Video: el cruce del Darién, una selva inhóspita y peligrosa que miles de migrantes intentan atravesar día a día

Por sus características naturales y la presencia de grupos criminales armados, es considerada uno de los sitios más inseguros del mundo. Pero, a pesar de las violaciones, los maltratos y las muertes, miles de migrantes intentan atravesarla día a día, con el objetivo de llegar a EE. UU. y conseguir una mejor calidad de vida. ¿Cuáles son los secretos más oscuros que esconde esta “ruta de la muerte”?

Guardar

Ubicada en la frontera entre Panamá y Colombia, y con una extensión de poco más de 570.000 hectáreas, la selva del Darién es una de las zonas más calientes del planeta. En este lugar, las vías terrestres no están abiertas, un factor clave que hace que atravesar su geografía sea extremadamente difícil, dado que, además, las lluvias frecuentes convierten el suelo en un terreno pantanoso.

Eso que no se ve

Ciudadanos de Venezuela, Ecuador y Haití, entre otros países, atraviesan esta ruta salvaje, que, además de jaguares, serpientes y alacranes, cuenta con la presencia de diferentes tipos de criminales, como carteles y organizaciones dedicadas a las redes de tráfico de personas.

Los testimonios de quienes atraviesan esta jungla son desgarradores. Golpizas, picaduras mortales de insectos, violaciones y hasta asesinatos son algunas de las situaciones de las que deben ser testigos quienes se atreven a recorrer el supuesto camino hacia un futuro mejor.

Entre el 10 y el 15 por ciento de los migrantes que atraviesan el Tapón del Darién sufre violencia sexual en ese recorrido, según la Cruz Roja de Panamá. Por su parte, la organización Médicos Sin Fronteras ha documentado hasta 400 casos de abusos sexuales contra migrantes en el Darién desde abril de 2021.

Ubicada entre Panamá y Colombia
Ubicada entre Panamá y Colombia y con una extensión de poco más que 570.000 hectáreas la selva del Darién es una de las zonas más calientes del planeta (EFE)

Los “dueños” de la selva

El negocio del tráfico de migrantes a través del Darién factura semanalmente cerca de un millón de dólares, según informes de Interpol y de la Policía Nacional de Colombia.

Para atravesar a pie el terreno, las personas suelen contratar los servicios de guías locales que se promocionan como conocedores de las rutas y que prometen cierta protección durante el cruce.

Los costos de sus servicios rondan entre los USD 70 y los USD 150 por migrante, dependiendo de la ruta que ofrezcan, y su elección puede marcar la diferencia entre un recorrido relativamente sencillo o uno lleno de peligros. Existen documentos que prueban que parte de este dinero va a parar a las arcas del Clan del Golfo, un grupo narco paramilitar con base en Colombia que forma parte del conflicto armado en ese país.

Los testimonios de quienes atraviesan
Los testimonios de quienes atraviesan esta selva son desgarradores. Golpizas, picaduras, violaciones y hasta asesinatos son algunas de las situaciones que deben pasar quienes se atreven a recorrer el supuesto camino hacia un futuro mejor (AFP)

Esta organización delictiva domina el tráfico de migrantes en el Darién y posee el control hegemónico de la región del lado colombiano de la frontera con Panamá. La manera en la que el Clan del Golfo se insertó en este mercado ilegal evolucionó marcadamente en los últimos años y comenzó a ser un problema para la estabilidad en la zona.

Este grupo criminal opera fuertemente desde 2007 y tiene en sus manos a los habitantes del lugar, a quienes extorsiona y amenaza para que cumplan con sus pedidos. Incluso, contrabandistas, pandilleros y narcos menores deben pagarles una suma a los jefes, a modo de dádiva, para poder seguir haciendo de las suyas en el lugar. Del lado panameño, la hegemonía no es total y son varios los grupos que se disputan estas actividades.

El negocio de tráfico de
El negocio de tráfico de migrantes a través del Darién factura semanalmente cerca de 1 millón de dólares. Parte de ese dinero va a parar a las arcas del clan del golfo, un grupo paramilitar narco con base en Colombia. (AP)

Los casos se duplican

La clandestinidad colabora indeseadamente para que la recolección de datos sea difícil, pero se estima que, en 2021, el número de migrantes fue de casi 144.000, mientras que en 2022 la cifra se duplicó y llegó a los 250.000 para finales de año.

Sin embargo, y a pesar de vagos intentos de las autoridades para controlar la situación, los números continúan en aumento.

Seguir leyendo:

Últimas Noticias

La historia de superación de una cirujana del Ejército Argentino reconocida en Estados Unidos

El trabajo de Tamara Almada ganó uno de los premios más importantes del American College of Surgeons. Su presentación fue elegida entre 250. Detrás del ambo, una historia de sacrificio personal y familiar que merece ser contada

La historia de superación de

Más energía para Yacyretá: cómo es el proyecto “Aña Cuá” que ampliará la capacidad de la central

Cuáles son los detalles de las obras y qué impacto tendrán en términos económicos y energéticos para Argentina y Paraguay

Más energía para Yacyretá: cómo

Ciberdelitos, terrorismo y crimen organizado: la nueva política de inteligencia argentina

A través de un decreto, el Gobierno nacional estableció su estrategia para transformar el actual Sistema de Inteligencia Nacional (SIN) en una estructura moderna y acorde a las amenazas contemporáneas del país

Ciberdelitos, terrorismo y crimen organizado:

F-16 para Argentina: el ranking de los 6 mejores aviones caza del mundo según Andrei Serbin Pont

“¿Puedo hacer trampa?”, consulta Andrei Serbin Pont al meterse de lleno en el armado de su propio top 6 de aviones caza. Su pregunta es el preludio de un ranking que, sin duda, generará polémica. La razón de ser de sus elecciones

F-16 para Argentina: el ranking

Antártida: de la primera misa en el continente blanco a la iglesia católica más austral del mundo

Desde el primer oficio religioso realizado en 1946 en la base Orcadas hasta el campanario más austral del mundo erigido en la base Esperanza, exploramos los templos católicos que ofrecen un sostén espiritual a quienes desafían el aislamiento polar

Antártida: de la primera misa