Cuatro consejos para mantener el pelaje blanco de tu perro limpio y brillante

Algunos ingredientes caseros y hábitos sencillos pueden marcar la diferencia en la apariencia de tu mascota

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Con algunos cuidados sencillos y
Con algunos cuidados sencillos y productos adecuados, es posible mantener la apariencia radiante de tu mascota sin complicaciones. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Aunque todos los perros tienen su propio encanto, las razas de color blanco poseen una belleza especial que resulta cautivadora gracias a su pelaje claro y brillante que les da un aspecto delicado, lo que ha contribuido a que muchos de ellos se encuentren entre los más apreciados y populares en distintos países, como el Samoyedo.

Pero además de su atractivo estético, estos ejemplares suelen caracterizarse por su carácter dulce y sociable. Son conocidos por ser cariñosos, dóciles y muy agradables en la convivencia diaria, cualidades que, sumadas a su ternura natural, los hace compañeros ideales para cualquier estilo de vida.

No obstante, mantener ese pelaje impecable no es tarea sencilla. Basta con descuidar un poco su higiene para que pierda brillo, se vea amarillento o aparente suciedad, aun cuando el perro esté en óptimas condiciones. Por eso, cuidar el pelo blanco de tu mascota requiere constancia, productos adecuados y algunos hábitos que detallamos a continuación.

¿Cómo bañar a un perro de pelo blanco?

Una rutina constante ayuda a
Una rutina constante ayuda a prevenir manchas y a conservar la suavidad natural del manto.

De acuerdo con el portal especializado Experto Animal, uno de los errores más comunes es pensar que, por ser blanco, el perro debe bañarse con mayor frecuencia. Nada más lejos de la realidad. La recomendación general es bañarlo una vez al mes. Aumentar la frecuencia puede dañar la piel, provocar sequedad, irritaciones e incluso empeorar el aspecto del pelaje a largo plazo.

Durante el baño es fundamental utilizar un champú blanqueador, normalmente de tono azul o violeta, diseñado para neutralizar tonos amarillentos, eliminar manchas y realzar el brillo natural del pelaje blanco.

El proceso ideal incluye empapar bien al ejemplar con agua, aplicar el champú por toda la espalda, frotar cuidadosamente el pelo y dejarlo actuar unos minutos. Luego, se debe enjuagar a fondo para evitar residuos y aplicar un acondicionador de buena calidad que ayudará a prevenir la porosidad y la tinción del pelaje.

Entre cada baño, puedes mantener la higiene usando toallitas húmedas para bebé, ya que son suaves y no dañan la piel. También es posible aplicar champú en seco una vez al día, especialmente en zonas como patas y barba, donde la suciedad se acumula con mayor facilidad.

La importancia del cepillado diario

El almidón de maíz y
El almidón de maíz y el bicarbonato de sodio son elementos naturales que puedes utilizar.

Este te punto es uno de los pilares fundamentales para conservar el pelo blanco en buen estado. Cepillar a tu compañero canino todos los días ayuda a aflojar residuos, eliminar polvo y evitar que la suciedad se incruste y genere manchas permanentes. El tipo de cepillo dependerá del largo del manto: para ejemplares de pelo corto se recomiendan cerdas más gruesas y firmes, mientras que para pelaje largo son mejores las cerdas suaves y lisas.

Pero además del cepillado tradicional, existen soluciones naturales muy efectivas, como el almidón de maíz. De acuerdo con Experto Animal, es un excelente aliado, pues absorbe el exceso de grasa, neutraliza olores, cubre manchas leves y actúa como blanqueador natural. Basta con espolvorearlo sobre el pelaje, frotar suavemente con los dedos y luego cepillar.

Utiliza bicarbonato de sodio

El uso de ingredientes naturales
El uso de ingredientes naturales puede ser la solución para combatir manchas y olores sin dañar la piel.

Este ingrediente es particularmente útil para pelajes que tienden a verse grises o manchados. Funciona como una lejía natural que no daña la piel del perro. Puede añadirse al agua del baño o mezclarse con un poco de líquido hasta formar una pasta, la cual se aplica directamente sobre las manchas, se cepilla suavemente con un cepillo de dientes viejo de cerdas blandas y se deja secar unos minutos antes de enjuagar bien.

Presta atención a las zonas problemáticas

Las zonas como la barba,
Las zonas como la barba, los lagrimales y la zona genital requieren atención especial.

Algunas áreas del cuerpo del perro se oxidan con mayor facilidad; entre ellas, la barba, los lagrimales y la zona genital requieren cuidados específicos y constantes.

Los ojos deben limpiarse a diario con líquidos especiales para evitar la oxidación.

Tras cada paseo, es importante limpiar la zona genital con toallitas para bebé, y si el pelo es largo, recogerlo para evitar que se ensucie.

En cuanto a la barba, conviene secarla después de beber agua y lavarla tras cada comida, ya que el contacto constante con humedad y alimentos favorece las manchas.

Poner en práctica todos estos consejos permitirá que el pelo blanco de tu perro luzca limpio, brillante y saludable. Con dedicación, tu mascota no solo se verá espectacular, sino que también disfrutará de una piel sana y protegida.