Ni en el ojo del huracán, ni en el centro de la tormenta, los estudiantes del colegio Tapias, sede La Cabaña, estudian en el cráter de un volcán que, a pesar de encontrarse inactivo desde hace 800 años, no deja de ser una amenaza, de acuerdo con Servicio Geológico Colombiano (SGC).
Tanto así que, a la entrada de la institución, se encuentra un letrero que no solo les da la bienvenida a los estudiantes y padres de familia, sino también advierte sobre los peligros de esta estructura geológica y qué hacer en caso de erupción.
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Yurani Muriel, que enseña a los cinco niños de edades entre los 6 y los 9 años y, en sus tiempos libres, da recorridos por la zona para hacer algo de dinero extra, explicó que con el tiempo se han acostumbrado a vivir en la incertidumbre y formar a los niños desde pequeños para actuar en casos de emergencia.
Sin embargo, según dijo en entrevista para EFE, “la vida es muy tranquila aquí, rodeada de campesinos y su ganadería”, que, a pesar de los peligros, se niegan a dejar el cráter y con él la finca en la que han trabajado por décadas, como es el caso de Genaro.
Su decisión de permanecer en Cerro Machín no responde a la falta de conocimiento sobre los peligros de hacerlo. De hecho, en la casa de Genaro hay una estación de monitoreo del mismísimo SGC, pero habiendo vivido durante años con el miedo constante parecen haberse acostumbrado, incluso los niños que, para ir al colegio, deben subir la montaña durante 40 minutos.
Mientras, su profesora permanece preparada y, ante cualquier eventualidad, asegura estar lista para proteger a sus estudiantes:“Sigo la página del SGC, estoy atenta a los reportes semanales y a cualquier cambio en la actividad del volcán”
Científicos desmienten que bajo el santuario de Monserrate se esconda un volcán:
El cerro de Monserrate, una de las principales atracciones turísticas y religiosas de Bogotá, está rodeado de numerosos mitos y leyendas. Entre ellos, destaca la creencia de que existe un volcán dormido bajo el santuario de la basílica, una afirmación que suele cobrar cierta relevancia cada que un volcán parece amenazar la vida de los colombianos.
Este rumor comenzó a ganar fuerza en 2006, tras la publicación de un artículo en la Revista de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, en el que se mencionaba la posibilidad de vulcanismo joven en la Sabana de Bogotá. Sin embargo, expertos han desmentido esta teoría. El geólogo colombiano David Tovar calificó la hipótesis como “extraordinaria” y basada en “evidencia pobremente recolectada”, afirmando que sería “físicamente imposible” que existiera un volcán en esta región.
El Servicio Geológico Colombiano también refutó esta idea, explicando que la única cordillera volcánica en el país es la Cordillera Central. Según sus estudios, hace 120 millones de años, la zona que hoy conforma esta cordillera era un océano, donde volcanes submarinos hacían erupción. Actualmente, no hay evidencia de actividad volcánica en la Cordillera Oriental, donde se encuentra Bogotá y el cerro de Monserrate.
De este modo, los científicos aclaran que, aunque el cerro de Monserrate esté rodeado de leyendas, la posibilidad de que exista un volcán bajo su santuario no tiene sustento geológico.
Otros mitos sobre Monserrate
Monserrate, uno de los destinos turísticos más icónicos de Bogotá, está envuelto en una serie de mitos que han perdurado a lo largo de los años. Entre ellos, uno de los más populares es la creencia de que las parejas que suben juntas a este cerro podrían terminar separándose, una superstición que despierta temor entre los más supersticiosos.
A diferencia de quienes sufren de acrofobia o agorafobia, este mito afecta a aquellos que creen que la relación amorosa podría romperse simplemente por ascender el cerro en pareja. Algunos aseguran que la ruptura es inevitable, del mismo modo que no se pasan el salero en la mesa “para no pelear”. Sin embargo, otra versión de la leyenda sugiere que el Señor Caído de Monserrate, la venerada figura religiosa del lugar, solo separa a aquellas parejas que no estaban destinadas a estar juntas.
Aunque no hay evidencia científica que confirme la veracidad de este mito, muchas personas afirman haber experimentado o conocido a alguien que sufrió una separación tras su visita al santuario. Una de las historias más impactantes la comparte Leidy Díaz, guía turística del Instituto Distrital de Turismo de Bogotá. En una entrevista referenciada por Prisa Media, Díaz recordó un incidente que la hizo cuestionar el mito.
“Alguna vez una persona me pidió que le prestara electricidad para conectar un bafle porque iba a dar un concierto a la novia de su amigo, que estaba abajo en la taquilla para subir. Él tenía un ramo de flores y, después de esperar mucho tiempo, nunca subieron los enamorados. Según el amigo que estaba arriba, la pareja se había peleado en la taquilla; no alcanzaron a subir y terminaron su relación”, relató Díaz.
Estas historias alimentan la leyenda de Monserrate, un lugar lleno de misticismo que, más allá de su valor turístico y religioso, sigue siendo escenario de creencias populares que desafían la lógica.