Silvia, una perrita color miel con café y negro fue rescatada por un refugio de México tras varios días de espera un día fue finalmente adoptada con la esperanza de haber encontrado un hogar lleno de amor.
Sin embargo, esto no duró mucho, pues fue devuelta al refugio unos días después. Este regreso inesperado no solo llenó de tristeza a quienes la cuidaban y a las personas que se enteraron del caso, sino que también sirvió como un recordatorio de los desafíos que enfrentan muchos animales en busca de una familia definitiva.
Hoy Silvia sigue en busca de una familia que le brinde un hogar definitivo y el cuidado y cariño incondicional que necesita.
La historia de Silvia
El pasado 3 de diciembre la cuenta de Instagram de Adopta un ángel mascota compartió la historia de Silvia, una mezcla de Husky que fue devuelta al refugio tras ser adoptada días antes.
Esta organización está integrada por rescatistas independientes que buscan difundir las historias de animales rescatados para promover su adopción.
La razón por la que devolvieron a Silvia es que la mujer que decidió adoptarla se dio cuenta de que aún no había podido superar el luto por su anterior mascota, quien había muerto tiempo atrás.
“El haber adoptado a esta pequeña le removió cosas y está en shock, esa es la respuesta de la adoptante”, menciona el post de Instagram del refugio. Además mencionó que Silvia es una perrita juguetona de tres meses, su raza es mix husky. Será de talla grande y se encuentra vacunada y esterilizada.
Muchos de los usuarios que siguen esta cuenta mostraron su inconformidad frente a esta situación, pues muchos consideran que una persona no debe darle falsas esperanzas a un perro que está buscando un hogar.
Para otros, el acto de devolver a un perro después de adoptarlo es más que un simple malentendido; es una falta de compromiso y una profunda insensibilidad hacia el bienestar emocional del animal.
“Ninguno va a sustituir a tu perrito anterior. Cada uno es diferente, pero se gana tu corazón”, escribió un usuario. Otros se unieron al sentir, señalando que “la adopción es un compromiso para toda la vida, no hay devolución”, recordando que no se trata de un objeto que se puede regresar si no cumple con las expectativas.
Algunas personas también comentaron que esto podría suceder cuando una persona trata de llenar un vacío emocional al intentar reemplazar a una mascota perdida, cuando cada animal tiene una personalidad y conexión única. “Eso pasa cuando tratan de sustituir un perro por otro, espero encuentre una verdadera familia”.
Otras personas comentaron que es importante que la organización modifique los procesos de adopción para que los animales no tengan que pasar por estas situaciones que pueden resultar tristes y desconcertantes.
¿Cómo adoptar a Silvia?
Para hacer de esta perrita el nuevo miembro de tu familia debes vivir en Ciudad de México o Área Metropolitana, además de completar un formulario con datos personales y preguntas cuyo fin es encontrar al candidato ideal para la mascota.
Si una persona no puede adoptarlo es importante que comparta su historia, pues esto multiplica las posibilidades de que la historia de la perrita llegue a la persona correcta.
En México, cerca de 29.7 millones de perros y gatos viven en situación de calle, una cifra alarmante que podría aumentar con los 500 mil casos de abandono que se registran anualmente, según estimaciones del Congreso de la Ciudad de México.
“El abandono es una experiencia traumática que afecta profundamente su salud física y emocional, además de deteriorar su confianza en los seres humanos”, señala el artículo, destacando la necesidad de tomar medidas urgentes para reducir esta crisis.
Adoptar, ya sea de manera definitiva o temporal, es una de las formas más efectivas de contribuir a la solución. Al brindar un hogar, se ofrece a estos animales una segunda oportunidad llena de seguridad, cuidado y cariño, permitiéndoles llevar una vida digna y tranquila.