La “Tuta”, ex líder de los Caballeros Templarios, se amparó para tener ropa interior y calcetines

El capo que pasó de las aulas al narcotráfico sufre por condiciones dignas dentro de la cárcel, donde estaría hasta su cumpleaños 108, según fue sentenciado en 2019

Compartir
Compartir articulo
El profesor pasó de las aulas a comandar grupos de sicarios (Foto: Archivo)
El profesor pasó de las aulas a comandar grupos de sicarios (Foto: Archivo)

Servando Gómez Martínez, la Tuta, viejo líder y fundador de los Caballeros Templarios, pasó de comandar uno de los grupos delictivos más notables a padecer de las necesidades más básicas de vestimenta.

La Tuta tramitó un amparo para que la dirección del Centro Federal de Readaptación Social no. 1 Almoloya, donde está recluido, le permita ingresar prendas interiores a través de su defensa o familiares.

Según la denuncia del Profe, los presos del penal del Altiplano no cuentan con ropa ni zapatos adecuados, además, aquella que poseen se encuentra en muy malas condiciones o en estado deplorable, de ahí su petición a las autoridades. Entre otras ropas solicita que puedan llevarle trusas, camisetas, playeras y tenis, según parte del reclamo compartido en redes por el periodista Marcos Muedano.

“La falta de insumos de uso personal, autorización inmediata de ingreso por parte de los defensores particulares y/o familia por medio del área de oficialía de partes común de ropa interior (truzas y/o bóxer, camisetas, playeras), calcetas, calzado, calzado tipo tennis ya que la mayoría de los PPLS [Personas Privadas de la Libertad] no cuentan con ropa y calzado adecuada, es decir la que poseen se encuentra en su mayoría en estado deplorable y en muy malas condiciones (sic)”, señaló el capo.

El texto del reclamo fue compartido en Twitter por Marcos Muedano (Foto: Twitter@marcosaariel)
El texto del reclamo fue compartido en Twitter por Marcos Muedano (Foto: Twitter@marcosaariel)

Gómez Martínez fue capturado el 27 de febrero de 2015 en un barrio pobre de Morelia, por un grupo especial de la Policía Federal y del Ejército que le siguió la pista desde mayo de 2013, cuando las autoridades iniciaron una ofensiva contra los grupos de narcotráfico que operaban en Michoacán.

Por todos esos años, Servando Gómez fue uno de los delincuentes más buscados en el país, pues fue acusado por la extinta Procuraduría General de la República (PGR) de ser uno de los fundadores de La Familia Michoacana (2004), que después dio paso al grupo de Los Caballeros Templarios.

De acuerdo con las autoridades, con ese cártel la Tuta controlaba la producción y tráfico de drogas, extorsiones, secuestros y homicidios.

A Servando Gómez se le vinculó con la cúpula de poder del estado de Michoacán. En julio de 2014, un video capturó una conversación que tuvieron el líder de Los Caballeros Templarios y Rodrigo Vallejo Mora, hijo del ex gobernador del estado.

Otro político que fue asociado a este narcotraficante e incluso pasó cuatro años en prisión, fue el gobernador interino, Jesús Reyna García.

La Tuta, ex líder de la familia michoacana, habla sobre Los Viagra, que primero fueron aliados y luego sus enemigos.

Aficionado a las peleas de gallos y la música banda, con facilidad de palabra y don de convencimiento, a la Tuta las autoridades lo calificaban como un hombre inteligente, calculador, manipulador y mediático.

En junio de 2019, el narcotraficante fue sentenciado a 55 años de prisión por el secuestro de un empresario, según comunicó la Fiscalía General del estado de Michoacán.

Las autoridades confirmaron que el Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE) condenó a la Tuta por un secuestro que se llevó a cabo en Uruapan, en agosto de 2011.

Pues se acreditó “su plena responsabilidad en el secuestro”, de ahí que el capo fuera hallado culpable de haber ordenado el crimen, aunque después la víctima fue rescatada sana y salva por la Fiscalía General del Estado.

Actualmente, Gómez Martínez se enfrenta a procesos judiciales por los delitos de delincuencia organizada y narcotráfico. Por lo pronto, la sentencia que pesa sobre él le permitiría abandonar la cárcel a los 108 años.

SEGUIR LEYENDO: