la rivalidad y una obsesión peligrosa, la cuál va evolucionando conforme a los conflictos que enfrentan con otros personajes dentro de su escuela. A medida que Seul-gi navega por este entorno competitivo, se ve envuelta en una red de secretos oscuros relacionados con la escuela, sus estudiantes y la misteriosa muerte de su padre.

La serie explora cómo las ambiciones personales, las presiones académicas y las dinámicas de poder afectan a las protagonistas, mientras desentrañan verdades que desafían los límites de su relación. La trama combina suspenso psicológico con elementos de drama escolar y un trasfondo romántico GL, lo que la distingue de otros K-dramas tradicionales.

La serie fue producida para U+ Mobile TV, una plataforma de streaming surcoreana, pero su popularidad la llevó a plataformas internacionales como Netflix, Viki y Apple TV, donde se transmiten sus 16 episodios de aproximadamente 30 minutos de duración.

La polémica de “Queerbating” en la serie

Rivalidad amistosa generó debate por su representación de la relación GL. Mientras algunos fans defendieron que los momentos románticos entre Je-yi y Seul-gi confirman la narrativa GL, otros la acusaron de “queerbaiting” debido a la falta de escenas explícitamente románticas, atribuida a la homofobia persistente en su país de origen.

Luego de que terminara la serie algunos usuarios en foros de internet mencionaron que aunque hay “escenas adorables” que sugieren amor, las limitaciones culturales impidieron una representación más audaz.

El queerbaiting es una práctica en la que productos culturales, como series, películas o libros, sugieren sutilmente relaciones románticas o personajes con orientación sexual diversa sin llegar a desarrollarlos plenamente. Se trata de una herramienta utilizada para captar el interés del público LGBTQ+ o de quienes apoyan estas representaciones, generando expectación alrededor de posibles tramas queer que finalmente no se concretan.

En el cine y la televisión, el queerbaiting puede manifestarse a través de diálogos, miradas ambiguas o dinámicas entre personajes que dan pie a interpretaciones sobre su orientación sexual o identidad de género. Sin embargo, estas insinuaciones suelen quedarse en el plano subtextual, evitando cualquier representación explícita.