Kosovo retiró las barricadas tras aplazar la aplicación de nuevas normas fronterizas para los serbios

Tras el aumento de tensiones en la zona, y luego de una reunión con el embajador estadounidense, el primer ministro kosovar decidió suspender las medidas por un mes

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Soldados de la OTAN saludan
Soldados de la OTAN saludan a un transportista cerca de Zubin Potok, tras la remoción de las barricadas (AFP)

Los serbios del norte de Kosovo retiraron este lunes las barricadas que cerraban dos pasos fronterizos con Serbia, después de que las autoridades de Pristina aplazaran la aplicación de nuevas medidas de viaje que desataron las tensiones.

Los camiones y las barreras estaban siendo retirados de las carreteras, según un reportero de la AFP, horas después de que una serie de tiroteos y sirenas de ataque aéreo en el norte de Kosovo hicieran que se dispararan las tensiones en el disputado territorio en el que viven tanto serbios como albaneses étnicos.

La zona ha sido durante mucho tiempo un punto álgido entre las dos comunidades tras la amarga guerra de la década de 1990 que desencadenó una campaña de bombardeos de la OTAN, que allanó el camino para la declaración unilateral de independencia de Kosovo de Serbia en 2008.

Los últimos disturbios se produjeron tras la decisión de las autoridades kosovares de introducir un nuevo conjunto de documentos de viaje para las personas que entren en el territorio con documentos de identidad serbios.

Camiones habían bloqueado las rutas
Camiones habían bloqueado las rutas (Reuters)

El gobierno también dijo que los serbios étnicos que tienen placas de matrícula de vehículos emitidas por Serbia tendrían que cambiarlas por placas de matrícula de Kosovo en un plazo de dos meses.

El Primer Ministro de Kosovo, Albin Kurti, describió las nuevas normas como una medida recíproca que imita las regulaciones impuestas a los kosovares que viajan a Serbia.

Sin embargo, Kurti pareció dar marcha atrás -posponiendo la aplicación de las medidas durante un mes- tras reunirse con el embajador estadounidense en la capital, Pristina, a última hora del domingo.

Los informes sobre los tiroteos contra la policía en el norte de Kosovo el domingo despertaron el temor de que los disturbios se extendieran en la tensa región.

En un contundente comunicado emitido por las fuerzas de la OTAN estacionadas en el territorio, la alianza se comprometió a “intervenir si se pone en peligro la estabilidad” en Kosovo.

Los serbios del norte de Kosovo se niegan desde hace tiempo a reconocer la autoridad de Pristina y se mantienen en gran medida fieles al gobierno serbio de Belgrado, que proporciona un lucrativo apoyo financiero a su comunidad.

Las conversaciones entre Kosovo y Serbia dirigidas por la UE, iniciadas en 2011 para normalizar los lazos entre los antiguos enemigos, no han conseguido llegar a un acuerdo.

Kosovo está reconocido por un centenar de Estados, incluidos Estados Unidos y la mayoría de los países de la UE, mientras que Serbia y sus poderosos aliados, China y Rusia, se niegan a reconocer su independencia.

(Con información de AFP)

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