Así subirán las pensiones en 2026: calcula cuánto aumentará la tuya

Se elevarán en torno al 2,6%, pero el incremento definitivo se conocerá el 12 de diciembre, cuando el INE publique el dato final del IPC de noviembre

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Un pensionista  hace números.
Un pensionista hace números. (Adobe Stock)

Las pensiones contributivas —incluidas las de jubilación, incapacidad permanente y viudedad— aumentarán en torno a un 2,6% en 2026, según las estimaciones actuales del comportamiento del Índice de Precios de Consumo (IPC) entre diciembre de 2024 y octubre de 2025, y las previsiones de inflación para noviembre.

De confirmarse este porcentaje, sería la revalorización más baja desde 2022, cuando los precios se dispararon tras la crisis energética y las pensiones subieron un 8,5% en 2023, un 3,8% en 2024 y un 2,8% en 2025.

El incremento exacto se fijará una vez se conozca el dato definitivo del IPC de noviembre, que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicará el próximo 12 de diciembre de 2025. Mientras que el 28 de noviembre se adelantará una estimación provisional que permitirá afinar las previsiones.

Cómo se calcula la revalorización

Desde la reforma de 2021, la ley establece que las pensiones contributivas deben mantener su poder adquisitivo y revalorizarse automáticamente con la variación media del IPC de los doce meses previos al mes de diciembre anterior a la subida.

Esto significa que la subida de 2026 se determinará por el IPC medio interanual entre diciembre de 2024 y noviembre de 2025. De momento, los indicadores apuntan a una moderación de los precios: en agosto la inflación fue del 2,7%, en septiembre del 3%, y en octubre el dato adelantado situó la tasa en un 3,1%. Según Funcas, el crecimiento de los precios en noviembre será apenas del 0,1%, lo que situaría la media anual en torno al 2,6%.

Con esta revalorización, una pensión media de jubilación de 1.450 euros al mes subiría unos 37,7 euros mensuales, hasta situarse en aproximadamente 1.488 euros.

Las pensiones de jubilación en 2025 y su capacidad adquisitiva auguran un futuro sombrío para nuestros mayores.

La pensión máxima subirá un 2,7%

Además de la subida general vinculada al IPC, la pensión máxima del sistema de la Seguridad Social se incrementará ligeramente por encima de la media. Desde 2025, se aplica una fórmula específica que añade 0,115 puntos porcentuales adicionales al IPC para esta prestación.

Así, si se confirma la estimación del 2,6%, la pensión máxima aumentará un 2,715% en 2026. Esta regla se mantendrá vigente cada año hasta 2050, con el objetivo de acompasar el crecimiento de las pensiones más altas al conjunto del sistema.

En cuanto a las pensiones mínimas y no contributivas, así como el Ingreso Mínimo Vital (IMV), volverán a experimentar incrementos superiores al IPC. El Gobierno mantiene el compromiso de que estas prestaciones converjan progresivamente con los umbrales de pobreza definidos por la Unión Europea en 2027.

En el caso de las pensiones mínimas de jubilación, el aumento adicional se calculará para reducir en un 50% la brecha existente con el umbral de pobreza de un hogar formado por dos adultos. Así, por ejemplo, la pensión mínima de jubilación para un titular con cónyuge a cargo subirá algo más del 2,6% general, acercándose al nivel de renta considerado digno según los estándares europeos. Por su parte, las pensiones mínimas de viudedad seguirán su plan de equiparación progresiva con las de jubilación, un proceso que comenzó en 2024 y finalizará en 2027.

Más apoyo para las pensiones no contributivas y el IMV

Las pensiones no contributivas —tanto de jubilación como de invalidez— y el Ingreso Mínimo Vital continuarán con su senda de incremento progresivo que se extiende entre 2024 y 2027. Durante estos cuatro años, estas prestaciones aumentarán un 22% adicional al IPC acumulado, hasta alcanzar en 2027 el 75% del umbral de pobreza para un hogar unipersonal.

De este modo, en 2026 estos beneficiarios verán nuevamente una subida superior al 2,6%, en una estrategia orientada a reforzar la protección de los hogares con menores ingresos y reducir la desigualdad social.

Una subida moderada que mantiene el poder adquisitivo

La previsión de una subida del 2,6% en 2026 supone una normalización tras los años de inflación elevada que siguieron a la pandemia y a la crisis energética. Aunque el incremento será más contenido que en ejercicios anteriores, las pensiones seguirán ganando poder adquisitivo gracias al mecanismo automático de revalorización ligado al IPC.

En términos generales, el sistema de pensiones español mantiene la garantía de que ninguna pensión perderá valor real frente a la evolución de los precios, una medida que beneficia a más de 9,2 millones de pensionistas.