La historia del tiroteo en el Colegio Americano del Noreste, en Monterrey, a casi tres años del suceso

El horror que causó un tiroteo esta mañana en México y que dejó al menos dos muertos y seis heridos en una institución educativa de Torreón, dio muestra de una tragedia más en una escuela, pues el 18 de enero de 2017 otra balacera se suscitó en una institución educativa, pero en el interior del Colegio Americano del Noreste, en Monterrey.

La noticia de que un alumno disparó contra varios de sus compañeros y la maestra, quien perdió la vida dos meses después del ataque, estremeció al país hace casi tres años.

Eran aproximadamente las 08:51 horas de aquel enero de 2017, cuando el alumno Federico “N”, de 16 años de edad, sacó un arma calibre 22 de su mochila y disparó a corta distancia contra la profesora y compañeros, dentro del aula de la institución privada, ubicada en el paseo residencial al sur de la ciudad de Monterrey, en Nuevo León.

Según versiones, el agresor abrió fuego también contra varios estudiantes y luego intentó dispararse, sin éxito. Por ello, tomó una caja de cartuchos que llevaba y finalmente, sí logró quitarse la vida con un tiro en la barbilla. El saldo de esa tragedia fue de dos muertos, entre ellos el atacante y tres heridos.

Una entrevista realizada por Telemundo a un alumno, reveló algunos detalles extras de ese día de violencia y terror que vivieron maestros y alumnos de la escuela.

El estudiante, cuya identidad no pudo ser revelada por razones de seguridad, narró los primeros momentos del día de la balacera.

“Vi como fue por el arma y todo eso. Estábamos haciendo un examen de química sobre la tabla periódica y cuando la maestra recogía los exámenes, de repente se giró, y ya tenía el arma en alto”, dijo.

Su explicación siguió sobre el momento en que descargó el arma contra su maestra y contra sus compañeros de clase.

“Le disparó a la maestra, luego maldijo a un compañero y le disparó, giró hacia otras mesas y disparó dos veces más… y luego se disparó a sí mismo y terminó en el suelo”, dijo el menor en entrevista telefónica.

Además, aseguró que él salió huyendo del lugar tras el tiroteo: Yo estaba bajo un banco viendo, tratando de que no me diera, cuando vi que cayó al suelo me levanté y salí corriendo hacia la puerta”.

La profesora fue identificada como Cecilia Cristina Solís, de 27 años de edad, mientras que los estudiantes más afectados fueron: Luis Fernando Ramírez y Ana Cecilia Díaz Roma, así como Manuel Chávez, quien no fue herido de gravedad.

Ana Cecilia, la única niña herida, salió del hospital Muguerza Sur, el 25 de febrero de 2017, tras ser internada por un balazo en la cabeza; sin embargo, presentó rápida mejoría, pues hablaba coherente y caminaba sin asistencia.

Luis Fernando no corrió con la misma suerte, ya que también con un disparo en la cabeza, fue dado de alta del Hospital Universitario, el 15 de marzo del mismo año y cuando dejó la clínica presentó disminución de la movilidad en una parte de su cuerpo y sólo podía comunicarse con señas.

El año pasado Luis Fernando anunció para algunos medios de comunicación, que actualmente y tras varias terapias físicas, cognitivas y de aprendizaje, ya puede hablar y caminar.

Manuel Chávez, quien recibió un disparo en el brazo salió del hospital un día después del ataque, ya que sólo sufrió un “rozón” de bala.

Esta mañana, Jorge Zermeño, alcalde de Torreón, llamó a los padres de familia a reflexionar sobre el hecho que surgió hoy dentro del Colegio Cervantes, en Coahuila, ya que un niño de 11 años, presuntamente influenciado por un videojuego, asesinó a su maestra y lesionó a cinco de sus compañeros y un maestro.

“Vivía con su abuela y no sabe uno si tenía algún problema o que sucede. Es una tragedia, es una cosa muy lamentable”, reiteró Zermeño.

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