Migrantes colombianos en Estados Unidos aseguran que fueron engañados: los enviaron de Florida a California por orden del gobernador Ron DeSantis

Disfrazados como programas de reubicación de migrantes, desde el 2022, los estados cercanos con México gobernados por republicanos, como Florida (Ron DeSantis) y Texas (Greg Abbott), han estado enviando buses y aviones con personas indocumentadas al centro del país, a manera de protesta, contra las políticas migratorias del presidente Joe Biden.

Así lo han advertido organizaciones de derechos humanos frente a acciones como las del también candidato presidencial Ron DeSantis quien, el pasado viernes 2 de junio, envío en un avión privado a 16 migrantes colombianos y venezolanos a Sacramento, capital del Estado de California, en donde, una vez en tierra, habrían sido abandonados frente a una iglesia.

Todos, de acuerdo con el fiscal general de California, Rob Bonta, que tendrían documentos que los relacionan con la administración DeSantis y, además, cabe la posibilidad de que hayan sido engañados, para abordar el vuelo hacía Sacramento.

Una acción “peligrosa e inaceptable” que podría estar “poniendo vidas en riesgo (…) y ejerciendo mucha presión sobre los estados”, a los que han sido enviados migrantes en masa, sin ninguna coordinación con sus autoridades locales, según la portavoz del Gobierno, Karine-Jean Pierre.

La decisión del gobernador de Florida generó una cruda respuesta de su homólogo en California, Gavin Newsom, quien lo llamó “pequeño y patético hombre” y le recordó que su estado “no es Martha’s Vineyard”, refiriéndose a la pequeña isla de Massachusetts a la que fueron enviados medio centenar de migrantes, en septiembre del 2022.

Ya entonces la Oficina del Alguacil del Condado de Bexar (Texas), recomendó al fiscal del distrito interponer cargos contra DeSantis. De ahí que, a renglón seguido, se preguntara “¿Cargos por secuestro?” y citara un fragmento del Código Penal en el que se aborda el delito de secuestro:

“Toda persona que, estando fuera de este estado, secuestre o tome por la fuerza o con fraude a cualquier persona en contra de la ley del lugar donde se comete el hecho, y la traiga, envíe o lleve a esa persona dentro de los límites de este estado, y sea luego encontrado dentro de los límites de la misma, es culpable de secuestro”.

Que sea o no un secuestro aún está por verse; sin embargo, el Departamento de Justicia de California inició una investigación para determinar quién costeó los gastos de viaje de los 16 migrantes y si acaso conocían las condiciones en las que se daría su traslado.

DeSantis, lejos de realizar algún pronunciamiento, habría enviado un segundo avión este lunes, 5 de junio, con destino Sacramento, abordado por 20 migrantes cuya nacionalidad aún no ha sido revelada, según la portavoz de la oficina del fiscal del Estado, Tara Gallegos.

Mientras, desde Florida, la presidenta del partido demócrata, Nikki Fried, tachó el traslado de cruel e inhumano: “Estos vuelos de migrantes están en el límite del tráfico de personas, y todos los involucrados deberían avergonzarse de sí mismos. Las personas vulnerables están siendo coaccionadas y engañadas para participar en estos programas sin saber que no hay un plan sobre cómo cuidarlas”.

Argumentos que serían expuestos en la demanda que la organización Abogados por los Derechos Civiles (LCR) interpuso en nombre de los afectados, insistiendo que “este último incidente” es materia de investigación en aras de “determinar si, al igual que nuestros clientes de Martha’s Vineyard, se mintió y engañó a estos inmigrantes más recientes para inducirlos a viajar”.

El republicano presentó el 24 de mayo formalmente su candidatura a las elecciones presidenciales de 2024 en los Estados Unidos. El anuncio se dio a través de un documento entregado a la comisión electoral federal, horas antes del lanzamiento de su campaña en un encuentro con Elon Musk difundido en Twitter.

Además, su equipo de trabajo divulgó en redes un video que confirmó el inicio de su carrera por la Presidencia de los EEUU en el que reproducen un discurso grabado por el actual gobernador de la Florida en el que sentencia: “Nuestra frontera es un desastre, el crimen infesta nuestras ciudades, el gobierno federal hace más difícil que las familias lleguen a fin de mes y el presidente se tambalea. Pero el declive es una opción; el éxito es alcanzable y merece la pena luchar por la libertad”.

Y, tras su esperada reunión con Elon Musk añadió: “El declive estadounidense no es inevitable. Es una elección, y debemos elegir una nueva dirección, un camino que nos lleve a la revitalización de Estados Unidos. Debemos devolver la cordura a nuestra nación”.