La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) determinó que México es responsable de desaparición forzada en contra de Antonio González Méndez, un hombre que pertenecía al pueblo indígena de Cho’l y era originario de la comunidad de El Calvario, en Chiapas.
El órgano judicial autónomo compartió la determinación sobre el caso ocurrido en enero de 1999, en un contexto en el que fue registrada violencia tras la creación de grupos paramilitares que contaban con el apoyo del Estado y que buscaban neutralizar las actividades del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), grupo al que pertenecía González Méndez.
“La Corte Interamericana de Derechos Humanos declaró a los Estados Unidos Mexicanos responsable internacionalmente por la desaparición forzada cometida en perjuicio de Antonio González Méndez, así como por otras violaciones a derechos humanos en su perjuicio y de sus familiares”, es parte de lo informado por la CIDH el jueves 12 de diciembre.
La última vez que Antonio González fue visto estaba en una zona en la que operaba el grupo paramilitar denominado “Paz y Justicia” y algunos señalamientos indican que la última persona que tuvo contacto con la víctima formaba parte de dicho grupo.
Y es que de acuerdo con las averiguaciones de la CIDH tanto la esposa, Zonia López Juárez, así como sus hijas Ana González López, Magdalena González López, Elma Talía González López y su hijo, Gerardo González López, fueron víctimas de violaciones a sus derechos humanos.
México no realizó una investigación adecuada y en un plazo razonable de la desaparición del hombre que formaba parte de las bases civiles de apoyo del EZLN. De manera específica, la CIDH detalló que México vulneró los derechos de reconocimiento de la personalidad jurídica, a la vida, a la integridad personal, a la libertad personal y a la libertad de asociación de Antonio González.
De igual manera, señala que México quebrantó las leyes sobre derechos a garantías judiciales y a la protección judicial, en detrimento de González Méndez y sus familiares, identificados en acuerdos internacionales.
Debido a lo anterior, la Corte Interamericana ordenó a México continuar con las investigaciones, acciones de búsqueda, así como un programa permanente de formación para agentes de Chiapas.
Una “sentencia histórica”
Por su parte, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, calificó los hechos como una “sentencia histórica” y detalló que González Méndez fue identificado como un objetivo del Ejército debido a sus actividades paramilitares y liderazgo social.
De igual manera, el organismo de Derechos Humanos asegura que si bien la sentencia reciente es un avance, no es el final del proceso de justicia pues las fuerza militares todavía deben acatar la sentencia y debe ser conocido el paradero de Antonio González
“Es un día histórico, sin precedentes en México, resultado de la determinación y valentía de la familia de Antonio”, se puede leer en el posicionamiento.