Juan Cyterszpiler, COO de Isurus: “Nuestro objetivo es ser una de las mejores empresas de esports en el mundo”

Hijo del famoso agente de futbolistas Jorge Cyterszpiler, Juan siguió el legado de su padre pero desde una de sus pasiones: los videojuegos. Fue en una Argentina Game Show donde conoció a Kala, fundador de Isurus, y el resto es historia.

¿En qué momento y por qué pasaste del fútbol a los esports?

En los esports arranqué a fines de 2017-2018 que comencé el Máster (en Gestión de Esports, en la Universidad Internacional de Valencia) . Si bien ya venía teniendo interés y un proyecto que tenía armado con mi papá antes de que él falleciera. Todo el proyecto que tenía se derrumbó y cuando yo creía que podía, que iba a poder hacerlo y seguir ese sueño, por varias injusticias y accionares, que nunca entenderé por qué se dieron, me quedé sin nada y tuve que reinventarme. A partir de eso tuve la experiencia de poder trabajar en un evento y conocerlo a Kala.

¿Cómo entraste a Isurus? ¿Por qué esa organización y no otra?

Yo empecé a trabajar en Argentina Game Show. Uno de los dueños, que es Fede Sánchez, estuvo al lado de mi papá muchos años. Todo lo que es evento lo han trabajado juntos y siempre, en todos los eventos que Fede hacía yo estaba al lado y lo acompañaba. Siempre me interesó todo eso. Tenía un proyecto mío en la cabeza de lo que quería hacer en los esports, pero todavía estaba saliendo de esa situación muy caótica que viví después de la muerte de mi viejo y recién estaba empezando a probar. Ahí conocí a varios equipos, algunos quisieron sentarse conmigo a hablar. Yo estaba cuidando el VIP de los jugadores, me encargaba del armado y desarmado, de coordinar toda esa parte, la cual me delegaron. Ahí intercambié números, pero yo en ese momento no creí que me iban a hablar, tenía la cabeza metida en el evento, mi primera experiencia. Por casualidades de la vida, Fede me presenta a Gastón, que es un amigo y gran socio en varias cosas de Kala. Yo conocía a Isurus, pero el primer contacto cercano que tuve fue en el evento de 2017 de DirecTV Arena. Gastón me presentó a Kala, me senté con él, hablamos, intercambiamos teléfonos pero yo nunca le mandé un mensaje, todo esto fue en octubre. A fines de noviembre recibí un mensaje de Kala donde me preguntó si estaba viendo a Isurus. Fue medio gracioso porque yo estaba durmiendo la siesta y prendí rápido la tele para buscar a Isurus, pero hasta él se dio cuenta. Había otros equipos que querían que yo entre a armar el proyecto, yo fui sincero porque el primero que me habló fue Kala y me mantuve con eso.

¿Cuál era tu visión del escenario de los esports cuando entraste y cuál es ahora?

La visión que tenía en su momento creo que es bastante parecida a la que poseo ahora, la diferencia es que hay más repercusión y conocimiento a partir de la pandemia y de éxitos que hemos tenido, principalmente en 2019. También pasaron varias cosas en ese momento, lo de K1nG en el mundial, otro chico en Magic (Matías Leveratto) y en Hearthstone (PNC en las finales globales de GrandMasters). Sigo pensando que faltan muchas cosas por desarrollar, pero cada día se está dando un paso adelante para que la región siga creciendo.

En 2019 también fundaron Isurus Studio, del cual sos dueño, ¿Cómo surgió la idea? ¿Qué tan necesario es que haya agencias así en los esports?

La idea surgió porque sentía que cuando entré a Isurus era más que un equipo. Todo el background, el value que tiene. Sería injusto que se defina como un equipo de esports, porque Isurus ha sido pionero en la escena, ha aportado grandes elementos para que se llegue a hoy. No solo fue armar un equipo. Fue asesorar, acompañar, realizar desde torneos hasta trabajar con marcas, streamers, distintos agentes, a moldear la escena desde su lado. Sentía que era necesario volcar todos esos años de experiencia en una escena que en parte llegó a donde llegó gracias a Isurus. Si bien el equipo es muy valorado por sus resultados deportivos, el prestigio, la calidad de trabajo, el asesoramiento merecía estar volcado en alguna otra unidad de negocio que es Isurus Studio. Con Kala tuve muchas coincidencias porque yo siempre quise tener mi agencia de comunicación principalmente, además de poder, en algún momento si seguía con mi viejo, que sea de representación, como también de producción y poder hacer eventos, películas, lo que sea. Cuando era chico, siempre soñé con ser director de cine, soy muy fan de George Lucas, Tim Burton, Steven Spielberg, por eso primero empecé a estudiar producción de televisión y cine, después quise estudiar dirección de cine pero decidí ir por el camino de la abogacía. Siempre tuve ganas de producir cosas desde la parte creativa, poder crear cosas desde lo audiovisual, lo comunicacional. En la reestructuración de Isurus tenemos muchas unidades de negocios que ejecutamos y nos faltan, es un proceso que nos lleva entre cinco y diez años y recién vamos por el tercero. La idea surgió ahí y, sumado a que las personas que están en Isurus Studio tenían la misma visión.

¿Cuál es tu filosofía de trabajo en Isurus?

La filosofía de Isurus va alineada con sus valores, el compromiso, la lealtad y la competitividad. Y mi filosofía de trabajo es simple: aplicar el profesionalismo, la empatía, el liderazgo y la constancia con hechos. Siempre siendo transparente y manteniendo una ética de trabajo y de valor que, por más situación extrema que haya, uno la tiene que tener, porque el mediano y largo plazo son los que triunfan siempre. Lo incorporé de mi familia, de mi viejo, y de ser una persona pragmática y con hechos. La filosofía es simple: nadie es perfecto, pero si uno quiere lograr la grandeza, el éxito y el prestigio, hay muchas cosas que hay que sacrificar y hacer para llegar a ese camino. Posiblemente en el corto plazo no se vean, pero siempre hay que tener la cabeza y la tranquilidad que me lo dio la vida a mi, y saber que se hace con hechos. También es “acá nadie es más que nadie”, somos todos uno y trabajamos por ese gran sueño que es que Isurus sea ese gran símbolo para la gente. Nadie es imprescindible, ni yo lo soy, y cada uno tiene que entender, que si uno se cree más imprescindible que el proyecto en sí, no puede estar acá.

¿Cómo son los planes de expansión de Isurus? ¿Qué objetivos tienen a mediano y largo plazo?

Los planes de expansión son muy progresivos, Kala viene haciendo desde que arrancó en Argentina, pasó a Chile, a Brasil y a México, algunos por seguir a la liga en la que competíamos, y otros porque eran necesarias para expandirnos en los juegos donde estábamos, como en el CS:GO. La visión de él siempre fue ir por todo y que Isurus pueda estar en el mundo, y yo de mi lado fue armar un plan de reestructuración para que esa expansión vaya por etapas. Ya estamos en Estados Unidos, con varias cosas para ejecutar ahí, después, lamentablemente se demoró por la pandemia, nuestra ida a Europa y también poder hacer una expansión el día de mañana a otros continentes. Eso lleva mucho tiempo y vamos por etapas. Si no fuera por la pandemia, esto habría sido mucho más rápido. Pero el 2022 se viene con nuevos horizontes, para que entre 2022 y 2025 Isurus pueda estar bien posicionada en el mundo. Isurus cumplió 10 años y concluyó una etapa, ahora va por una nueva para reinventarse como el ave fénix. Se cambió la visión y hay que adaptarse, hay que estar en constante evolución. Isurus es un equipo que hoy depende 100% de sponsors, y con eso ha hecho una autosustentabilidad, cosa que muy pocos equipos pueden lograr y es un caso de éxito. En este 2021 los resultados deportivos no fueron los esperados, pero la parte comercial fue un éxito, y esperemos que los pasos que vamos dando de a poco podamos empezar a estar en un terreno más sólido. Nuestro objetivo es ser una de las mejores empresas de esports del mundo, que Isurus pueda ser un lugar de prestigio y profesionalismo. Estoy tranquilo que en lo deportivo vamos a volver a brillar porque siempre Isurus ha pasado por etapas de reconstrucción y ha vuelto a ganar. Con todo el trabajo que estamos metiendo, no importa si nos lleva 10, 20 ó 30 años, lo importante es el proceso, con constancia, más allá de los picos de éxito.