Ejército destruyó 400 explosivos pertenecientes a las disidencias de las Farc en Arauca

El Ejército Nacional de Colombia logró la recuperación de 400 explosivos que pertenecían al frente 10 de las disidencias de las Farc en el departamento de Arauca.

Soldados del Batallón de Operaciones Terrestres N.º 29 de la Décima Octava Brigada de la institución encontraron este material escondido en la vereda La Esmeralda, del municipio de Puerto Rondón, donde ya estaba listo para ser utilizado en contra de las tropas de la fuerza pública y los habitantes de los territorios cercanos.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

“De haberse utilizado, podría haber atentado contra la vida de más de 1.000 personas, entre personal civil y militar, constituyendo una flagrante violación a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario”, afirmó el Ejército en un comunicado.

En el lugar, los uniformados encontraron 270 minas antipersona, 114 artefactos explosivos o mal llamados tatucos, 16 medios de lanzamiento conocidos como ramplas, cinco cilindros adecuados con material explosivo en su interior, además de 25 kilos de pólvora negra, un equipo de soldadura y una remachadora.

Luego de realizar la inspección pertinente del material encontrado, los soldados procedieron con la detonación controlada del mismo.

De acuerdo con los protocolos establecidos por el equipo de explosivos y la unidad militar de demoliciones, las explosiones cumplieron con todas las medidas de seguridad, evitando que estos grupos criminales afectaran los caminos de los campesinos en zonas veredales de la región, así como las afectaciones a la fauna del territorio.

Este frente hace parte del Estado Mayor Central, que estaba encabezado por alias Iván Mordisco, hombre que ya se ha acercado al Gobierno nacional para concertar un proceso de paz. Sin embargo, su continuidad en las actividades criminales lo llevó a apartarse de las negociaciones, por obvias razones.

Desde el Ministerio de Defensa se señala que los períodos de cese al fuego fueron utilizados por estos hombres para adelantar actividades criminales con mayor libertad.

Así lo comentó el ministro Iván Velásquez: “Usted acaba de decir una frase y no quiero dejarla en el aire. ¿Para usted los ceses al fuego fracasaron?”, le preguntó la moderadora de un foro de seguridad al comisionado de Paz, quien respondió: “Exactamente.”

Alias William, presunto cabecilla del Clan del Golfo en el municipio de Soledad, fue capturado junto a otros 15 individuos en una operación policial en el departamento del Atlántico. La acción, realizada en una finca ubicada en la vía entre Galapa y Paluato, también resultó en la detención de alias Winsy y alias Dary, quienes son señalados de participar en actividades delictivas como homicidio, extorsión y tráfico de estupefacientes, según informó la Policía Metropolitana de Barranquilla.

La operación fue ejecutada por la Unidad Básica de Investigación Criminal de la Seccional de Protección y Servicios Especiales, con el apoyo de las Seccionales de Investigación Criminal e Inteligencia, y el Grupo de Operaciones Especiales de la Policía. Durante el allanamiento, las autoridades incautaron dos armas traumáticas tipo fusil, un arma de fuego, un vehículo tipo buseta y cuatro vehículos particulares. Además, se encontraron $500.000 en efectivo, ocho teléfonos celulares y numerosos panfletos con mensajes extorsivos.

Según el informe policial, los capturados estaban reunidos con miembros de otro grupo criminal conocido como Los Pepes, con el objetivo de planear nuevos atentados en la región. El comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, Edwin Urrego, destacó la importancia de la operación al señalar que se trataba de una reunión para coordinar actividades delictivas en la ciudad.

La captura de estos individuos representa un golpe significativo para las organizaciones criminales que operan en la zona, ya que se presume que estaban involucrados en la planificación de actos violentos y extorsiones. Las autoridades continúan investigando para desmantelar por completo las redes delictivas y garantizar la seguridad en el área.