Se llega a 11 líderes sociales asesinados en Colombia con el homicidio de José Isaías Yandi en Cauca

Se destacó por su trabajo en el corregimiento de Riochiquito, donde se desempeñó como presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de la población de Alto Palmar

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Mayo fue el mes con más desplazados, pues 11.400 personas tuvieron que abandonar su hogar, principalmente en el departamento de Nariño (fronterizo con Ecuador). Fotografía de archivo. EFE/Ernesto Guzmán Jr.
Mayo fue el mes con más desplazados, pues 11.400 personas tuvieron que abandonar su hogar, principalmente en el departamento de Nariño (fronterizo con Ecuador). Fotografía de archivo. EFE/Ernesto Guzmán Jr.

No cesa el exterminio de líderes sociales en el país y durante enero se tiene un registro inicial de 11 homicidios de estas personas que representan y trabajan por sus comunidades, luego de que se confirmara el crimen de José Isaías Yandi, el cual fue perpetrado en el municipio Páez, en el nororiente del departamento del Cauca.

En el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) informaron que Yandi fue ultimado por un grupo de hombres armados que lo sacó de forma violenta de su hogar para después dispararle en una zona cercana.

Su liderazgo era reconocido en el corregimiento de Riochiquito por lo que fue escogido para que se desempeñara como presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de la población de Alto Palmar, en el mencionado municipio caucano.

Indepaz recordó que la Defensoría del Pueblo emitió la alerta temprana 029/20 con la que se advertía que varias de las provincias de Páez solían ser antiguas zonas de influencia de la extinta guerrilla de las FARC, pero tras el abandono de la lucha armada de ese otrora grupo al margen de la ley otras estructuras criminales comenzaron a delinquir en esa zona del departamento.

“(Están) siendo ocupadas por grupos armados ilegales, particularmente por la facción autodeterminada “Columna Móvil Dagoberto Ramos”, cuyo accionar se concentra en la captación de rentas provenientes del desarrollo economías ilegales, especialmente del narcotráfico, e imposición de contribuciones arbitrarias e ilegales a comerciantes y pobladores como forma de financiar su expansión en la región. Este escenario involucra diversas formas de control social”, indicaron.

Aunque el gobierno Nacional, con su política de Paz Total, busca que los grupos armados ilegales que delinquen en el país inicien procesos para que abandonen la violencia, por el momento el panorama de violencia en contra de los líderes sociales no cambia y se debe sumar el homicidio de Edilsan Andrade, una reconocida lideresa social en el sector de Loma Baja, una de las veredas de Rosas, también en el departamento del Cauca, informaron en Indepaz.

El asesinato de Andrade se perpetró durante la noche del pasado martes 31 de enero frente a uno de sus hijos luego de que la sacaran a la fuerza de su vivienda y le disparan en plena vía pública, destacaron del crimen en el periódico El Tiempo.

La mujer era reconocida por su trabajo en el Comité de Integración del Macizo Colombiano (CIMA), así como por haber sido candidata al Concejo del municipio por el partido Alianza Social Independiente (ASI) durante las elecciones regionales del 2019, agregaron en Indepaz.

Previo a este crimen se tenía el reporte del homicidio de de Gerardo Vásquez, precandidato a la alcaldía del municipio de Mogotes (Santander) por Colombia Humana. El asesinato fue perpetrado por dos sicarios que lo interceptaron cuando se dirigía hacia su vivienda y le dispararon en repetidas ocasiones hasta acabar con su vida.

“Esta persona se encontraba en un sector rural de la vía San Gil-Mogotes, cuando fue afectado con un arma de fuego y desafortunadamente le causó la muerte”, indicó la coronel Yurian Romero, comandante de la Policía de Santander.

Tras este primer mes del 2023, el balance de los crímenes de líderes sociales sigue siendo negativo luego de que el año pasado fuera uno de los más violentos en contra de estas personas, ya que según cifras reveladas por la Defensoría del Pueblo, durante 2022 fueron asesinados 215 de ellos, destacando que la mitad de estos hechos ocurrieron en solo cinco departamentos del país: Nariño (35), Cauca (26), Antioquia (22), Putumayo (22) y Valle del Cauca (12).

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