Cómo es la “justicia divina” que Carrascosa imagina para María Marta García Belsunce

El viudo fue condenado y luego absuelto por el crimen de su esposa. Asegura que, aunque un tribunal sostuvo lo contrario, Nicolás Pachelo es el asesino. Conversó con Leamos-Bajalibros en la Feria del Libro.

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Carrascosa estuvo casi seis años en prisión por el crimen de su esposa. Luego fue absuelto. Pachelo también fue absuelto en diciembre de 2022. Foto: Nicolás Stulberg
Carrascosa estuvo casi seis años en prisión por el crimen de su esposa. Luego fue absuelto. Pachelo también fue absuelto en diciembre de 2022. Foto: Nicolás Stulberg

“Para mí lo que pasó fue que entraron a robar y María Marta, que era una mina de muchos cojones, lo debe haber enfrentado y además lo conoció. Vivíamos a cuatro casas de diferencia”. Carlos Carrascosa, viudo de María Marta García Belsunce, y condenado primero y absuelto después por ese crimen, conversó en el stand de Leamos-Bajalibros de la Feria del Libro con la periodista Laura Balonga.

“¿De quién estás hablando? ¿De Nicolás Pachelo?”, consultó ella. “Sí, sí, sí. Yo estoy convencido. Incluso luego de que lo absolvieran en diciembre. Estoy convencido: de hecho, cuando declaré en el juicio lo dije: ‘Esperé veintidós años para estar sentado acá, delante tuyo, del asesino de mi mujer’”, sumó Carrascosa. Llegó a la conversación con un libro bajo el brazo. Se trata de Diario de un Inocente. Un amor, una causa, una vida. La elaboración de ese libro fue parte central de la entrevista.

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“Fue inesperado escribir un libro, y a la vez, el primer motivo para hacerlo fue ocupar el tiempo en algo en la cárcel, porque ahí los tiempos son larguísimos. Entonces lo primero que se me ocurrió fue ponerme a escribir”, contó Carrascosa, que pasó casi seis años en prisión.

“No tenía ni computadora ni máquina de escribir, desde ya. Tenía papel y lápiz así que fue todo un trabajo para la familia. Yo escribía hojas y hojas y hojas, y todos los fines de semana se las daba a una prima mía que las iba pasando a máquina”, sumó.

No pensaba publicar el libro. “Era algo íntimo, como para mí. Por ahí pensaba una publicación chica para regalarles a mis amigos más íntimos, pero no se me ocurría salir a la calle. Era más bien una especie de terapia”, le contó Carrascosa a Balonga, que enseguida le preguntó a quién le hablaba en ese libro. “A mi mujer. Fundamentalmente a mi mujer”, respondió sin dudar. “Todo lo que he hecho hasta ahora, desde el libro hasta las causas, es todo un homenaje a mi señora, a María Marta”, dijo.

Nicolás Pachelo, señalado por Carrascosa como asesino de María Marta. Foto: Adrián Escandar
Nicolás Pachelo, señalado por Carrascosa como asesino de María Marta. Foto: Adrián Escandar

“No puedo creer: van veintidós años (desde el crimen) y todavía estamos ahí, sigue impune. Ahora está en Casación, y se puede dar vuelta la absolución, pero es una posibilidad en un millón. Y la única excepción que hubo dentro del millón fue cuando me lo dieron vuelta a mí. Yo salía absuelto y me lo dieron vuelta a culpable”, reflexionó Carrascosa.

- ¿Vos pensás que María Marta va a tener justicia?-consultó Balonga.

-Yo ya creo que la justicia que puede llegar a tener es divina, no otra. De alguna forma va a tener justicia.

-¿Y cómo sería esa justicia divina para vos?

-Y… No sé… Una especie de infierno para el asesino, no sé. Mi capacidad de imaginación no alcanza para describirlo. Tampoco le puede desear el mal a nadie porque no es humano, pero un castiguito le vendría bien.

María Marta y Carlos Carrascosa
María Marta y Carlos Carrascosa

“La cárcel fue un aprendizaje enorme para mí. Creo que el libro cuenta eso porque habla del lado bueno de los hombres malos y del lado malo de los hombres buenos”, describió Carrascosa. Consultado por Balonga sobre “un hombre bueno convertido en malo”, el viudo de María Marta García Belsunce no vaciló: “Ahí no dudo, no dudo. Molina Pico”, dijo, en relación al fiscal que investigó el crimen en primera instancia. Se permitió una última reflexión sobre el destino de la causa: “Uno siempre tiene la ilusión de que se haga justicia, pero los paso de la justicia son… Hay que tener buena suerte con el juez que toca”.

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