Las autoridades españolas detuvieron este miércoles un megayate llamado “Crescent” que se cree que pertenece a Igor Sechin, el sancionado director general del gigante petrolero ruso Rosneft, dijo una fuente policial a Reuters.
El yate, de 135 metros de eslora y definido por las publicaciones especializadas como uno de los más grandes del mundo, navega con bandera de las Islas Caimán y llegó a España procedente de Italia en noviembre de 2021, según la web de seguimiento Marine Traffic.
El Ministerio de Transportes español, que confirmó la detención pero no la propiedad, dijo que había atracado en la ciudad portuaria mediterránea de Tarragona el pasado 2 de noviembre y que había solicitado permiso a los guardacostas para partir el 4 de marzo, pero que nunca llegó a zarpar.
Dijo que retendría el yate mientras intentaba determinar su propiedad y si el propietario estaba afectado por las sanciones de la Unión Europea dirigidas a los oligarcas y a los políticos rusos por la invasión a Ucrania.
Una fuente de la policía española dijo a Reuters que creen que el yate pertenece a Sechin, un estrecho aliado del presidente ruso Vladimir Putin que está en las listas de sanciones de Estados Unidos, el Reino Unido y la UE.
Otro yate que se cree que pertenece a Sechin, sancionado por la UE el 28 de febrero, fue incautado por las autoridades francesas el 4 de marzo.

Una portavoz del puerto deportivo de Tarragona dijo a Reuters que el Crescent estaba registrado a nombre de una empresa no rusa, aunque declinó dar el nombre. “No hay barcos con bandera rusa o de propiedad directa en el puerto deportivo”, dijo.
Según la publicación especializada Superyacht Fan, el Crescent, de construcción alemana, es uno de los mayores yates del mundo y se rumorea que ha costado más de 600 millones de dólares. La publicación afirma que entre sus características se encuentran un hangar retráctil para helicópteros y una piscina con fondo de cristal.
El Crescent es el tercer yate vinculado a oligarcas rusos detenido por las autoridades españolas en tres días.
El martes, las autoridades de Mallorca detuvieron un yate llamado Lady Anastasia, propiedad del oligarca ruso Alexander Mikheyev, que está sometido a sanciones de la Unión Europea. El lunes detuvieron el Valerie, una embarcación en reparación en un astillero de Barcelona y vinculada al jefe del conglomerado aeroespacial y de defensa ruso Rostec, Sergei Chemezov, que está sometido a sanciones de Estados Unidos.
Por Belén Carreño y Joan Faus (Reuters)
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