Ovie, el gato que viajó en un crucero internacional y se salvó de la eutanasia

Ovie es un gato de pelaje atigrado gris oscuro que recibió una sonrisa del destino después de haber sido subido de contrabando en un crucero internacional y salvarse de la eutanasia. El felino fue encontrado a mediados de noviembre a bordo del Ovation of the Seas de Royal Caribbean y recientemente fue adoptado por una familia.

El director ejecutivo del crucero internacional, Michael Bayley, compartió en un post de Facebook que el animal fue introducido a la embarcación saltándose todos los lineamientos de seguridad del lugar, pues en el reglamento se establece que está estrictamente prohibido la presencia de animales en el barco.

“Creemos que estaba en la sudadera de un invitado y suponemos que lo subieron sedado o algo por el estilo”, escribió el director ejecutivo de Royal Caribbean International junto con una foto del animal a bordo del crucero.

El gato llamó la atención de los trabajadores del crucero quienes de inmediato se comunicaron con las autoridades de Nueva Zelanda para iniciar los protocolos de bioseguridad. De acuerdo con información de la revista People, los empleados hicieron los trabajos necesarios para ver si el animal podía ser legalmente transportado al país.

“Royal Caribbean trabajó con las autoridades locales y el huésped para ver si el gato podía entrar legalmente. Desafortunadamente, esto no fue posible debido a las regulaciones federales”, escribió la administración del crucero internacional en un comunicado al cual tuvo acceso la revista estadounidense.

El gato no pudo desembarcar en Australia, ni Nueva Zelanda por las leyes de dichos países e iba a enfrentar la eutanasia por disposiciones oficiales, sin embargo, la administración de Royal Caribbean hizo todo lo necesario para salvaguardar la vida del animal.

El felino fue sometido a los protocolos de cuarentena de Nueva Zelanda y una vez que terminó este período fue trasladado en avión de regreso a Estados Unido donde encontró una familia que le abrió las puertas de su casa en Miami.

“Nuestro equipo de servicio al huésped dio un paso al frente y después de varias semanas y mucha ida y vuelta, llevó a Ovie al otro lado del mundo para ser adoptado por uno de los miembros del equipo de servicio. Ovie ahora vive felizmente en Miami”, escribió Michael Bayley en su post.

Expertos en bioseguridad fueron quienes descubrieron al felino a bordo del crucero, ellos tuvieron la tarea de indagar cómo el animal logró colarse a las instalaciones del barco y monitorear la salud de Ovie durante la cuarentena hasta que fue trasladado a Estados Unidos.

Bayley explicó en su publicación de Facebook que los únicos animales que se permite estar arriba del crucero son los que cuentan con el certificado de apoyo emocional o los perros de servicio.

Las autoridades del crucero internacional aún tienen la obligación de compartir con las autoridades de Nueva Zelanda el informe y los resultados de la investigación del misterio de Ovie. El huésped que subió al felino aún no ha sido identificado y los encargados de seguridad no han dado información sobre cómo el ejemplar pudo pasar los filtros de control.